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Manuel Zelaya, un empresario metido a presidente

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El presidente de Honduras, Manuel Zelaya, detenido por las Fuerzas Armadas y enviado por la fuerza a Costa Rica, rompe una racha de casi 40 años en que un presidente constitucional no veía  interrumpido su mandato en ese país.

La crisis en la que ha sido depuesto Zelaya, más conocido como "Mel", ocurre tras su insistencia en celebrar una consulta popular sobre una iniciativa suya de reformar la Constitución.

Educado en colegios exclusivos y empresario de éxito en la industria agropuecuaria, Manuel Zelaya Rosales ocupaba la presidencia de Honduras desde enero de 2006, tras la victoria del Partido Liberal Hondureño. Entonces se propuso acabar con la delincuencia de las bandas juveniles, la pobreza y la corrupción.

Es el mayor de una familia de cuatro hijos, con ancestros vascos y nació el 20 de septiembre de 1952 en la ciudada de Catacamas, situada en el departamento de Olancho. Está casado con Xiomara Castro y tienen cuatro hijos (Zoe, Xiomara, Héctor y José Manuel).

Propitario de aserraderos

Hijo de un hacendado local, cursó estudios con los salesianos en Tegucigalpa y luego estudió Ingeniería Civil en la Universidad Autónoma de Honduras, pero abandonó la carrera en el segundo curso para trabajar en el campo, donde es propietario de aserraderos en Olancho.

Allí fue congresista en tres legislaturas hasta dar el paso a las elecciones presidenciales. El primer intento fue en diciembre de 2000, per o sus ambiciones fueron bruscamente frenadas cando su candidatura fue derrotada por la del veterano Rafael Pineda Ponce, quien perdió los comicios frente al conservador Ricardo Rodolfo Maduro.

Zelaya no desistió de sus intereses por la presidencia y durante los cuatro años posteriores continuó con sus planes, mientras lo compatibilizaba con su faceta de empresario prvado.

En febrero de 2005 volvió a presentar su candidatura y se impuso a otros líderes liberales, quienes terminaron cerrando filas en torno a Zelaya. Su campaña la centro en denunciar la pobreza en la que vivían sumergidos 5,5 millones de hondureños del total de 7,4 que tiene el país. Zelaya fue elegido presidente en los comicios del 27 de noviembre de 2005, en los que consiguió 999.006 votos, por los 925.243 de Porfirio Lobo,aspirante del gobernante Partido Nacional.

El 27 de enero de 2006 relevó en la Presidencia a Ricardo Maduro y ese mismo día sancionó una ley que promovía la participación ciudadana, con el fin de combatir la corrupción.

Al cumplirse un mes de su toma de posesión, acusó al Gobierno de su antecesor de haberle dejado en herencia "verdaderas bombas fiscales" al dejarle saqueadas instituciones públicas.

Considerado el mejor ministro en los años 90

El último presidente constitucional de Honduras cuyo mandato se vio interrumpido fue Ramón Ernesto Cruz, que fue objeto de un golpe de Estado por parte de los militares el 4 de diciembre de 1972, cuando llevaba cerca de un año de mandato, y el orden constitucional no se recobró hasta 1982.

El gobernante hondureño, del Partido Liberal, pero considerado por muchos como un populista que ha establecido estrechos lazos con el presidente de

Venezuela, Hugo Chávez, y otros gobiernos izquierdistas de la región, nació en Catacamas, en el departamento norteño de Olancho, el 20 de septiembre de 1952.

En junio de 1975 se produjo en la finca "Los Horcones", propiedad de su padre, una matanza en la que un grupo de militares asesinó a dos sacerdotes extranjeros y 15 campesinos, cuando preparaban marchas para reclamar tierras al Gobierno militar del general Juan Alberto Melgar Castro.

Una comisión militar señaló como responsables de esa acción a dos oficiales, al padre de Zelaya y al propietario de los aserraderos Carlos Bahr.

En la primera mitad de 1994, el presidente hondureño Carlos Roberto Reina lo nombró ministro y director ejecutivo del Fondo Hondureño de Inversión Social (FHIS), destinado a disminuir el impacto en la población pobre de los ajustes macroeconómicos sugeridos por los organismos financieros internacionales.

Su labor al frente del FHIS le valió el reconocimiento de mejor ministro de los gobiernos de Reina y de Carlos Flores, y el nombramiento como alcalde mayor por la Asamblea de Alcaldes hondureños (1997), entre otros reconocimientos.

Tras el paso del devastador huracán "Mitch" a finales de 1998, que dejó en el país 6.500 muertos y destruyó más del 60% de la producción agrícola y la infraestructura vial, puso en macha un programa para que las propias comunidades afectadas elaborasen Planes de Inversión Social Municipal.

En julio de 1999 renunció a la dirección del FHIS, en la que puso en marcha más de 9.000 proyectos de inversión social por más de 170 millones de dólares, para emprender su carrera por la Presidencia.

Para cumplir su promesa electoral de bajar el precio de los combustibles no dudó en licitar su compra, que en noviembre de 2006 se adjudicó a Canoco Phillips, pero el contrato no se ejecutó al carecer el gobierno de terminales de almacenamiento propias.

Gran defensor del ALBA

Para atajar el incremento del precio del combustible, que no cesaba de subir en el mercado internacional, el 28 de enero de 2008 firmó la incorporación a Petrocaribe, por el que Venezuela le suministraría en condiciones de pago favorable. Poco después, en agosto de 2008 incorporó su país a la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), promovida por Venezuela.

Preocupado por el clima de violencia que vivía el país, a finales de agosto de 2006 lanzó un plan para que el Ejército colaborase con la policía en la lucha contra la delincuencia. Beneficiándose de los planes de reducción de deuda acordados por su antecesor con organismos económicos mundiales, en marzo de 2007 el BID le condonó al país 1.367 millones de dólares, reduciendo la deuda a unos 1.660

millones, cuando dos años antes superaba los 5.500. A cambio, el país tenía que seguir trabajando en la Estrategia de Reducción de la Pobreza (ERP).

Durante el mandato de Zelaya se han producido protestas organizadas por la Coordinadora Nacional de Resistencia Popular, que le exigían la derogación de leyes de minería y agua potable, protestaban contra la subida de precios y pedían la aplicación de una estrategia para la redistribución de la riqueza.

Su mandato debe concluir el 27 de enero de 2010, pero desde noviembre pasado ha impulsado una iniciativa para llevar a cabo un referéndum con el fin de reformar la Constitución, consulta que fue declarada ilegal por el Tribunal Supremo y por el Parlamento.

Sus detractores consideran que con esa consulta y la reforma de la constitución que propone, lo que desea Zelaya es despejar el camino para presentarse de nuevo como candidato a la Presidencia en el futuro, algo que prohíben las leyes del país.