Los policías heridos de más gravedad en Pozuelo estarán al menos un mes de baja

Declaran ante el juez 13 de los 20 detenidos en los altercados de las fiestas de Pozuelo de Alarcón

Los dos policías que resultaron heridos de más gravedad durante los altercados que se registraron en Pozuelo de Alarcón la madrugada del pasado domingo ya han sido dados de alta en el hospital pero estarán de baja al menos un mes, según ha informado la Jefatura Superior de Policía.

Uno de los agentes se lastimó una rodilla y el otro una muñeca y, aunque han sido dados de alta en el hospital al que fueron trasladados, no podrán incorporarse a sus puestos de trabajo por lo menos hasta dentro de un mes.

Los otros ocho policías heridos durante los altercados sufrieron heridas leves y fueron atendidos y dados de alta este domingo.

La Jefatura ha precisado que la Policía no trabaja con la hipótesis de que los altercados fueran provocados por grupos organizados de una determinada ideología, sino que se debió a la concentración de cientos de jóvenes que habían ingerido alcohol.

Los altercados se produjeron entre las dos y las seis de la madrugada cerca del recinto de las fiestas de la localidad, después de que la denuncia de un joven que había recibido un botellazo requiriera la presencia de la Policía, lo que desencadenó protestas por parte de cientos de jóvenes que hacían "botellón".

Los jóvenes se enfrentaron a los agentes, a los que llegaron a arrinconar, rompieron mobiliario urbano, quemaron contenedores y dos coches de Policía, dañaron varios más e intentaron asaltar la Comisaría de la localidad.

   

Finalmente diez policías resultaron heridos y la Policía detuvo a veinte personas, siete de ellas menores.

   

Todos los detenidos han pasado ya a disposición judicial, ya que los menores fueron puestos ayer a disposición de la Fiscalía de Menores y los mayores de edad pasaron esta mañana a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Pozuelo, según ha precisado el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.

El alcalde de Pozuelo, el 'popular Gonzalo Aguado,  ha querido transmitir un mensaje de "tranquilidad" y ha responsabilizado de los disturbios a energúmenos de fuera.  Por su parte, los sindicatos policiales han considerado "tercermundista" que se intentara asaltar la comisaría.