Joao Almeida inscribe su nombre en la mítica cima del Angliru y aprieta la general de la Vuelta a España 2025
- El portugués ha tirado gran parte de la subida con Vingegaard por detrás, que cedió los 4'' de bonificación
- UAE logra su sexta etapa en la Vuelta a España 2025
Llegó, vio y venció. Las imperiosas rampas del Angliru han coronado a Joao Almeida (Team UAE) tras una dura batalla ante Jonas Vingegaard. El portugués, que se mostró muy fuerte en la subida final, ganó en el sprint a dos y demuestra que Vingegaard no se puede despistar si quiere hacerse con la Vuelta. UAE consigue, además, su sexta victoria en trece etapas, dejando claro que son el mejor equipo del mundo.
Los dos mejores de esta Vuelta se quedaron solos a falta de más de cuatro kilómetros para jugarse la etapa en la bajada final. El portugués reduce 4'' su diferencia con Vingegaard tras las bonificaciones, quedándose a 46'' del danés. La lucha por el podio se aprieta tras la crisis de Pidcock y el buen rendimiento de Hindley (Red Bull Bora) en esta etapa, que acabó tercero a solo 28'' de los dos mejores. De esta forma, Pidcock sigue tercero pero tiene ya a Hindley a 46'' y a Gall a 57''.
Visma tenía la victoria marcada en rojo
Otra vez una fuga masiva, como en la jornada anterior, marcaría la etapa. Hasta veinticinco ciclistas retaron al pelotón en una jornada que comenzó rapidísimo.
Tras dos horas de carrera, la velocidad media era de más 50 kilómetros por hora, una auténtica locura. La lucha entre el Visma Lease-a-bike y Q36.5, que no querían dejar escapar la lucha por la victoria de etapa y los fugados se mantuvo toda la jornada hasta llegar al puerto final.
La Mozqueta y el Cordal como preámbulos al Angliru
Esta etapa con final en el Alto de L’Angliru no podía ser una jornada monopuerto. Dos puertos de primera serían los encargados de calentar las piernas de los ciclistas antes de la traca final.
La diferencia con la fuga se mantendría estable sobre los 4 minutos en La Mozqueta, pese a que la fuga se seleccionó a un grupo de cinco corredores al que luchó por llegar Mads Pedersen (Lidl-Trek), quien sabía que su objetivo era el sprint intermedio que se encontraba antes de ascender el Cordal.
Conectó finalmente en el descenso el danés a duras penas al grupo cabecero en el que estaban Jungels (INEOS) , Garofoli (Soudal), Tiberi (Bahrain Victorious), Vinokourov (Astana) y Cepeda (Movistar), aunque por poco tiempo. Tiberi sufrió un inoportuno pinchazo que le obligó a perseguir durante toda la bajada junto a Artz al ahora quinteto de cabeza.
“🚨¡CUIDADO, por favor!🚨
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Un perro atado a una silla casi tira al suelo al dúo perseguidor en el paso por la localidad de Turón.
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Llegado el sprint intermedio, Mads Pedersen obtenía su objetivo y acababa su jornada, con un cuarteto de cabeza que no le discutió la primera plaza y los 20 puntos a Pedersen en su particular lucha por el maillot verde.
Parón en el pelotón que da alas a la escapada
Con la carrera totalmente lanzada y antes de subir El Cordal, la relativa calma llegó al pelotón a 30 kilómetros del final. Un parón en el pelotón subía la diferencia con la fuga de nuevo a los 4 minutos.
Tiberi, en su particular lucha por volver a cabeza de carrera, arrancaba en El Cordal con mucha fuerza, dejando atrás a Hubb Artz, pero su esfuerzo fue en vano para contactar con Cepeda, Jungels y Vinokourov, ya que Garofoli no pudo seguir su ritmo en las rampas del penúltimo puerto del día.
Pese a que el ritmo que imponía Visma por detrás no era muy intenso, Almeida veía como Ayuso, que podía ser de buena ayuda subiendo Angliru, decía adiós en las últimas rampas del Cordal. También lo hacía Landa, dejando claro que sus molestias en la espalda no van a mejor.
UAE coge las riendas para dejar la victoria entre los candidatos a la general
Vine sí que tiró de lo lindo en el último kilómetro para pegar un mordisco casi definitivo para la escapada. El pelotón coronaba con 3 minutos de desventaja y sin tiempo para mucho, enfilaban el inicio del Angliru a 12 kilómetros de meta.
La escapada empezaba el temible final de etapa con 2:22 de ventaja respecto al pelotón y teniendo que parar unos importantes segundos por una nueva protesta por la participación de Israel Premier - Tech en esta Vuelta, algo que les hizo perder cualquier tipo de opción de ganar la etapa.
Los primeros kilómetros de Angliru sirvieron para dejar claro quien no iba con buenas piernas. Ciccone, Pellizzari o Bernal decían adiós a sus opciones de victoria y posiblemente de podio. Cedía a su vez Abel Bardestone, español de Caja Rural, que llegó muy lejos con los mejores, hasta los seis kilómetros de meta y fue el mejor español finalizando 10º.
Pidcock cedía en una de las múltiples rampas de más del 20% y abría una plaza para el podio a hombres como Gall o Hindley, quienes le recortaron 24'' y 48'' respectivamente. La lucha por el maillot blanco entre Pellizzari y Riccitello acabó con el de Red Bull-Bora sacando 5'' de ventaja sobre el estadounidense.
Ya solo resistían Vingegaard, Kuss, Almeida y Hindley, la mayor sorpresa del día, a 5 kilómetros de meta. El portugués de UAE sería quien tirase del cuarteto, imponiendo un fuerte ritmo sin mirar atrás. A 4,5 kilómetros de meta el cuarteto ya era un dúo, Almeida y Vingegaard, los dos mejores en la general.
Almeida tiró con lo que tenía pero no pudo con el gigante danés, aunque recorta 4'' extra de bonificación respecto al de Visma, que ajusta su diferencia hasta los 46''.
