El Barça tiene un tesoro con Rashford
- Cuando las cosas se le ponen feas, el inglés es el caballo ganador de los azulgrana
- Rafa Mir recompuso a un valiente Elche antes del descanso con un golazo
Pon un cedido en tu vida. Lo que el FC Barcelona ha conseguido con Marcus Rashford es un regalo. Un jugador que te va a dar el 100% en los partidos y capaz de sacarte las castañas del fuego. El inglés tapó la incomodad azulgrana, incapaz de someter en su casa a un valiente Elche que le ganó la posesión a los de Hansi Flick (Barcelona 49%-51% Elche).
“Todo el mundo tiene un plan hasta que recibes el primer golpe en la cara”, decía Mike Tyson. El del Éder Sarabia fue plantarle al Barça la línea de presión en el centro del campo, seña de identidad de los de Flick, y hacerle un marcaje uno a uno a los jugadores azulgrana. Sorprendió el planteamiento de Elche, pero le hizo aguas en diez minutos. Hasta que la cogió el ‘10’.
Dos minutos, dos mordiscos
Dos goles calcados como dos golpes al mentón le llegaron a los ilcitanos. Balde se entrometió en la salida de balón y se encaminó directo a buscar a Lamine Yamal como si supiera que su compañero estaba necesitado de marcar. Yamal recibió, recortó, volvió a dejar su sello con un trallazo cruzado y cambió su celebración llevándose el escudo a los labios. Un pasito más cerca de su mejor versión.
De mordiscos, precisamente, iba la cosa. En el segundo error del Elche Fermín se pegó otro carrerón, haciéndose los 25 metros lisos en un tiempo puntuable y regalándole el segundo a Ferran Torres. Otro al que le hacía falta volver a ver puerta. ‘El tiburón’ hundió los planes del Elche con su tanto nº 50 con el Barça y dedicado a las víctimas de la dana de Valencia.
Rashford le quita la razón a Cruyff
Siguiendo con las citas célebres, una asociada a Johan Cruyff le sonrió a los ilicitanos: “El 2-0 es el resultado más engañoso del fútbol”. El Elche se agazapó, siguió con su plan y aguantó el vendaval de las incesantes llegadas del Barça para soltarse las cadenas y tirar una contra que dejó la partida en un dos para dos. Rafa Mir se lo tomó con toda la paciencia del mundo para colocarla al segundo palo y no pecar de nuevo de exceso de pases. Un gol que avivió el partido.
Que la ventaja de dos goles no volviese al marcador antes de la segunda parte se le debió, en gran parte a Iñaki Peña, que le sacó un manotazo a Ferran Torres, después de que Affengruber tocase el disparo lo justo. Una intervención en doble de difícil.
El partido se tornó frenético con las defensas tan adelantadas. Rashford volvió a ser la baza ganadora por la que el Barça apostaba sus opciones y en el Elche le daban las llaves del equipo a la pierna derecha de Rafa Mir. Esa con la que mandó el balón al larguero azulgrana, rozando el empate y dándole la razón durante gran parte del tiempo a las palabras de Cruyff.
Pero el Barça tiene a Fermín, que sigue empecinado en que se empiece a hablar más de él en cada partido. Con un pase de trivela milimetrado, encontró al inglés para que volviera a reventar otra portería (y otro larguero). Rashford se está convirtiendo ya en un jugador imprescindible para que Raphinha se lo tome con calma su regreso. Se marchó aplaudido de un Montjüic que volvió a ver a Robert Lewandowski sobre el césped donde los azulgrana arrancaron de la mejor manera posible el temido mes de noviembre.