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Juicio 'caso Nóos'

El Govern descartó pagar un millón de euros por un congreso de salud, según el encargado de diseñarlo

  • Ignasi de Juan asegura que contactó con cuatro consellers del govern catalán
  • Una empleada doméstica de la infanta asegura que la contrataron en Aizoon
  • Otros dos empleados de empresas de la trama admiten que no trabajaron

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Urdangarin y la infanta Cristina, en una imagen de archivo, llegan a la sede del tribunal del caso Nóos
Urdangarin y su esposa, la infanta Cristina, en una imagen de archivo, a su llegada a la sede del tribunal del 'caso Nóos'.

El Govern de Cataluña rechazó en 2006 financiar con un millón de euros un congreso sobre salud a propuesta del Instituto Nóos, según ha testificado este lunes el antiguo encargado del área de Salud del Instituto Nóos Ignasi de Juan, que diseñó la iniciativa contratado por la asociación sin ánimo de lucro de Iñaki Urdangarin y Diego Torres.

De Juan, que ha comparecido por videoconferencia en la vigésima tercera sesión del juicio del caso Nóos ha asegurado que los altos cargos de la administración catalana con los que contactó, entre ellos "cuatro consellers" que no ha citado, indicaron que la aportación pública no podía superar los 300.000 euros.

No obstante, ha aclarado que las gestiones económicas no las llevó a cabo personalmente porque, al contrario que en otros proyectos en los que había trabajado, en Nóos nunca tuvo "acceso" a ese ámbito.

El congreso debía costar alrededor de 300.000 euros

En los nueve meses que estuvo contratado en el Instituto Nóos, de finales de 2005 a mediados de 2006, De Juan constató que Diego Torres estaba más volcado "en los temas de gestión", mientras que la responsabilidad de Urdangarin era sobre todo "abrir y facilitar los contactos".

De Juan ha expresado que se reunieron con cuatro consellers del Govern catalán que le manifestaron que no iban a pagar ese precio y que para que hubiera acuerdo para la celebración del congreso, éste debería costar sobre 300.000 euros.

Asimismo, ha señalado que él "nunca tuvo acceso a niveles financieros" y que supone que Diego Torres llevaba "esos temas" y que el exduque de Palma, Iñaki Urdangarin, se centraba en el tema de "abrir puertas y facilitar los contactos".

Aizoon contrató a una empleada doméstica de la infanta

Antes, una empleada del servicio doméstico de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin ha asegurado ante el tribunal que la infanta Cristina y su marido Iñaki Urdangarin, la contrataron como auxiliar administrativo en Aizoon, propiedad de ambos al 50%, según ha explicado este lunes la propia empleada en su declaración como testigo.

La compareciente, que ha declarado por videoconferencia, trabajó junto a su esposo para la pareja Urdangarin-Borbón desde 2006 a 2009. Inicialmente, estaban contratados directamente por el matrimonio como empleados del hogar y cuando se creó Aizoon fueron dados de alta en esa sociedad.

La trabajadora doméstica, que supo a posteriori que fue registrada como auxiliar administrativa, ha justificado el contrato con Aizoon en que también limpiaba el despacho profesional que Urdangarin tenía en su domicilio familiar del barrio barcelonés de Pedralbes.

En la misma línea ha testificado antes que ella su marido, quien ha relatado además que la contratación por parte de una empresa les facilitaba la obtención de un crédito bancario para comprar un piso.

Ambos fueron contratados por Aizoon en 2007

Los testigos se han contradicho respecto al origen de la iniciativa de cambiar la modalidad del contrato, ya que mientras él ha asegurado que fue una propuesta de Urdangarin la mujer ha manifestado que se lo pidieron ellos para tener acceso al crédito hipotecario.

Según han explicado tanto ella como su marido, fueron contratados en 2006 como servicio doméstico y que en 2007, "con la instalación del despacho" en la residencia de los duques se les hizo "un contrato de empresa" dentro de Aizoon, aunque sus labores no cambiaron en general. "Eventualmente fui a buscar a alguien al aeropuerto que debía reunirse con el señor Urdangarin, pero el trabajo era prácticamente el mismo", ha dicho el marido de la empleada.

Por otra parte, otros dos testigos han declarado que fueron contratados en distintas empresas de la presunta trama de corrupción pero que no trabajaron ni fueron nunca a las sedes de las mismas.

Uno de ellos ha explicado que cobró "unos 60 euros mensuales", que cree que le daban "en mano", durante tres o cuatro meses, mientras que el otro ha admitido que estuvo de alta cobrando la misma cantidad "durante cuatro años sin trabajar".

La vigésima tercera jornada del juicio del caso Nóos ha terminado este lunes sobre las 14:40 horas tras la declaración de 11 testigos. La sesión continuará este martes cuando está previsto que intervengan otros 11 testigos más de esta trama de presunta corrupción.