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La Corte Penal Internacional acusa al presidente de Sudán de genocidio

  • La ONU anuncia la suspensión de su misión en el país africano
  • Miles de seguidores del presidente salen a las calles en señal de protesta
  • En Darfur han muerto más de 300.000 personas en 5 años de conflicto
  • Se le acusa de la "muerte lenta" de entre 80.000 y 265.000 personas
  • Sería el tercer mandatario objeto de un proceso judicial
  • Sudán sufre múltiples divisiones religiosas, étnicas y socio-económicas

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La CPI acusa al presidente de Sudán de genocidio

El fiscal jefe de la Corte Penal Internacional (CPI), Luis Moreno Ocampo, ha acusado al presidente de Sudán, Omar al Bachir, de crímenes de guerra, lesa humanidad y genocidio en Darfur, donde han muerto más de 300.000 personas en cinco años de conflicto.

Por su parte, la misión militar conjunta de la ONU y la Unión Africana en Darfur (UNAMID) ha anunciado la "suspensión indefinida" de sus actividades como prevención ante un posible brote de la violencia tras la orden de detención contra al Bachir, si bien, el portavoz de Ministerio de Asuntos Exteriores sudanés, Ali Al-Sadig, ha afirmado que Sudán seguirá con el proceso Darfur de paz y protegerá a todo el personal de Naciones Unidas en el país. Además, Al-Sadig, ha afirmado que no reconocen ninguna acusación proveniente de la Corte Penal Internacional.  "Para nosotros es inexistente, ha declarado".

Tal y como preveían los militares de la UNAMID, miles de seguidores del presidente han salido a las calles de Sudán para protestar por la orden de dentención contra el presidente de su país.

"La muerte lenta"

Luis Moreno Ocampo ha presentado a los jueces el resultado de su segunda investigación en Darfur y serán los magistrados de la sala preliminar de la CPI quienes tendrán que decidir ahora si las pruebas constituyen una base razonable para hacer efectiva la orden de arresto contra el presidente de Sudán.

Según el fiscal Moreno Ocampo, las "fuerzas y agentes" controladas por el presidente Al Bachir han asesinado durante los cinco años que dura el conflicto de Darfur al menos a 35.000 civiles. Además, el presidente es responsable de la "muerte lenta" de entre 80.000 y 265.000 personas, refugiados y desplazados que tuvieron que abandonar sus casas por la guerra en la región.

"Bachir cometió, a través de otras personas, genocidio contra los grupos étnicos Fur, Masalit y Zaghawa en Darfur y Sudán usando el aparato del Estado, las fuerzas armadas y la milicia Janjaweed", según reza el documento de la fiscalía del TPI, en el que también se acusa a Bachir de crímenes contra la humanidad y de guerra como asesinato, exterminio, tortura, violación y el desplazamiento forzoso de 2,9 millones de personas.

El tercero en discordia

Al Bachir se ha convertido en el tercer presidente en ejercicio en ser objeto de un proceso judicial internacional. Le precedieron el serbio Slobodan Milosevic, fallecido en 2006 e inculpado en 1999 por el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY), y el liberiano Charles Taylor, perseguido desde marzo de 2003 por el Tribunal Especial de Sierra Leona.

El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas denunció en junio la falta de cooperación de Sudán con el CPI, cuya jurisdicción no reconoce, y la Unión Europea ha amenazado con sancionar a Jartum.

Un país deshecho

Sudán, la mayor nación del continente africano, sufre múltiples divisiones religiosas, étnicas y socio-económicas, acentuadas por las luchas para apropiarse las riquezas naturales, desde que en 1978 se descubriera petróleo al sur del país.

Los enfrentamientos en Darfur, región occidental de Sudán fronteriza con Chad, se han cobrado miles de muertos y han ocasionado unos dos millones y medio de desplazados a campos de refugiados dentro y fuera del país, en lo que la ONU ha definido como uno de los peores desastres humanos de este siglo.