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El 1% de los bebés occidentales nacen con ambigüedad genital

  • Un bebé con intersexualidad nace con genitales masculinos y femeninos
  • Para conocer su sexo, un equipo médico le someterá a varias pruebas
  • El resultado de dichas pruebas suele ser correcto en un 90%
  • La Noche Temática ha dedicado su último programa a la intersexualidad

Por
Reportaje sobre intersexualidad especial para la Web

Más información a cerca de la Intersexualidad:

900 601 601 (900ROSA)

Área del Identidad Sexual de la Coordinadora Gai-Lesbiana de Catalunya (cogailes@cogailes.org)

Entre la sexta y la octava semana de gestación ciertos procesos biológicos determinarán nuestro sexo al nacer: hombre o mujer. Pero a algunas personas les sucede algo muy poco común, nacen con genitales masculinos y femeninos, son los intersexuales.

Los bebés que nacen con este tipo de alteración presentan una diferencia entre sus genitales externos e internos, por lo que pueden presentar características físicas propias de hombres y de mujeres, en diferentes grados. La Noche Temática ha dedicado su último programa a la intersexualidad.

Una alteración muy poco conocida

El 0.018% de los bebés occidentales nacen con intersexualidad, un 1% si tenemos en cuenta todos los tipos y subtipos que pueden existir. “Es exactamente el mismo porcentaje que hay de albinos. Todo el mundo sabe lo que es una persona albina. Pero casi nadie sabe que también existe un 1% de personas que hemos nacido con algo llamado intersexualidad”, nos cuenta Gabriel José Martín, psicólogo y una de las personas que más pelea en España por los derechos de los intersexuales, es decir, sus propios derechos.

La historia de Gabriel José

Porque Gabriel forma parte de ese 1% de personas que nacen con algún tipo de desorden en el desarrollo sexual (DSD, en sus siglas en inglés). Al nacer, sus genitales no estaban bien definidos y el médico le asignó el sexo femenino. Se equivocó. “Mi caso es un caso bastante excepcional (uno de cada 10 millones de varones nacidos vivos). A causa de una mutación genética hay un bebé varón al que los genitales externos no se le desarrollan al modo estándar y, al nacer, aparenta una morfología femenina. Lo clasifican como niña, lo educan como niña... pero siempre se siente niño porque su identidad sexual (eso que está en el cerebro y que hace que nos "sintamos" hombres o mujeres) es de varón. Crece y, sin hacer nada para ello, el cuerpo se le desarrolla en dirección masculina, incluyendo los genitales”.

A los 16 años esa niña (su nombre era Patricia), dejó se ser una niña para ser Gabriel José (el nombre que habían elegido sus padres si hubiera sido niño). “Tras unos años llenos de desconcierto y miedos, encuentro un médico que me confirma que soy un varón y, por fin, comienzo a hacer la vida que siempre sentí mía”.

¿Cómo se determina el sexo de un bebé intersexual?

Actualmente el caso de Gabriel podría considerarse una excepción. Para saber qué sexo tiene un bebé con intersexualidad, los médicos recurren a diferentes pruebas. El resultado suele ser correcto en un 90%.

Todas las cuestiones médicas relacionadas con los DSD están registradas en el“Consensus Statment on the Management of Intersex Disorders", “un texto al que se llegó tras años de colaboración entre los expertos médicos (cirujanos, pediatras, endocrinos, etc.) y los activistas intersex más relevantes de la época”, explica Gabriel José Martín.

El Statment marca el protocolo a seguir a la hora de decidir el sexo del bebé y los aspectos a tener en cuenta. Lo primero, y más importante, es garantizar la vida del bebé. Los médicos también deben asegurar la máxima funcionalidad de los genitales del bebé y garantizar su calidad de vida futura. Por útlimo, todo aquello que no sea imprescindible para que el bebé tenga calidad de vida en el futuro, es mejor dejarlo para cuando éste sea adulto.

Soy padre de un bebé intersexual, ¿qué hago?

"La mayoría de los padre, cuando nace un bebé con ambigüedad genital, se enteran por primera vez de que este tipo de cosas ocurre y que les ha ocurrido a ellos", señala Gabriel.

Por eso, para ayudarles en este momento y ofrecerles más información, desde el Área de Identidad Sexual de la Coordinadora Gai-Lesbiana de Cataluya, han editado una guía para padres: "Intersexualidad (DSD). Guía para padres".

Según Gabriel, lo más importante para el crecimiento y la educación de un bebé con intersexualidad, no deja de ser lo mismo que necesitaría un bebé sin ningún tipo de alteración: que crezca sintiéndose querido, valorado, respaldado. "Da igual como tenga los genitales, da igual cómo esté su cuerpo, da igual que mañana venga diciendo que es una niña y no un niño... Lo quieren, lo respetan, lo apoyan. Y, haga lo que haga el día de mañana, van a estar ahí para él, para ella. Crecerá siendo un niño sano y eso, es lo único que importa".