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Europa se moviliza en favor de Ucrania. Distintos líderes de la Coalición de los Voluntarios acompañarán a Volodímir Zelenski en su visita a la Casa Blanca. El objetivo, mostrar unidad y fuerza frente a Estados Unidos y también reivindicar el papel de los 27 en la toma de decisiones sobre el futuro y la seguridad del continente.

"Es crucial que sigamos tan unidos como al inicio de la invasión", ha dicho Zelenski. El presidente ucraniano recuerda que la Constitución de su país no permite ceder territorios como pretende Vladímir Putin y Donald Trump parece apoyar.

La cumbre de ambos en Alaska ha sembrado preocupación en las cancillerías europeas. El presidente de Estados Unidos ya no exige a Putin un alto el fuego inmediato, acepta su propuesta de negociar una paz duradera, pero eso lleva tiempo. Y entretanto, Rusia puede seguir bombardeando a civiles y comiendo terreno a Ucrania.

"Seguiremos endureciendo las sanciones contra el Kremlin", ha anunciado la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.

Washington, por su parte, niega claudicar ante Putin. Aseguran que el líder ruso sí ha aceptado algunas concesiones, sin detallar cuáles, y se muestran dispuestos por primera vez a apoyar las garantías de seguridad a Ucrania.

De todo eso hablarán este lunes en Washington.

Foto: AP Photo

Las fuerzas políticas independentistas y unionistas de Nueva Caledonia han suscrito un acuerdo político que otorga una amplia autonomía para el territorio de ultramar francés, aunque mantendrá la soberanía formal de París sobre las islas situadas en Oceanía. Esto se enmarca en una situación complicada para Francia en otra región en la que tuvo amplia presencia durante la época colonial: África Occidental. Hace unos días las últimas tropas francesas que quedaban en Senegal abandonaron el país.

Hablamos de todo ello con José Adrián Rojas, profesor de la Universidad de La Laguna, docente de Sistemas políticos de la Francofonía.

Francia se ha sumado a los 148 países que reconocen al Estado palestino, alineándose con España en un movimiento simbólico que busca frenar la invasión israelí y proteger a los civiles. Macron, que había retrasado el anuncio por la escalada con Irán, ha propuesto una Palestina desmilitarizada que reconozca a Israel, lo que ha generado una profunda división entre la opinión pública francesa.

El gesto ha generado tensiones: la derecha francesa lo ha rechazado, mientras los sectores propalestinos lo han celebrado como un posible efecto dominó en otros países. Israel lo ha considerado una traición de un aliado clave, y EE.UU. ha acusado a Macron de alimentar la propaganda de Hamás. Alemania y Reino Unido, aunque presionados internamente, aún no se han atrevido a seguir el mismo camino que su vecino europeo.

Foto: Geoffroy VAN DER HASSELT / AFP

Francia reconocerá al Estado palestino durante la Asamblea General de la ONU en septiembre. Lo ha comunicado el presidente galo, Emmanuel Macron, en una carta dirigida al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbás. Macron llevaba meses sopesando dar el paso pero hasta ahora lo planteaba como parte de una posible jugada diplomática concertada en la que países árabes reconocieran, a su vez, a Israel. Ahora ya no le pone condición ninguna y lo da por hecho. El presidente francés confía en que ese gesto suponga una contribución decisiva para la paz en Oriente Próximo. Al menos 142 países han reconocido ya plenamente a Palestina, incluyendo a los europeos Noruega, Irlanda y España. Tiene los detalles Antonio Delgado, corresponsal en París.

Los ajustes para los próximos cuatro años que busca implementar el Gobierno del primer ministro francés, François Bayrou, incluyen recortes en el gasto social, el sanitario, la reducción del número de funcionarios o la congelación de las pensiones. Una de las medidas más criticadas también ha sido la supresión de dos días días festivos en el país porque, según Bayrou, Francia "no produce suficiente y hay que trabajar más".

Además, el primer ministro ha anunciado un plan contra el fraude fiscal y un impuesto solidario para los más ricos. El ahorro, defiende Bayrou, será de 43.800 millones de euros al año, una cifra que busca reducir la deuda pública, que está en el 115% del Producto Interior Bruto. En cambio, el único gasto que no se vera afectado es el de defensa, que seguirá creciendo en los próximos años.

Toda la oposición, desde la izquierda hasta la derecha, han criticado las medidas. Algunos partidos ya han amenazado con una nueva moción de censura. Los sindicatos, también en bloque, han anunciado movilizaciones si no hay cambios.