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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha recrudecido su estrategia contra la inmigración al anunciar que quiere acabar con el derecho de ciudadanía que se adquiere automáticamente al nacer en el país. A una semana de las elecciones legislativas, Trump ha vuelto a centrar el debate político en el control fronterizo y la inmigración irregular mientras la caravana de migrantes hondureños continúa su viaje hacia Estados Unidos. 

Las últimas horas han sido intensas para Salvamento Marítimo. En las costas de Andalucía, Murcia y Alicante han rescatado a decenas de pateras. A Cartagena han llegado desde el viernes 230 inmigrantes. Los últimos hace apenas unos minutos.

La caravana de migrantes hondureños continúa su camino y atraviesa el Estado mexicano de Chiapas, en una nueva etapa en la que muchos esperan poder subirse a algún vehículo con el que avanzar. El presidente Donald Trump les ha advertido a través de Twitter que "den la vuelta" y "regresen a su país" porque no va a dejar que "entren personas ilegales" en Estados Unidos.

Los gestos de apoyo hacia los emigrantes se repiten a cada paso. Un grupo de estudiantes reparte entre los componentes de la caravana el agua que ellos mismos han pagado. Más adelante ropa y pañales. Un tercio del grupo son niños y muchos de ellos están enfermos debido al calor. 

La caravana avanza sobre todo tipo de vehículos. Son muchos los que se ofrecen a llevar a los emigrantes rumbo al norte sin que la Policía Federal trate de impedirlo. Los habitantes más pobres del estado de México los reciben con banderas de Honduras y gritos de ánimo. Algunas zonas se han convertido en verdaderos puntos de avituallamiento. 

La caravana de migrantes centroamericanos que se dirige a Estados Unidos ha guardado luto este martes por el compañero que murió al caer por un camión. Los más de 7.000 migrantes que ya han alcanzado México han descansado y han sido atendidos por las ONG, que les explican dónde están y les prestan atención sanitaria. El miércoles retomarán el viaje con un objetivo: alcanzar el tren 'La Bestia', a 200 kilómetros.

Más de 7.000 refugiados y migrantes centroamericanos, hondureños en su inmensa mayoría, continúa su camino hacia EE.UU.. La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha recordado este martes a los países por los que atraviese la caravana de migrantes hondureños que toda persona tiene el derecho a presentar una solicitud de asilo. "La ACNUR quiere recordar a los países de esta ruta que entre los que componen la caravana puede haber personas en peligro", afirmó en rueda de prensa Adrian Edwards, portavoz de la agencia.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha asegurado este domingo que su Gobierno está haciendo "todos los esfuerzos posibles" para evitar que "la avalancha de extranjeros ilegales" crucen la frontera con México, y les advirtió que, de llegar, las autoridades estadounidenses no aceptarán su entrada.

Desde hace una semana, unos 5.400 migrantes, la mayoría hondureños, ingresaron a Guatemala según el Gobierno y de ellos 2.000 regresaron a Honduras y otros 3.000 siguen aferrados al deseo de llegar a Estados Unidos para tener un futuro mejor.

Al menos 2.000 miembros de la caravana que lograron superar las exigencias migratorias impuestas por México salieron a primera hora del paso fronterizo de Ciudad Hidalgo (México) para una jornada a pie de unos 40 kilómetros hasta Tapachula, donde pernoctarán. El objetivo de la caravana es alcanzar la frontera de México con Estados Unidos, lo que supone un recorrido de 2.000 kilómetros hacia la zona noreste o de casi 4.000 kilómetros si se opta por la ruta del noroeste que lleva a Tijuana.

En el puente fronterizo de México y de Guatemala quedaron varios centenares de migrantes hondureños a la espera de ser atendidos por la migración mexicana, o en su caso, intentar adentrarse en México en cruces ilegales por el río Suchiate, la frontera entre México y Guatemala.