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El 95% de los españoles respira aire insalubre, según Ecologistas en Acción

  • La principal fuente de contaminación del aire es el tráfico en las ciudades
  • Ecologistas en Acción denuncia que no hay planes para reducirla
  • Crece la preocupación por el benzo(a)pireno, un contaminante cancerígeno

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Contaminación sobre el cielo de Madrid, en una imagen de archivo.
Contaminación sobre el cielo matutino de Madrid, en una imagen de archivo.

Un total de 44,7 millones de españoles (el 95% de la población) respira aire con niveles de contaminación superiores a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), debido principalmente al tráfico rodado en las áreas metropolitanas, en tanto que el 94% del territorio nacional rebasa los criterios aconsejables para preservar la salud de los ecosistemas y de la vegetación.

Así figura en un informe de Ecologistas en Acción, titulado La calidad del aire en el Estado español durante 2014 [informe en .pdf] presentado este martes en Madrid por Miguel Ángel Ceballos, autor de la investigación, y Juan Bárcena, coordinador de Calidad del Aire de la organización.

El informe se basa en los datos recogidos en 702 estaciones oficiales de control de la contaminación, repartidas en 135 zonas de toda España, y toma como referencia tres limitaciones: los valores máximos de contaminación recomendados por la OMS, el objetivo a largo plazo para la protección de la vegetación establecido por la UE y los valores límite legales de obligado cumplimiento recogidos en la normativa comunitaria.

Ceballos apuntó que la principal fuente de contaminación atmosférica es el tráfico en las ciudades, pero también hay otras, como algunos sectores industriales (siderurgia, cemento y centrales térmicas) y el tratamiento de los residuos, y recordó que el aire contaminado causa cerca de 27.000 muertes prematuras al año en España, según la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA).

Contaminación atmosférica en casi todo el territorio nacional

El informe destaca que, según las recomendaciones sanitarias de la OMS, al menos 44,7 millones de personas respiraron aire contaminado en 2014, lo que supone el 95% de la población, en tanto que 474.000 kilómetros cuadrados (el 94% del territorio) se vieron afectados por la contaminación atmosférica.

Sin embargo, los límites legales de la UE son más laxos, de manera que, teniendo en cuenta este criterio, alrededor de 15,5 millones de personas (una de cada tres) y 236.300 kilómetros cuadrados (más de la mitad de España) rebasaron los estándares comunitarios.

Los contaminantes que provocan más problemas de salud son las partículas en suspensión (PM10 y PM2,5), el dióxido de nitrógeno (NO2), el ozono troposférico u 'ozono malo' (O3) y el dióxido de azufre (SO2).

Las primeras fueron las que más crecieron el año pasado, mientras que descendieron ligeramente el NO2 y el SO2. Además, Ecologistas en Acción muestra su preocupación por los elevados niveles de benzo(a)pireno, un contaminante cancerígeno.

Las zonas más contaminadas

En cuanto a las partículas PM10 (menores de 10 micras), superaron los límites sanitarios (20 microgramos por metro cúbico) el año pasado en gran parte de Canarias, Andalucía, litoral de Murcia y Alicante, Barcelona, Girona, casi todo Teruel, la mitad de la Comunidad de Madrid, el centro de Asturias y el norte de Navarra, zonas donde residen 24,4 millones de personas. Ninguna región española rebasó el límite legal de la UE (40 microgramos por metro cúbico).

Las PM2,5 excedieron los límites recomendados por la OMS (10 microgramos por metro cúbico) en Andalucía, Puertollano (Ciudad Real), el área metropolitana de Madrid, el litoral de A Coruña, la parte central de Asturias, Huesca y buena parte de Cataluña y de la isla de Mallorca, donde viven 26,3 millones de españoles, y no se superaron los valores legales de la UE (25 microgramos/m3).

Ceballos apuntó que este contaminante causa 25.000 de los 27.000 fallecimientos prematuros anuales que se calcula que se producen en España cada año.

Respecto al NO2, los límites de la OMS y de la UE coinciden (40 microgramos/m3) y sólo se superaron en las áreas metropolitanas de Madrid, Barcelona, Valencia, Murcia y Granada, que suman alrededor de 9,8 millones de habitantes.

Sobre el O3, denominado 'ozono malo' en contraste con el que se sitúa en altas capas de la atmósfera y protegen de las radiaciones ultravioleta, se produce fundamentalmente en verano por la mayor presencia de la radiación solar.

Su incidencia en 2014 en cuanto a las recomendaciones sanitarias (100 microgramos/m3) afectó a casi la totalidad de España, con una población de 39,6 millones de personas perjudicadas, salvo las islas occidentales de Canarias, partes de Galicia, el oeste de Asturias, el interior del País Vasco y el litoral de Murcia. Y se superaron los límites marcados por la UE (120 microgramos/m3) en Extremadura, Madrid, Castilla-La Mancha, gran parte de Murcia, el interior de Alicante y Castellón, el sur de Navarra, el norte de Cataluña y las islas de Ibiza y Formentera.

El O3 también tuvo su incidencia en la vegetación, ya que se rebasaron los objetivos legales en la mitad sur peninsular, el sur de Navarra, casi toda Cataluña, Ibiza y Formentera, áreas que suman 258.000 kilómetros cuadrados (51,2% del país).

El SO2, que se produce por la quema de carbón y petróleo, tuvo una mayor incidencia en el norte de Castilla y León, el interior de Galicia, la mitad occidental de Asturias, Puertollano, la bahía de Algeciras y las islas orientales de Canarias (3,8 millones de personas), en lo relativo a los límites de la OMS (20 microgramos/m3).

Contaminación por benzo(a)pireno, reconocido cancerígeno

Entre los restantes contaminantes regulados legalmente, destacan los niveles alcanzados por el benzo(a)pireno, reconocido cancerígeno que se utiliza como indicador de los hidrocarburos aromáticos policíclicos.

Alrededor de 18,9 millones de personas (en Galicia, Asturias, Cantabria, Castilla y León, Navarra, Cataluña, área metropolitana de Madrid y Puertollano) estuvieron afectadas al superarse en estas zonas la recomendación de la OMS.

Con estos datos, Bárcena concluyó que la contaminación del aire es "un grave problema de salud pública" y señaló que España tiene abiertos varios procedimientos de sanción por parte de la UE al incumplir la legislación en materia de calidad del aire.

"Los planes de reducción de la contaminación, que son obligatorios, en muchos casos no existen y en otros apenas tienen efectividad porque hay una falta de voluntad política. En general, no tienen rango legal y son meros catálogos de recomendaciones. No tienen objetivos claros y cuantificados de reducción de la contaminación, la mayoría no contemplan mecanismos de seguimiento y cuantificación de las medidas aplicadas y no abordan la parte central del problema, que es la reducción del tráfico", resumió.