En España hay cerca de 60.000 puntos de recarga para coches eléctricos, pero uno de cada cinco no funcionan. Estas limitaciones complican los desplazamientos con vehículos eléctricos. España, en cuanto a la instalación de este tipo de puntos, está a la cola de Europa.
Esta situación la explica Javier, propietario de un vehículo eléctrico a TVE. Su coche tiene 380 kilómetros de autonomía y normalmente lo carga en casa, pero cuando se va de viaje toca buscar cargador y eso, muchas veces, se convierte en una odisea.
"Cargadores vandalizados" otros "ocupados por coches de gasolina" y algunos "no funcionan" porque no tienen corriente, explica el propietario del vehículo.
A pesar de todo, cada hay más disponibles, cerca de 980 por cada millón de habitantes. Sin embargo, España sigue situándose a la cola de Europa en este ámbito, muy por detrás de Francia o Alemania, donde cuentan con casi el triple.
El delegado de la Asociación de Usuarios de Vehículos Eléctricos (AUVE) en Cataluña, Albert Segarra, afirma que unos de los problemas es que, cuando se requiere instalar un "cargador ultrarrápido, requiere más permisos" y puede tardar "entre dos y tres años".
Por eso, si se van de vacaciones, y especialmente con coche eléctrico, es imprescindible ser previsor. Uno de los primeros pasos es planificar la ruta para comprobar donde están las paradas con cargadores eléctricos y poder buscar alguno cercano si se tiene algún problema con uno.
Imagen: GETTY.