Verstappen reina en Las Vegas y aprovecha el desastre de McLaren
- La victoria del neerlandés y la descalificación de los pilotos del equipo británico dejan el Mundial al rojo vivo
- El tetracampeón del mundo se coloca a 24 puntos de Norris a falta de dos carreras y una sprint
Max Verstappen (Red Bull) dominó de principio a fin y venció este domingo en el Gran Premio de Las Vegas para estirar sus opciones a un campeonato del mundo de Fórmula Uno.
El piloto neerlandés aprovechó la sanción de los McLaren, que fueron descalificados después de la carrera porque el patín de resina inferior de sus dos coches tenían menos de 9 mm de grosor, el mínimo requerido. Norris había terminado segundo y Piastri lo había hecho en cuarto lugar.
Después de la sanción, el tetracampeón del mundo sigue vivo en la lucha por el título, ya que está a solo 24 puntos del liderato con dos carreras y una sprint por disputarse. Además, Verstappen ya es segundo tras superar a Piastri en la clasificación.
En lo que respecta a la carrera, el piloto de Red Bull aprovechó un error del 'poleman' Norris para ponerse al frente de la clasificación en la curva uno de la primera vuelta e imponer un ritmo demoledor que no fueron capaces de seguir ni Norris ni George Russell.
El líder del Mundial trató de cerrar en la frenada a Verstappen y la suciedad del interior de la primera curva provocó que el británico se fuera largo y cediese su posición con el neerlandés e, incluso, con su compatriota George Russell, a la postre tercero en la carrera (y segundo tras la sanción de los McLaren).
Óscar Piastri volvió a ceder terreno con el campeonato del mundo y concluyó cuarto en una jornada frustrante para el australiano al no ser capaz de plasmar la superioridad de su McLaren con unos adelantamientos que se le atragantaron en Las Vegas.
La remontada del día la protagonizó Andrea Kimi Antonelli tras escalar de la decimoséptima a la quinta plaza, a pesar de contar con una penalización de cinco segundos por una salida en falso, y después brillar con un neumático duro que estiró durante más de 40 vueltas. Su tenacidad tuvo premio y el italiano consiguió subir al podio tras la sanción de los McLaren.
Sainz se desinfla tras su gran sábado
Carlos Sainz no pudo mantener las grandes sensaciones de la clasificación y se vio superado por el ritmo de los Ferrari y los Mercedes. Sin embargo, el madrileño ascendió hasta la quinta posición debido a la descalificación de los McLaren.
Delante de Sainz acabó Charles Leclerc (Ferrari), quien se diluyó en el final de carrera después de demostrar que su monoplaza poseía ritmo para luchar por un puesto más alto en la tabla.
Verstappen muestra su clase y aumenta sus opciones de ser campeón
La salida del Gran Premio de Las Vegas trajo consigo un caos del que se beneficiaron Verstappen y Russell para adelantar a Lando Norris y también un Lewis Hamilton que pasó de la última posición en parrilla al decimotercero tras evitar el incendio que generó Gabriel Bortoleto con una frenada tardísima que acabó con su carrera y la de Lance Stroll.
Max Verstappen aprovechó la coyuntura para comenzar a poner tierra de por medio frente a los intentos de Russell, que buscó un adelantamiento del que tuvo que desistir para conservar sus neumáticos, una misión a la que se encomendó Norris en los compases iniciales tras su fallo garrafal.
Más atrás, Óscar Piastri, que se vio afectado por un toque de Liam Lawson en la salida, no conseguía mostrar su ritmo y adelantar a Isack Hadjar. Tanto tiempo perdió, que Charles Leclerc se sumó a la fiesta y pasó a los dos pilotos para escalar a la sexta plaza en la vuelta 13.
El neumático medio, opción mayoritaria de la parrilla, sorprendió por su aguante y consiguió atrasar el carrusel de paradas en boxes hasta la vuelta 18 tras los 'pit stop' de Russell y Fernando Alonso. Piastri fue el gran beneficiado del juego táctico tras escalar a la cuarta posición virtual con sendos 'undercuts' a Carlos Sainz y Leclerc.
El Gran Premio de Las Vegas se estabilizó y quedó anestesiado tras las entradas en boxes, pero Norris subió una marcha en el MCL39 para quitarse de encima a Russell y ascender a la segunda posición con el claro mensaje por radio de atacar a Verstappen, a quien tenía a cinco segundos.
Avisado por su ingeniero de pista, el neerlandés aumentó el ritmo y puso la directa hacia la victoria, encadenó vueltas rápidas e imprimió una velocidad que el líder del Mundial no fue capaz de seguir, concluyendo a más de veinte segundos al paso por meta.
George Russell se centró en asegurar su puesto en el tercer cajón del podio y se limitó a conducir su Mercedes hacia la bandera a cuadros.
Fernando Alonso convirtió en realidad sus declaraciones sobre la "misión imposible" que sería mantener la zona de puntos y acabó cayendo al decimotercer puesto (aunque al final fue undécimo) con un Aston Martin que no funcionó en todo el fin de semana en el Gran Premio de Las Vegas.