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Ola de protestas en Irán tras la muerte de la joven de 22 años, Mahsa Amini, que perdió su vida tras ser detenida por llevar mal puesto el velo. En estas movilizaciones al menos han muerto seis personas. En Las Mañanas de RNENazanín Armariam, analista política, asegura que el velo no es una prenda iraní y que ha sido impuesta llegando a una gran represión y que llevan “43 años con este régimen y esto ha sido la gota que ha colmado el vaso.” Armariam no cree que estas movilizaciones consigan ningún cambio porque, asegura, “este movimiento no es nuevo” y que en las anteriores protestas “se convirtió en un régimen aún más radical.” La analista política explica que ni Occidente ni Rusia ni China quieren que cambie el régimen en Irán porque quieren estabilidad ya que si no, podría cerrar el estrecho de Ormuz y no saldría petróleo por lo que les interesa mantener este régimen porque “no tienen una alternativa en este momento.”

Las empresas pueden prohibir a sus empleados el uso del velo islámico o de cualquier otro símbolo político, filosófico o religioso en el lugar de trabajo, si existe una norma interna en este sentido. Así lo ha fallado el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE) en una sentencia que responde a los casos de dos mujeres, una en Francia y otra en Bélgica, que fueron despedidas por negarse a prescindir del velo en el lugar de trabajo.