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En Ucrania, la posibilidad de un accidente nuclear por los combates con Rusia vuelve a planear sobre la central nuclear de Zaporiya, la más grande de Europa. Kiev ha pedido una misión de investigación de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (OIEA) que Moscú ha aceptado. Mientras ambos países se culpan mutuamente, Washington ha pedido a Moscú que cese su actividad militar cerca de las centrales nucleares ucranianas y la OIEA y el Secretario General de la ONU, António Guterres, han advertido del peligro que suponen los combates.

FOTO: REUTERS/Alexander Ermochenko

El Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, ha condenado el reciente ataque a una central nuclear en Ucrania. "Cualquier ataque a las centrales nucleares es algo suicida y espero que esos ataques terminen", ha dicho Guterres en el Club Nacional de Prensa de Japón en Tokio.

La central nuclear ucraniana de Zaporiyia fue atacada a última hora del sábado y cada parte acusó a la otra del ataque. El operador de la central nuclear ucraniana, Energoatom, ha dicho que los bombardeos rusos dañaron tres monitores de radiación alrededor de la instalación de almacenamiento de combustibles nucleares gastados y que un trabajador resultó herido. Las agencias de noticias rusas, citando a la administración separatista de la planta, dijeron que las fuerzas ucranianas dispararon esos proyectiles.

El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) advirtió recientemente que la forma en que se gestiona la planta y los combates que se producen en sus alrededores suponen graves amenazas para la salud y el medio ambiente. Durante la conferencia de prensa del lunes, reiteró su advertencia sobre el uso de armas nucleares. "Creo que si se utilizan armas nucleares, probablemente ya no habrá ONU capaz de responder. Puede que ya no estemos todos aquí". Y aseguró que estamos asistiendo a una radicalización de la situación geopolítica que hace que el riesgo de una guerra nuclear vuelva a ser algo que no podemos olvidar del todo.

Durante los primeros días de invasión, las tropas rusas tomaron la central nuclear de Chernóbil. Allí se encuentra Fran Sevilla, enviado especial de RNE en Ucrania. Puentes destruídos tanques calcinados y trincheras invaden el camino que une la capital con el norte del país que linda con Bielorrusia. Los rusos se retiraron de la zona hace dos semanas, pero sus habitantes temen que pueda haber una nueva invasión. Entretanto, técnicos del Organismo Internacional de Energía Atómica tratan de establecer si la ocupación ha afectado a los controles de la central nuclear.

La central nuclear de Zaporiyia, en el este de Ucrania, cayó hace semanas en manos del ejército ruso. Los ucranianos temen riesgos para el medio ambiente si no recuperan su control. Es la mayor de Europa y sus seis reactores producen la mitad de la energía de Ucrania.

Foto: Un policía comprueba la documentación de una familia recién llegada a Zaporiyia (EFE/Manuel Bruque)

Estas imágenes, grabadas con un dron, muestran unas trincheras abandonadas cerca de la central nuclear de Chernóbil. Ucrania dice que fueron excavadas por Rusia cuando sus tropas ocuparon la zona en el llamado 'Bosque Rojo',  la parte más contaminada de la zona de exclusión de la central nuclear. Una zona boscosa donde los pinos se volvieron rojos tras absorber radiación después del desastre de 1986.

Según la Agencia Nuclear ucraniana, los soldados que estuvieron en la zona podrían exponer a la radiación a otras personas y animales. Energoatom, la empresa operadora nuclear ucraniana, asegura que las tropas rusas salieron de la zona y se dirigieron hacia la frontera con Bielorrusia.

19 días de guerra. La ofensiva se ha intensificado sobre Kiev. Ha sido bombardeado un edificio de civiles y las autoridades del país han confirmado que la central nuclear de Chernóbil ha vuelto a ser desconectada de la red eléctrica.

Respecto a la cuarta ronda de negociaciones, las delegaciones de Rusia y Ucrania vuelven a reunirse este lunes mientras las bombas siguen cayendo. El portavoz ucraniano ha señalado que la comunicación entre ambas delegaciones se mantiene, pero que no se ha decretado el alto al fuego y continúan, el tira y afloja de los corredores humanitarios. Rusia ha desmentido que haya pedido asistencia militar a China y afirma que tiene suficiente potencia bélica para cumplir todos sus objetivos en ucrania en el plazo previsto.

Hasta este fin de semana, las ciudades más al oeste, más cerca de la frontera con Polonia, estaban relativamente al margen de los ataques. Pero ya no es así, en Leópolis no han parado de sonar las sirenas antiaéreas. Muchos civiles intentan conseguir un arma para ir al frente: “No me ha dado tiempo a comprar un arma en Kiev, pero tengo el permiso para hacerlo aquí.”

Informan María Eulate y Luis Montero, enviados especiales de RNE a Leópolis

En el decimocuarto día de guerra en Ucrania, el Ejército ruso continúa su avance hacia Kiev, donde se espera un ataque "en los próximos días". Desde el inicio de la guerra ya son más de dos millones los refugiados que han abandonado el país.

Ucrania pudo evacuar este martes a civiles atrapados en Irpin y Sumi y Rusia se ha comprometido a mantener abiertos seis corredores humanitarios este miércoles. Sin embargo, en Mariúpol la evacuación ha sido imposible por ahora.