Enlaces accesibilidad

La pobreza se viste de niño en España

  • La falta de políticas destinadas a la familia dispara la pobreza infantil
  • El fracaso escolar es la manifestación última de este fenómeno
  • La pobreza severa y alta afecta sobre todo a los niños de entre 6 y 15 años
  • Los hogares en los que un solo progenitor trabaja son los más desfavorecidos

Por

Para ver la pobreza no hace falta acudir a las grandes campañas humanitarias internacionales, sino darte una vuelta por una esquina cualquiera de tu barrio. Antes era -y en parte, sigue siendo- una viuda que apura su pensión en las tiendas del barrio; ahora es un niño, posiblemente inmigrante, que va mal en la escuela mientras su madre se deja la piel para llegar a fin de mes.

No se trata de un retrato dramático de la realidad, sino de la radiografía de buena parte de la sociedad española que se desprende del Informe de Exclusión Social 2008 realizado por Caixa Catalunya.

En total, 1.300.000 niños viven en España de una situación parecida, una cuarta parte de la población infantil de nuestro país. De ellos, la mayoría son españoles, pero en niveles relativos -en función del peso del grupo social en el conjunto de la población- el porcentaje es mucho mayor entre los menores inmigrantes.

En general, se considera pobre a aquel que no supera una renta anual del 60% de la mediana de ingresos del conjunto de la población. En el caso de España, se trata de unos 6.860 ingresos anuales y afecta a casi uno de cada cuatro españoles (19,9%). 

Sin embargo, existen distintos niveles de pobreza. La moderada, la más generalizada, se encuentra en la franja entre los 6.860 euros y los 4.231 euros. En este caso, las franjas de edad más afectadas son los mayores de 66 años y los menores de entre seis y quince años. 

La alta (entre 4.231 euros y 3.037 euros) y la severa ( menos de 3.037 euros) se ceba especialmente con los menores, que no cuentan con la protección social de los jubilados a través del sistema de pensiones. El porcentaje de niños y adolescentes que están en esta franja dobla a los jubilados.

Escasa protección

"Hay una escasa cobertura de política social infantil y juvenil", diagnostica Ángel Font, director del Área de Inclusión de Caixa Catalunya, encargado de coordinar el informe.

Estas políticas se centrarían en el apoyo a la natalidad, las becas para frenar el fracaso escolar, o la ayuda para la educación infantil entre 0 y 3 años.

De esta forma, se podría empezar a combatir un empobrecimiento que no se ha frenado en los años de crecimiento económico por el aumento sostenido del coste de la vida y que puede ir a peor en un escenario de crisis económica.

Hogares monoparentales

"No se trata de un campamento aislado de personas, puede haber una familia en el portal de cada casa", relata Font, que hace hincapié en el enorme cambio social que ha supuesto la incorporación de la mujer al mercado de trabajo.

"Esto ha supuesto un cambio positivo, tal y como revela el informe, porque el porcentaje de familias que ha pasado de un sueldo a dos es importante", defiende el coordinador del estudio, que reconoce que también ha supuesto el aumento de hogares monoparentales, normalmente con una madre trabajadora, que tiene que sacar sola adelante a su familia.

 

Esta situación está acentuada por el fenómeno de la inmigración. Mientras uno de cada cinco menores españoles viven en situación de pobreza, el porcentaje se eleva al 50% en el caso de los menores inmigrantes. 

En el caso de la pobreza severa, la diferencia es tan ilustrativa como descorazonadora: mientras solo un 4% de los niños españoles están en esta situación, en el caso de lo inmigrantes afecta a un 28%, siete veces más.