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57ª edición del Festival de San Sebastián, no basta con sobrevivir en tiempo de crisis

  • Quince películas, entre ellas cuatro con participación española, a por la Concha de Oro
  • Atom Egoyan, Juanjo Campanella, Rodrigo Garcia o François Ozon, entre los candidatos
  • El presidente del jurado y tres películas dan a la cita un marcado tono francés
  • Sir Ian McKellen recibirá el Premio Donostia el miércoles 23
  • Especial Festival de cine de San Sebastián 2009

Por
Jose Fernández: "¿Se notará la crisis en San Sebastián?"

Si hay algo que juega a favor del festival de cine de San Sebastián no es la presencia de Brad Pitt y Quentin Tarantino (el bello y el bestia) o de Naomi Watts o de Robert Duvall. Que juega. No es que se presenten películas de Atom Egoyan, Fernando Trueba, Jim Jarmusch, Juan José Campanella o el 'hollywood-made man' -e hijo de García Márquez- Rodrigo García. Ni que el premio Donostia sea para Ian McKellen. Aunque todo eso importe mucho.

Si la 57ª edición del festival de San Sebastián, con sus diecisiete películas en sección oficial (quince a concurso), con sus más de cien películas entre las diferentes secciones, con sus buscadores de autógrafos, con sus pintxos y sus saraos nocturnos, con su alfombra, con su cine minoritario y sus legiones de espectadores... Si el Zinemaldia 2009 puede contar con una baza también en tiempos de crisis esa es la promesa de lo incumplido, la expectación por lo no consumado.

Cada año, cuando San Sebastián inaugura su festival de cine, sueña, como quien le quita el celofán al regalo, que ese año sí que sí, que esta vez será mejor que nunca. Que el espíritu de los que pasaron por la ciudad se extenderá e iluminará más que las farolas. Hitchcock, Bette Davis, Buñuel, Charlton Heston, Fritz Lang, Liz Taylor, Orson Welles, Audrey Hepburn...

En esta ocasión, si hay que buscarle una etiqueta a la cita, lo fácil es pensar en crisis. Y es verdad que esta vez el evento dura un día menos. Podría hablarse de una edición que mira a Francia: el presidente del jurado de la sección oficial es Laurent Cantet (director de La clase) y tres de las quince películas a concurso son galas. Tal vez acabe siendo el festival de Ricardo Darín, que protagoniza dos de las películas en la sección oficial, la de Campanella y la de Trueba.

¿Será este el festival de Ian McKellen, galardonado con el Premio Donostia?

Sobreponerse al peligro del silencio

Es difícil saberlo. Ni aunque concedas un premio Donostia a Meryl Streep, como en la última edición, puedes salvarte de que se muera Paul Newman el día de la clausura y te eclipse.

Desde el punto de vista exclusivamente cinematográfico, el festival tiene que sobreponerse a algunas carencias, especialmente al hecho de que las películas que se presentan en sección oficial tienen un irregular recorrido en España. Un ejemplo, Frozen River, que en 2008 logró la Concha de Plata a mejor actriz (la nominada al Oscar Melissa Leo), acaba de estrenarse, ¡casi un año después!, en las salas españolas.

Otro. Pandora's box, que fue la ganadora de la Concha de Oro, ha pasado sin pena ni gloria por nuestros cines. ¿Qué repercusión y prestigio tendrán en el exterior los galardones que se conceden en San Sebastián si ni siquiera en España tienen eco?