Enlaces accesibilidad

Jean-Michel Cohen: "La dieta Dukan puede causar la muerte súbita"

  • Este médico francés cuenta a RTVE.es los peligros de esta dieta
  • El también nutricionista de Sarkozy dice de él que es "goloso"

Por

Sí. Seguir la Dieta Dukan puede ocasionarnos la muerte súbita, a pesar de que, afortunadamente, son más probables los casos de mal aliento, fatiga y pérdida de ilusión por la vida entre los que siguen este método para alcanzar la talla soñada.

Lo dice sin ningún reparo Jean-Michel Cohen, uno de los nutricionistas franceses más conocidos y a quien Pierre Dukan demandó el año pasado por calumnias. Cohen, sin embargo, ganó el juicio.

Hace unos meses, este enemigo de las "dietas milagro" ha publicado 1.800 Calorías para ser feliz (Planeta), una novela que habla de la estrechísima relación entre los trastornos alimenticios y los problemas psicológicos.

- ¿Se parece usted al doctor Sorin, el protagonista de su libro? ¿Se implica tanto con sus pacientes?

Sí, mucho. Como pasa en todas las novelas, el personaje se inspira en alguien que existe de verdad, y en este caso, se inspira en mí mismo. Lo que le ocurre al doctor Sorin es lo que me pasa a mí día a día, aunque, claro , no lo suelo contar. Porque, aparte de la técnica que yo aplico, tengo sentimientos, obviamente, y eso hace que observe como ser humano, además de como médico, a mis pacientes.

Mi implicación, por tanto, es real, y es herencia de la difícil relación que yo tuve con mi propio peso y del amor que siento por la gente. Ten en cuenta que yo no sólo me ocupo del cuerpo de las personas, sino también de su psique y de sus emociones.

- ¿Por qué piensa usted que la dieta Dukan no es buena? ¿De verdad es tan peligrosa para la salud?

Como todos los nutricionistas, yo conocía ya este régimen, que tiene más de 30 años y que, al contrario de lo que se cree, no es tanto un régimen hiperproteico, sino más bien un régimen disociado a base de proteínas, de la misma manera que existen otros que se basan en un solo alimento o en verduras.

La mayoría de las dietas son efectivamente altas en proteínas, ya que una reducción de azúcares y de grasas implica proporcionalmente un aumento de proteínas, pero tenemos que llevar cuidado para conservar las verduras y los productos a base de cereales, que son fundamentales para el equilibrio global del cuerpo y nos protegen de las enfermedades.

La documentación que disponemos sobre este tipo de dieta mostraba, además, ya en la época que los riesgos principales son la escasa estructuración alimentaria que predispone a crisis bulímicas o incluso a la anorexia en el caso de la gente joven. Los riesgos físicos pueden ir desde la pérdida del cabello, el mal aliento, el estreñimiento, la fatiga, una bajada de tono muscular o una pérdida de ilusión por la vida hasta la muerte súbita, ocasionada por un déficit de potasio.

Pero es más: recientemente hemos descubierto que los regímenes que contienen muchas materias grasas multiplican por dos el riesgo de cáncer de mama en las mujeres, lo que sucede en este tipo de dietas como la de Dukan, porque, por ejemplo, un trozo de carne aporta entre el 15% y el 18% de proteínas pero puede llegar a tener hasta un 25% de grasas, igual que el queso y los huevos, que son componentes importantes de estas dietas.

"Sarkozy es encantador, humilde y goloso"

- ¿Es Sarkozy un buen paciente ?

El Señor Sarkozy es un hombre cortés en el ámbito privado, encantador y, sobre todo, humilde en sus relaciones con los demás, lo que en absoluto coincide con la falsa imagen que los medios de comunicación dan sobre él. Y es muy goloso también, pero cumple al pie de la letra las indicaciones que le doy, que en realidad no son una dieta, ya que él considera que representa a su país, país de la gastronomía pero también de la buena salud. Así que lo que trata no es estar delgado, sino bien proporcionado.

Del mismo modo, él considera que este deber de representación conlleva obligaciones; entre ellas, tener buen aspecto.

"Confundimos el hambre con las ganas de comer"

- ¿Todas las personas que tienen problemas con la comida tienen también problemas psicológicos ?

No, no todas, pero sí la mayoría. Muchas veces confundimos el hambre –sensación física real– con las ganas de comer, que es lo que llamamos apetito y que pueden ser también compulsiones alimenticias. Cuando uno tiene ganas de comer realmente oculta una presión psíquica que le impulsa a ingerir alimentos para anestesiar sus pensamientos o para evitar estar solo.

La forma que tenemos de comer no es más que la traducción de nuestros estados emocionales y psicológicos.

- ¿Hay algún secreto para llevar una dieta exitosa ?

Yo diría que lo más importante es la paciencia, la indulgencia y la motivación. Seguir una dieta muy restrictiva es muy difícil, pero adaptarse a una progresiva reducción de alimentos es mucho más secillo. Hay que admitir, además, que no somos máquinas. Que nuestra vida social, la convivencia y el placer de comer nos hacen no ser tan rígidos pero nos animan a seguir la dieta más tiempo, lo que es la verdadera clave para el éxito.

La motivación es fundamental también. No podemos adelgazar simplemente porque lo hemos decidido. Hace falta tener una buena razón.

Por ejemplo, cuando uno está enamorado, se alimenta del aire y no piensa mucho en la alimentación, sino más bien en agradar al otro y a sí mismo. Pero ¿cuánta gente adelgaza antes de casarse para ponerse la ropa simbólica de ese día tan importante ? Cuando hay una razón verdadera para adelgazar, el individuo lo soporta todo.

"Mis pacientes han de tener buen carácter, porque no miento"

- ¿Qué opina de esas personas que pierden 50 kilos en un año ? ¿Es peligroso o depende del caso ?

Adelgazar 50 kilos en un año no tiene por qué ser peligroso, aunque es cierto que las personas que hacen esto tienen un problema con la alimentación que necesita un apoyo psicológico.

En cuanto una persona realmente obesa adelgaza, hay que acudir al trío mágico : nutricionista, psiquiatra y masajista.

Lo más difícil no es perder peso, sino mantenerlo.

- ¿Qué condiciones ha de tener una persona para ser su paciente ?

Tener una obesidad reincidente o un sobrepeso reincidente, haber intentado dos veces adelgazar y haber fracasado, tener el consentimiento de la familia y, sobre todo, tener un verdadero deseo de adelgazar. Y aceptar mi carácter –Cohen sonríe– , porque yo ni me dejo llevar ni miento a nadie...