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Londres 2012 | Waterpolo

España vuelve a caer en cuartos de waterpolo lastrada por sus fallos en ataque ante Montenegro

  • Los de Rafa Aguilar desperdician la mayoría de sus superioridades
  • Montenegro, fuerte en defensa y efectiva en ataque, gana 11 a 9
  • El Waterpolo masculino no ha podido meterse en semifinales desde 2000

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España vuelve a caer en cuartos de waterpolo lastrada por sus fallos en ataque ante Montenegro

Ficha técnica

9 - España (4+1+1+3): Aguilar; Molina (-), Minguell (2), Español (-), Vallés (2), Javier García (1), Perrone (2) -equipo inicial-, Iván Pérez (1), David Martín (1), Mallarach (1), Sziranyi (-) y Mario García (-).

11 - Montenegro (4+3+3+1): Scepanovic; Brguljan (1), Paskovic (1), M. Janovic (2), Ivovic (1), Zlokovic (4), Gojkovic (-) -equipo inicial-, Petrovic (-), Draskovic (1), Radovic (-), Jokic (-) y N. Janovic (1)

Árbitros: Alexandrescu (RUM) y Spiegel (ALE). Exclusiones: Mario García, Martín, Sziranyi (2), Molina (2), Minguell (2), Mallarach, Español, Perrone (2) y Javier García. Eliminado: Mallarach.

Draskovic, Radovic, Janovic (2), Ivovic (2), Zlokovic, Gojkovic, Paskovic. Eliminados: Petrovic, Janovic y Jokic.

La selección masculina de waterpolo ha quedado por terceros Juegos consecutivos fuera de la lucha por las medallas al caer en cuartos de final frente a la potente Montenegro, que ha vencido con facilidad por 11 goles a 9 a España.

De esta forma, los de Rafa Aguilar han repetido la suerte de Atenas y Pekín, donde el equipo de waterpolo fue incapaz de superar el corte de los cuartos de final. Desde Atlanta 96, cuando con Estiarte al mando la selección consiguió el oro, no ha habido metal en este deporte.

En 2012 cambiará esta tendencia, pero lo hará por el excelente torneo de la selección femenina, que ha pasado a la final y tiene la plata asegurada.

Sus equivalentes en el torneo masculino, por su parte, han confirmado el juego errático e irregular desplegado contra Italia y han caído contra Montenegro víctimas de su propia inoperancia en ataque.

La cifra de los goles metidos en superioridad númerica lo dice todo: España ha metido solo seis goles en 17 superioridades, una efectividad del 33% que ha lastrado de manera fatal al combinado español combinado con los problemas defensivos, que hizo que en tres cuartos los balcánicos metieran diez goles a Iñaki Aguilar.

El resultado: una renta de cuatro goles en el último cuarto que hizo imposible la remontada.

El partido empezó con un signo muy diferente. Errores defensivos de ambos equipos hicieron que en el primer cuarto se marcasen ocho goles, cuatro por cada uno de los equipos, uno de ellos que recordó al que anularon a Iván Pérez en la recta final del partido contra Croacia.

El segundo y el tercer cuarto, claves

Pero más allá de eso, los primeros ocho minutos mostraron ya los vicios en los que caía el combinado de Rafa Aguilar: dificultades para lanzarse al tiro en ataque con jugadas trufadas de demasiados pases y facilidades para los montenegrinos para marcar goles en jugada, un 'pecado' casi imperdonable a un nivel como los cuartos de final de un campeonato olímpico.

Los dos siguientes cuartos confirmarían la tendencia: dos parciales de tres a uno en los que España desperdiciaba una superioridad tras otra mientras los monteengrinos marcaban en los momentos clave e incluso se aliaban con la suerte, como un balón que dió en el larguero y se metió en la portería tras golpear la cabeza del guardameta Aguilar.

Un gol de Ivovic en la enésima superioridad aprovechada era la puntilla para la selección española, que se ponía a tres goles ( 5 a 8), una ventaja que aumentaría aún más hasta acabar en 10 a 6 al final del tercer cuarto.

Con todo, España lo intentó hasta el final e incluso logró poner emoción en el marcador tras un parcial de 3 a 0 impulsada por la buena actuación de su portero Aguilar finalmente un gol en superioridad de Montenegro y un nuevo fallo en otra superioridad española enterró las opciones de la selección, a la que ahora solo le queda repetir el quinto puesto conseguido en Pekín 2008 después de caer ante los 'primos hermanos' de sus rivales de este miércoles, la potente Serbia.