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Los sindicatos decidirán si van a la huelga general tras analizar el documento final del Gobierno

  • La convocarán si la reforma "lesiona" los derechos de los trabajadores
  • El escollo para pactar ha sido el coste y las condiciones del despido

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El responsable de Comunicación de CC.OO., Fernando Lezcano, afirma que los sindicatos decidirán si convocan o no una huelga general después de analizar el documento definitivo sobre la reforma laboral que el Gobierno se ha comprometido a remitirles mañana tras haber fracasado las negociaciones.

"Vamos a ver qué texto se nos envía como definitivo y en función de eso fijaremos nuestra posición última", ha señalado Lezcano en Radio Nacional.

Lezcano recuerda que los sindicatos sólo irán a la huelga si el decreto que apruebe el Ejecutivo el próximo 16 de junio "lesiona" los derechos de los trabajadores.

El portavoz de CC.OO. confirma que el coste y facilitar el despido siempre han sido los problemas "medulares" de esta negociación, no esta noche, sino durante todos los meses en los que se ha estado debatiendo.

Lezcano asegura que si los sindicatos no se ven reflejados en el texto final y la reforma "bascula más hacia las posiciones empresariales", harán todo lo que "esté en su mano" para evitar que el decreto prospere, y para ello mantendrán contactos con los grupos parlamentarios.

Punto muerto

Lezcano explica que de la mesa de negociación "no se ha levantado nadie" porque Gobierno, empresarios y sindicatos tenían la misma vocación, la de llegar a acuerdos. Sin embargo, la negociación llegó a un punto "en el que era obvio que no se iba ni  para delante ni para detrás y dilatarlo más no iba a ayudar".

Por eso, se han cerrado las negociaciones con el compromiso de que el Gobierno haga llegar el viernes a sindicatos y empresarios un documento concretando la reforma laboral. Luego, por la tarde, el Ejecutivo se reunirá con los agentes sociales, aunque por separado, en lo que podría considerarse un mero trámite de consulta.

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, lo explicaba así a la salida del encuentro maratoniano que terminó sin el acuerdo de las partes: "La fase  siguiente es que el Gobierno nos va a remitir lo que se supone que es el texto definitivo. Nos lo remitirá el viernes a última hora de la mañana, lo analizaremos y vendremos a una reunión a partir de las seis de la tarde y en esa reunión daremos nuestra visión sobre el  texto definitivo", ha apuntado.

"Un pan con unas hostias"

El secretario general de CC.OO, Ignacio Toxo, advierte al Gobierno de que "tiene una papeleta", por lo que le aconseja que "procure no hacer demasiado de  Salomón", puesto que no hay "equilibrio entre la posición empresarial  y sindical" y puede acabar haciendo "un pan con unas hostias".

Toxo ha avisado al ejecutivo de que debe asumir una "perspectiva de transformación del modelo económico o puede hacer un pan con unas hostias". Apunta que la reunión del viernes "puede terminar de mala manera, pero todavía hay alguna oportunidad y nosotros vamos a insistir en intentar aprovecharla".

El líder de Comisiones niega la posibilidad de que esta reunión suponga el cierre del diálogo social, aunque sí reconoce que se trata de un "episodio muy  importante", pero no el fin del diálogo. "O al menos yo no lo entiendo así", concluye.