La vida sigue en Moscú a pesar de la guerra en Ucrania y de las duras sanciones occidentales. Algunas multinacionales han salido del país y sus tiendas siguen cerradas. Otras las han reabierto con logos prácticamente idénticos. Las sanciones sí han afectado a otros sectores como el tecnológico, el automovilístico o el bancario y la guerra también aquí ha roto familias.
Foto: Dos personas caminan por la Plaza Roja de Moscú (EFE/YURI KOCHETKOV)
Un año después, desde la estación central de la ciudad, nos cuenta que su madre, Yulia Volodymyrivna, “estaba muy asustada por si había una catástrofe nuclear o por si impactaba un misil cerca de casa”.
De los millones de ucranianos que han huido de su país, 168.000 se fueron a España, entre ellos han llegado varones jóvenes rusos para no ir a la guerra. En el último año, unos 700. Los gobiernos de la UE discrepan sobre si se debe o no acoger a los rusos.
Rusia ocupa hoy en Ucrania unos 120.000 kilómetros cuadrados: como sumar Portugal y Galicia en la Península Ibérica. Pero la guerra, sobre todo, se combate en una línea de 130 kilómetros entre Kreminna, Bajmut y Vuhledar: los tres puntos cardinales del frente del Donbás, el origen declarado de esta guera.
Este viernes, en la sesión especial del Consejo de Seguridad de la ONU que trataba el aniversario de la guerra en Ucrania, los jefes diplomáticos de los miembros del Consejo y de las grandes potencias mundiales, todos presentes, vivieron un momento de alta tensión y drama poco habitual.
En los primeros momentos de la sesión, tras ofrecer una intervención, el ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, ha pedido mantener en pie un minuto de silencio “por las víctimas de la agresión”. Kuleba se puso en pie y buena parte de la sala ha seguido su ejemplo.
Algunas delegaciones -como Brasil y China- permanecieron sentados, mientras el embajador ruso, Vasili Nebenzia, ha empezado a protestar y a pedir la palabra a la presidencia de turno, que este mes ostenta Malta, tras lo que han vuelto a sentarse quienes se habían levantado. Un agitado Nebenzia ha asegurado en ese momento que se ponía en pie, pero “por la memoria de todas las víctimas de lo que ha pasado en Ucrania empezando en 2014”, en referencia a las agresiones ucranianas que Rusia ha denunciado en el Donbás y que son una de sus justificaciones para la invasión.
El representante del Kremlin entonces se ha dirigido gesticulando repetidamente a Antonio Guterres para que se levantara. Y el portugués, tras unos momentos dubitativos, lo ha hecho. Le han seguido entonces todos los ministros de Exteriores y embajadores y diplomáticos presentes en la sesión.
En este programa especial dedicado al primer año de la guerra en Ucrania, entrevistamos a Christian Villanueva, director de la revista Ejércitos, para conocer en qué punto está el conflicto. Conectamos con nuestros enviados especiales en Ucrania, Fran Sevilla con Carlos Mesas en la técnica y con nuestra compañera Aurora Moreno, con el apoyo de David Velasco. Por otra parte, conocemos lo que opinan algunos ciudadanos rusos de esta guerra con Guillaume Bontoux y charlamos con nuestra enviada especial a Polonia, Antía André, sobre cómo ha cambiado la situación en la frontera un año después del comienzo de la invasión de Rusia en Ucrania. Por último, hablamos de la posición de China y Alemania.
Hablamos con Christian Villanueva, director de la revista Ejércitos, para profundizar sobre la situación en el frente, analizar lo sucedido hasta ahora y ver qué escenarios tenemos por delante, entre ellos, la contraofensiva rusa que se esperaba desde hace semanas.
Se cumple un año de la guerra en Ucrania y miles de personas de todo el mundo han salido a protestar contra la invasión Rusa. Muestran así su apoyo al pueblo ucraniano. La bandera de Ucrania ha estado presente en un sinfín de edificios iónicos. En París, por ejemplo, la Torre Eiffel se ha iluminado con el azul y el amarillo. Son muchos los que también han acudido a los exteriores de las embajadas rusas repartidas por distintas capitales para alzar la voz. En Berlín , han llegado a instalar tanques y en Londres han pintado la bandera ucraniana en una calle entera.
El Gobierno de China ha presentado este viernes su plan de paz para Ucrania compuesto por doce propuestas en un esfuerzo por dar una solución política a la invasión rusa del país, en el que pide un cese al fuego de ambas partes y defiende la integridad territorial de todos los países. El día en el que se cumple el primer aniversario de la guerra en Ucrania, el Ministerio de Exteriores chino ha enumerado doce propuestas para poner fin al conflicto armado, entre las que se incluye una petición a Occidente para que finalice sus sanciones a Rusia, o el establecimiento de conversaciones de paz. El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, se ha mostrado abierto a reunirse con el presidente chino, Xi Jinping, para discutir el plan en persona. Jinping se ha reunido en varias ocasiones desde el inicio de la guerra con Putin, pero ninguna con Zelenski.
Anna tiene 38 años, nació y creció en la ciudad de Mariúpol, y antes de la guerra trabajaba como enfermera en Ucrania. RTVE Noticias la entrevistó hace un año cuando estaba a punto de cruzar el corredor humanitario que conectaba Zaporiyia y Mariúpol, una auténtica autopista al infierno, para rescatar a su madre y a su abuela. Hoy, un año después, la hemos visitado en República Checa, donde se encuentra refugiada junto a su familia.
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Una de las ciudades más castigadas por los rusos, sobre todo al inicio de la invasión, ha sido Járkov. Es la segunda ciudad más poblada del país y está a sólo 30 km de Rusia. Allí está un equipo de TVE. Guadalupe Megías, las tropas ucranianas de momento han conseguido que los rusos no entren en la ciudad, pero la ciudad sigue viviendo con miedo.
Hace un año, las tropas de Putin entraron a Ucrania a través de Bielorrusia. Ahora, 365 días después, Ucrania no deja de vigilar esa zona fronteriza para evitar nuevas incursiones del ejército ruso.
Este viernes se cumple el primer aniversario de la guerra iniciada por Rusia en Ucrania. Por ello, han sido muchos los países alrededor del mundo que han celebrado actos conmemorativos para mostrar su apoyo a los ucranianos. Desde países europeos como Francia, Italia o Alemania, hasta Australia, Reino Unido, Japón, Estados Unidos o Tailandia han mostrado su rechazo a la invasión rusa y han recordado a las víctimas tras un año de ofensiva a través de actos, protestas y declaraciones públicas.
Rusia ocupa un 20% de Ucrania, un territorio equivalente a la suma de Portugal y Galicia. En el frente, sin embargo, las operaciones más violentas se extiende por apenas 130 kilómetros, especialmente, en la línea que une Kreminna, Bajmut y Vuhledar. Moscú también presiona con tres posibles ofensivas, dos por el norte y otra por el oeste, desde Transnistria, en Moldavia. La mera posibilidad obliga a Ucrania a fijar tropas en esas fronteras en una guerra que ya se prevé larga. Otro escenario es el del uso de armas no convencionales, es decir, nucleares, en los arsenales de Rusia por un lado, y de la OTAN, por el otro, en una guerra en escalada. Foto: REUTERS/Marko Djurica.