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Algunos alimentos frescos como frutas y hortalizas han disparado recientemente sus precios. La inflación se refleja en las etiquetas del supermercado, pero los agricultores denuncian que los márgenes que aplican intermediarios y distribuidores son excesivos y mucho mayores que  el aumento de los costes de producción. Por un kilo de sandía, el productor recibe de media 0,36€. En la fase de intermediación, esta cantidad asciende a 0,93€ y, en la distribución, se dispara hasta los 2,20€.

Con todo, es una situación que viene de lejos y que reivindica desde hace tiempo la Unión de Uniones de Agricultores y GanaderosJosé Manuel de las Heras, su coordinador, reclama un control por parte de la administración: "No sé si la palabra obligar es la adecuada, pero sí que haya una recomendación". Piden que se elabore un sistema público que determine los costes de producción de cada producto, en base al cual se puedan elaborar los contratos de venta y los posteriores márgenes de beneficio comercial. "Si no de dinamiza desde la administración, es imposible hacerlo", añade.

Antón Costas es catedrático de Política Económica de la Universidad de Barcelona. Desde el 28 de abril de 2021, preside el Consejo Económico y Social de España, un órgano consultivo del Gobierno en materia socioeconómica y laboral. Costas se resiste a usar el concepto de espiral inflacionista porque cree que la subida de precios ha alcanzado su pico: "El petróleo y otras materias primas industriales están descendiendo su valor desde hace más de dos meses. Por otra parte, no veo un crecimiento de los salarios que pudiera alimentar la idea de la espiral inflacionista. Lo que sí que tenemos es un problema de márgenes elevados en algunos mercados de bienes y servicios".

Sobre los impuestos extraordinarios a las compañías energéticas, recuerda que son de carácter temporal e insiste en que el problema radica en el modelo de formación de los precios de la electricidad: "Corresponde a tiempos mejores, cuando el gas tenía unos precios bajos y estables. Cuando eso se altera, no puedes mantener el mismo modelo". Por ello, defiende la necesidad de adecuar los precios a los costes de producción de cada tipo de energía, según proceda del sol, del viento, del agua, de materiales fósiles, etc.

Costas muestra su opinión desfavorable acerca de la bonificación de 20 céntimos por litro en los combustibles: "Cuando los precios se dispararon, la medida tenía sentido en el aspecto social y político, no tanto en el económico". Ahora, sin embargo, cree que incentiva el consumo, perjudica la descarbonización de la eocnomía y genera una agravio comparativo entre las familias con diferentes niveles de ingresos.

Con todo, defiende que España es una economía competitiva: "Desde hace años, estamos manteniendo un excedente neto en la balanza de pagos. Es decir, que venemos mucho al exterior, más de lo que compramos". Asimismo, destaca la capacidad de diálogo: "Probablemente somos el país occidental con mayor capacidad para alcanzar acuerdos sociales".

Bajo su punto de vista, la desigualdad hay que combatirla en el terreno laboral: "Si queremos recuperar la  prosperidad, el foco lo tenemos que poner en la creación de buenos empleos". Siempre, añade, favoreciendo la igualdad territorial y de género.

Íñigo Alfonso se desplaza a Santander para celebrar los 50 años de RTVE Cantabria y el 90 aniversario de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo. Allí hablamos con Miguel Ángel Revilla, presidente de esa comunidad. Reivindica el papel de los ganaderos contra los incendios. "Donde hay un ganadero, no hay incendios", afirma, y avisa de que España se ve abocada a una desertización por el cambio climático, dice, sin solución. El embalse del Ebro se encuentra al 65% de su capacidad y hay municipios con restricciones.

Sobre la inflación, señala que no quiere apuntarse a "la corriente catastrofista" pero que en efecto son tiempos de incertidumbre porque "tal y como está el mundo" no se pueden hacer vaticinios a muy largo plazo. Responsabiliza a EEUU de poder parar la situación, tanto el aumento de los precios, como de la guerra en Ucrania, de la que dice, se resolverá en otoño, con previsión favorable para Rusia. Revilla critica además la globalización y la externalización de los recursos, en el caso de Alemania, que señala que ha cometido "errores tremendos" como prescindir de la energía nuclear y apostar en su mayoría por el gas ruso. "A ver qué pasa", avisa.

Sobre las consecuencias de estos eventos y las actuaciones del Gobierno para tratar de evitar el golpe de la inflación, habla Revilla. "Hay que hacer frente a los gastos derivados de esta situación. Hay que ayudar a las familias que menos tienen [...] Para hacer eso tienes que recaudar impuestos. ¿A quién se los recaudas? Pues a quien gana dinero. Es lógico, solidario y justo que, para compensar ese gasto, la redistribución de rentas se haga de aquellos que están obteniendo mayores beneficios", declara en relación con el anuncio del gobierno de gravar a las grandes empresas energéticas y a los bancos. Añade además que el Gobierno tiene poderes suficientes para hacer que se cumpla.

La mitad de los españoles recortarán en gastos este verano, según un estudio del RACE. La mayoría optará por ir a menos restaurantes. También hay quien reducirá sus estancias, gastará menos en combustible o elegirá destinos más baratos. Son unas vacaciones marcadas por la situación económica. El estudio también revela que dos de cada diez españoles se han visto obligados a cambiar drásticamente sus planes por este motivo. Los billetes de avión este verano son un 25% más caros que en 2019, al igual que los hoteles; mientras que en los restaurantes ha habido subidas de entre un 10% y 15%.

Foto: Getty Images

Sobre el pacto de rentas, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, apunta en TVE que tiene que incluir a todos y que "si alguien está ganando más es el propio Estado". Insta a un plan de eficiencia de las administraciones públicas con el que se podrían ahorrar 60.000 millones de euros. Valora que las medidas impositivas anunciadas por Sánchez en el debate del estado de la nación erosionan la confianza de los inversores y la seguridad jurídica de las empresas.

El Gobierno anunció ayer varias medidas en el debate del estado de la nación y entre ellas destacan las enfocadas a plantar cara a la elevada inflación que afecta al país y que fueron dirigidas a eléctricas, bancos y empresas.  Antonio Garamendipresidente de la CEOE, ha indicado en Las Mañanas de RNE que el Gobierno está “buscando culpables” y le acusa de ser quien realmente “se está beneficiando” de la situación actual a causa de, dice, una facturación “de más de 20.000 millones de euros que se está recaudando como consecuencia de la inflación”.

Además, ha señalado que los anuncios han generado “desconfianza” y que eso puede perjudicar a la larga a la hora de querer sacar adelante otras medidas. Considera que lo primero para plantar cara a la crisis económica es que el Gobierno plantee un proceso de “eficiencia del Estado”, ya que considera que no solamente deben estar para “recaudar”. Y ha recalcado que, aunque sí podemos hablar de plantear un pacto de rentas, primero se debe buscar “cómo rebajamos la inflación y cómo actuar, y no acusar a alguien”.