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El Madrid gana fácil al Mallorca bajo la nieve

  • Bajo una incesante nevada, los de Pellegrini dominaron de principio a fin (2-0)
  • Un golazo tempranero de Higuaín en el minuto siete encarriló el partido

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El Madrid vence al Mallorca 2-0

De la unión entre un gran juego madridista y de la nieve, que desde las cinco de la tarde comenzó a caer en Madrid, sólo un color se ha visto este domingo en la victoria por 2-0 en el Bernabéu. Les recibió el coliseo blanco a ambos equipos con más gente de lo esperado en un domingo muy frío en la capital de España. [Estadísticas del Partido]

El Real Madrid saltó al campo con toda su artillería, volvía Kakà al once titular acompañado por Cristiano, Higuaín y Van der Vaart en el ataque. Después de guardar un minuto de silencio por el ataque sufrido por la selección de Togo, el partido se inició y el Madrid comenzó a imponer su juego vertical.

A los siete minutos llegó el primer gol que encarrilaba el choque. El 'Pipita' Higuaín, escorado en la banda derecha, recibió un balón y dejándose caer hacia el centro, pateó la bola con su pierna izquierda colocando el balón en la escuadra de Aouate, imparable para el israelita. Justificaba Higuaín con el golazo su titularidad en detrimento de Benzema.

A partir de ahí, la primera parte solo tuvo un color y no sólo por la nieve, el blanco. Pellegrini, que hoy no era el único que tenía el pelo blanco, se vio obligado sustituir a Van der Vaart por Granero en el minuto 20 ya que el holandés recayó de las molestias que durante toda la semana le apartaron del grupo y se tuvo que retirar lesionado.

En ese monólogo merengue de la primera mitad destacaron sobre todo las subidas por la banda de Arbeloa, que esta vez fue la derecha debido a la ausencia por sanción de Sergio Ramos, y las combinaciones entre Kaka y Cristiano Ronaldo en los últimos metros. Ambos jugadores dispusieron de ocasiones para aumentar la diferencia en el marcador.

En resumen, la primera parte terminó con un Mallorca desaparecido al que la pelota no le duraba nada en su poder y al que la presión que venía practicando esta temporada le faltó desde el principio.

La segunda parte empezó como la segunda, con un gol tempranero del equipo de Chamartín. A los cuatro minutos de la reanudación, un gran centro desde la derecha de Higuaín fue cazado por Granero que, de volea con la pierna izquierda, fusiló la portería.

A partir de ahí, ni siquiera el empeoramiento del terreno de juego por la nevada, impidió que el Real Madrid hiciera suyo propio el vendaval. Sin fallar en los pases, cortos y largos, los blancos se plantaban con peligro en el área mallorquina en tres o cuatro toques a lo sumo.

En esos minutos, hasta ahora inéditos en el Bernabéu, se vieron grandes ocasiones como la que tuvo el 'Pirata' Granero, tras una gran jugada de Kaka, y que una gran parada de Aouate evitó que subiera al marcador, o la ocasión que dejó a Higuaín sólo contra el portero que no pudo convertir en gol el argentino.

Pellegrini, al ver que el partido era muy cómodo, quiso preservar y sentó en el 68' a Kakà en el banquillo, cuyo puesto en el equipo cubrió Benzema.

Los últimos 20 minutos no pasarán a la historia. El partido se congeló como los aficionados y sólo destacó el regreso de Guti al césped blanco, la cual provocó la división de opiniones en la parroquia blanca ya que se escucharon tantos aplausos como silbidos.

Así acabó un partido, en el que Casillas tocó apenas tres balones, y que sirve a los blancos para sumar 41 y obliga al Barça a ganar en Tenerife si quiere mantener el liderato.