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El Gobierno aprueba su tercera reforma financiera para cumplir las exigencias del rescate bancario

  • La pretensión es que sanear la banca "no cueste un solo euro al contribuyente"
  • El banco malo adquirirá los activos tóxicos a precios "pre-burbuja inmobiliaria"
  • Se amplia la capacidad de endeudamiento del FROB hasta 120.000 millones

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El Gobierno aprueba la tercera reforma financiera cumpliendo con la hoja de ruta europea

El Consejo de Ministros ha dado luz verde este viernes a la nueva reforma del sector financiero -la tercera en lo que va de año- que, en forma de real decreto, cumple las exigencias marcadas por la Unión Europea para conceder el rescate bancario, ya que determina las normas y el proceso para la reestructuración o liquidación de las entidades con problemas, la creación del llamado banco malo y el reparto de los costes derivados de la intervención "para minimizar el coste para los contribuyentes", en palabras del ministro de Economía, Luis de Guindos.

En la rueda de prensa posterior a la reunión del gabinete, la vicepresidente del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha destacado la importancia de esta norma que -ha señalado- "culmina una reforma del sistema financiero, convertida en necesidad nacional".

Sáenz de Santamaría ha señalado que "el objetivo básico y fundamental" de la normativa aprobada este viernes es "que no cueste un solo euro al contribuyente". Durante su exposición posterior, De Guindos ha matizado que se tratará de "minimizar" el coste para los ciudadanos.

El responsable de la política económica del Gobierno ha asegurado que el real decreto supone una revisión de todo el sistema de previsión de crisis bancarias y ha subrayado que si se hubiera contado con los instrumentos ahora aprobados, "la crisis se podría haber afrontado de una manera muy distinta".

El texto aprobado es muy detallado en cinco de los seis tipos de medidas que incluye, mientras que define solo "un marco general" para la creación del denominado banco malo, es decir, de la nueva sociedad que deberá adquirir los activos problemáticos de los bancos que necesiten ayudas públicas.

Así, De Guindos ha indicado que los detalles "fundamentales" para la creación de esa sociedad de gestión se definirán en un futuro reglamento.  "Ese reglamento incluirá la financiación de las sociedades de gestión  de activos, las  modalidades de activos que se transfieren desde los  bancos a ellas y, sobre todo, los precios a los que se  transfieren esos activos", ha explicado el ministro, quien ha dicho que la sociedad de gestión deberá "estar en vigor a finales de noviembre".

El banco malo pagará precios "pre-burbuja inmobiliaria"

Ante la insistencia de los periodistas sobre cuál será el precio que pagará el banco malo por los activos tóxicos, la clave que decidirá tanto la necesidad de financiación de esa sociedad como su posibilidad de minimizar los costes al contribuyente, el ministro ha adelantado que "no serán 180.000 millones [cantidad en la que el Banco de España ha valorado los activos inmobiliarios en manos de los bancos españoles].

"Si me permiten ustedes, serán precios pre-burbuja inmobiliaria", ha indicado, aclarando que "la metodología" para fijar esas valoraciones "será pública" y la aplicará el Banco de España.

"Ese mal llamado banco malo, porque no va a ser un banco y sus activos no van a ser tan malos", ha considerado De Guindos, contará con una participación minoritaria del FROB, "ya que la idea es que los inversores privados tengan la participación mayoritaria", aunque no ha concretado si esos inversores serán los propios bancos. Sobre la participación del FROB, el ministro ha explicado que "provendrá de la facilidad europea", es decir, del fondo europeo de rescate.

Respecto al resto, a la participación de los inversores privados, ha indicado que "la financiación se hará con deuda que puede depositarse en el Banco Central Europeo, serán los inversores privados los que compren esa deuda". Esto puede significar que la sociedad emitirá deuda que comprarán los inversores privados que, a su vez, podrán utilizar esos títulos para obtener liquidez en el BCE.

A preguntas de los periodistas, De Guindos ha asegurado que los activos que se traspasarán al banco malo "serán, fundamentalmente, de tipo inmobiliario, que son los que están sufriendo mayor deterioro". La Comisión Europea y el Memorando de Entendimiento advierten que también deberían transferirse a la sociedad de gestión todos aquellos activos deteriorados, como préstamos a empresas no relacionadas con el mercado inmobiliario.

Además, ha señalado que el FROB podrá obligar a los bancos rescatados a transferir sus activos tóxicos y que el período temporal para que ese banco malo liquide los activos adquiridos estará "entre 10 y 15 años". Por último, el responsable de Economía ha advertido que "la sociedad de gestión de activos tiene que ser viable, que no genere pérdidas a lo largo de su vida, algo fundamental para que no cree costes al contribuyente".

El FROB podrá endeudarse este año hasta 120.000 millones

Al margen del banco malo, el decreto aprobado este viernes refuerza las competencias del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que podrá liquidar entidades inviables como último paso dentro del mecanismo que se establece para intervenir en bancos con problemas.

Ese mecanismo comprende en primer lugar la intervención temprana para entidades con problemas leves, en las que el FROB podrá exigir el cambio de los directivos y aportar ayudas “transitorias” en forma de instrumentos convertibles en acciones (cocos).

Una segunda fase sería la reestructuración, para entidades con problemas que puedan resolverse con la inyección de fondos públicos, mientras que las entidades inviables se liquidarán con la creación de un banco puente que después venderá los activos.

De Guindos, en cualquier caso,  ha descartado "en principio" la liquidación de alguna entidad financiera en los próximos meses, a la espera de conocer las necesidades de capital de los bancos que fijarán las consultoras independientes dentro de unos quince días.

La reestructuración o la liquidación de una entidad comportará en cualquier caso pérdidas para los accionistas, cuotapartícipes o socios y, en segunda instancia, los acreedores subordinados. Esto incluye las participaciones preferentes, para las que el decreto incluye una nueva regulación.

Para llevar a cabo esta labor, el FROB contará con una dotación de los Presupuestos del Estado, aunque podrá financiarse con cargo a terceros con un límite que para 2012 se fija en 120.000 millones de euros, frente a los 99.000 millones establecidos hasta ahora.

El Fondo de Garantía de Depósitos, solo para los ahorradores

Del resto de medidas incluidas en el decreto, De Guindos ha resaltado que el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) solo se dedicará a garantizar los ahorros de los españoles, sacando de sus competencias la recapitalización de entidades.

"El FGD se va a centrar en la garantía y en el aval de los depósitos de los ahorradores", ha comentado el ministro, quien ha subrayado que esta será "su única misión". Además, el FROB podrá financiar al FGD.

Por lo demás, la nueva norma recoge algunas medidas que ya se habían conocido, como la limitación de la retribución fija que pueden percibir los responsables de entidades financieras con ayudas públicas, que alcanzará como máximo 500.000 euros, frente a los 600.000 euros establecidos en febrero.

Asimismo, las entidades financieras españolas tendrán que elevar antes de 2013 su nivel de solvencia del 8% al 9%, un porcentaje que hasta ahora solo se exigía a los cinco grandes bancos (Banco Santander, BBVA, Banco Popular, La Caixa y BFA-Bankia).

El decreto con la reforma ha entrado en vigor este mismo viernes tras haber sido publicado en una edición especial del Boletín Oficial del Estado, donde ocupa 61 páginas [ver texto en pdf].