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Desde 2014 la legislación europea establece un régimen gratuito de cuentas de pago básicas para personas en situación de vulnerabilidad o con riesgo de exclusión financiera. Sin embargo, las personas migrantes y solicitantes de asilo encuentran muchas barreras para abrir una cuenta. Las ONG han registrado más de 200 irregularidades desde 2019. Las consecuencias de no tener una cuenta bancaria agravan aun más su exclusión social. Es el caso de Salif, de Guinea Conakri. Nos cuenta su historia Minerva Oso

Después de que el buque humanitario 'Ocean Viking' comenzara la semana pasada una nueva misión en el Mediterráneo Central, la situación en esta embarcación de la ONG SOS Mediterranée vuelve a ser crítica, con 572 personas a bordo, de los cuales, 200 son menores de edad. Francesco Creazzo, uno de los portavoces de la organización, ha explicado en Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso que la situación es cada vez más complicada y ha exigido un puerto seguro para un desembarco urgente. "No sabemos cuánto pueden aguantar", ha dicho, en referencia al estado físico y psicológico de los migrantes. Además, ha denunciado la "indiferencia" de la Unión Europea, que "sabe lo que pasa en el Mediterráneo pero ha mirado hacia otro lado".

Save the Children denuncia que una sexta parte de losniños y adolescentes migrantes entrevistados en Ceuta fue víctima de algún tipo de abuso, malos tratos o violencia física en sus países de origen; agravado en el caso de las niñas, que huyen de matrimonios forzados o abusos dentro del seno familiar. Los jóvenes, de entre 12 y 17 años, manifiestan la ansiedad que sufrían en sus países, muchos de ellos huyen de la explotación laboral o el rechazo de sus familias por haber nacido fuera de su entorno familiar. Desde la ONG se piden más recursos y solidaridad por parte de otras Comunidades Autónomas para atender a estos menores, de los cuales, hay un número indeterminado que se encuentra en situación de calle. La ONG ha elaborado estas entrevistas desde que el pasado17 de mayo se produjo la entrada masiva de migrantes procedentes de Marruecos.

Al menos siete migrantes han muerto en un naufragio ocurrido en las últimas horas frente a las costas de Lampedusa (Sicilia, sur de Italia) y otros 9 permanecen desaparecidos, mientras que 46 han sido rescatados con vida y trasladados a la isla en varias patrulleras italianas

Según los primeros testimonios, la barcaza en la que viajaban volcó a cinco millas de la costa y muchos cayeron al agua. La mayoría pudieron ser rescatados por la Guardia Costera. Los supervivientes y los fallecidos -entre los que figuran cuatro mujeres, una de ellas en avanzado estado de gestación- han sido trasladados al muelle de Favarolo, en tanto que las fuerzas del orden tratan de reconstruir lo sucedido tras una noche de numerosos desembarcos en Lampedusa.

Hoy termina el plazo para que miles de europeos regularicen su situación en Reino Unido. Lo han solicitado 5,5 millones de comunitarios, pero hay estimaciones que dicen que miles de personas que podían haberlo pedido no lo han hecho.

Hay varias razones posibles: que no se hayan enterado o que no se den por afectados. Hay personas que llevan décadas y no entienden que la situación ha cambiado para ellos. Los mayores pueden tener más dificultades debido a la brecha digital. A las personas más vulnerables el Gobierno británico se lo va a solicitar y esperar su respuesta. Si no, estarán en situación irregular en el país. Los españoles y el resto de europeos ya no podrán irse libremente a trabajar a Reino Unido como hacían hasta ahora. Primero deberán informarse y comprobarán que ya no se puede ir y venir, se ha acabado la libertad de movimiento. Se debe solicitar una visa. Para concederla, se tiene en cuenta la formación, tener una oferta de empleo, un salario por encima de los 31.000 euros y cierto nivel de inglés.

La nacionalidad no importa, sino el perfil del migrante. Lo de ir a estudiar inglés y buscarse la vida ya no es viable. Hay visas especiales para perfiles necesarios como los sanitarios. Y es importante tenerlo claro y cumplir con esos trámites porque ya se han dado casos de españoles que lo desconocían y al llegar a Reino Unido les han detenido y expulsado. Todo esto es muy incipiente, ya que en el último año los viajes han estado muy limitados por la pandemia. Si bien ya han llegado algunos ciudadanos comunitarios al aeropuerto y las puertas solo estaban abiertas a residentes o personas con visa de trabajo, y se encontraban con un problema: una entrada ilegal en el país. Se han notificado casos de personas enviadas a centros de internamiento de inmigrantes a la espera de su deportación.

Sylvia Ordás, presidenta de la Coalición de españoles en Reino Unido, vive en Londres desde hace 23 años y ya ha conseguido su ‘settled status’, el estado de asentado imprescindible desde hoy para poder residir allí siendo extranjero. Silvia explica que el plazo extra de 28 días existe solo para personas vulnerables o con casos muy concretos, pero no se puede interpretar como un periodo adicional. “La libertad de movimiento ha terminado. Ya no se puede ir como antes. El Reino Unido en un tercer país y hay que informarse mucho antes de venir”. Ahora, dice, están intentando llegar a todos los españoles pero es complicado, porque hay mucha gente que no está registrada y que puede empezar a ser extranjero ilegal en territorio británico.

En la cumbre europea presencial en Bruselas se tratará, desde el rechazo mayoritario a la legislación húngara sobre la difusión de información LGTBI, hasta las relaciones con Rusia, pasando por las negociaciones del pacto europeo de Migración y Asilo. El gobierno húngaro se escuda ahora en que no se trata de ir en contra del colectivo LGTBI, sino de proteger a los niños. Alemania ha sido una de las impulsoras de una propuesta para invitar a Rusia a una de las cumbres. El gobierno de Macron también apoya esa propuesta y parece que quiere sentarse en la mesa con Putin. La Comisión quiere una política migratoria basada en España e Italia, Bruselas se vuelve a plantear sacar la cartera para contener los flujos migratorios en Turquía y los líderes hoy han condenado la instrumentalización de los migrantes.

Con los corresponsales de Radio Nacional en Bruselas, María Carou; en Berlín, Gabriel Herrero; en París, Paco Forjas; en Roma, Jordi Barcia; y en Moscú, Erika Reija.

Cáritas ha atendido a medio millón de personas que antes de la pandemia nunca habían necesitado su ayuda o que llevaban mucho tiempo sin acudir a ella. La pandemia ha convertido en crónica la situación límite de muchas de las personas atendidas por la organización, cerca de dos millones en 2020. Raúl Flores, coordinador del equipo de estudio de Cáritas, ha explicado en 14 horas que han atendido a familias con hijos, personas que dependían de sectores económicos vulnerables y personas inmigrantes. “Lo más urgente que hemos tenido que atender han sido temas relacionados con la vivienda y las necesidades básicas”, ha afirmado Flores, que ha reconocido que han tenido que pagar alquileres, recibos de la luz, agua e internet. Flores ha asegurado, además, que no han notado que la situación haya mejorado. “No estamos notando que haya muchas familias que estén saliendo. No hay ninguna mejoría clara. Nos hemos encontrado con situaciones de mucha emergencia y desesperación”.