Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Los incendios no han dado tregua en España y una de las Comunidades Autónomas más afectadas es Castilla y León. Se van a cumplir dos meses del fuego que calcinó la Sierra de la Culebra, uno de los mayores de la historia de nuestro país. Ardieron casi 30.000 hectáreas, 14.000 en solo 24 horas. ¿Cómo está su situación después de estos 60 días? En Las mañanas de RNE se lo preguntamos a Lucas Ferrero, presidente de la asociación La Culebra no se calla. Este lamenta que ahora el paisaje "parece otro" y que tendrán que acostumbrarse. Las pérdidas del incendio son incalculables por las vidas que se ha llevado, señala. En términos forestales y materiales, afirma que es "la gente que estamos aquí sabemos los que no vamos a tener". Le escuchamos con mucha dificultad porque la conexión telefónica no van bien desde el fuego y señala que no saben si la situación va a mejorar en algún momento. "No están ayudando nada a la gente que vive en los pueblos, y si no te ponen requisitos absurdos", denuncia. Un problema que les hace sentise ciudadanos de tercera. "Esto parece la España vacilada", ironiza.

En el pueblo de Losacio también se declaraba otro incendio prácticamente un mes después. "Es una pena" afirma su alcalde Santiago Campo, "porque todo está quemado". Aquí ardían casi 30.000 hectáreas. Al igual que pasa en la Sierra de la Culebra, la cobertura no funciona bien desde que se quemara una de las dos líneas de teléfono que tenía el municipio. Critica que las ayudas solo han llegado para los ganaderos y denuncia que la prevención no se haga en invierno. "Lo que hace falta es un mantenimiento del monte", dice también Ferrero. "Hay que cambiar el modelo de gestión [...] Hay que patear el campo. No se puede esperar a última hora para poner los medios", concluye el alcalde, "nos están abandonando, por eso nadie quiere estar en los pueblos".

La mayoría de los pueblos con menos de 5.000 habitantes perdía población hasta 2017, pero ese año empieza a cambiar la tendencia y dos años más tarde la pandemia de coronavirus refuerza el regreso a los pueblos. Hay 220.000 personas más en los pueblos desde 2018.

Foto: EFE/MANU REINO

En Puebla de Sanabria, en Zamora, la población se multiplica en verano y la faltan médicos. Toda la atención se concentra en un solo centro de salud, porque los cosultorios de diez municipios están cerrados. Cuentan que con los actuales recursos, no pueden hacer frente a la demanda que tienen en plena época de vacaciones.

Ruecas tiene 660 habitantes, pero en los últimos años ha perdido 45 vecinos. Su alcalde ha decidido ofrecer terrenos a precios de saldo para aumentar la población. Se venden solares en el polígono industrial a 30 euros el metro cuadrado. También hay parcelas para hacerse una casa a 30 euros el metro cuadrado.

WIM, What Is Music, es el Encuentro Internacional de Música y Artes de Frías (Burgos), pensado desde hace siete ediciones para generar cultura en comunidad con los vecinos.Es uno de los muchos proyectos culturales que se desarrollan en la España rural.

InformaÍñigo Picabea

Tras 20 años como bombero forestal, José Pedro Hernández, secretario de la asociación de trabjadores de las Brigadas de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF), nos habla de las condiciones laborales de los bomberos que trabajan en la extinción de los incendios que han afectado a varias localidades de Castilla y León, como Cebreros (Ávila), Las Batuecas (Salamanca), Zamora y El Bierzo (León).

En Por tres razones hablamos también con Ángel García, director de Emergencias de Cruz Roja en la comunidad autónoma, que cuenta cómo fue la evacuación de unas 5.000 personas que fueron realojadas en residencias, casas de familiares, el recinto Ifeza y por las que se habilitaron hasta cinxo albergues. Desde Tábara, la zona que ha quedado totalmente calcinada, su alcalde, Antonio Juárez, explica la tristeza que sienten los vecinos al ver el abandono de la zona donde viven y cómo todos han trabajado en la extinción de incendios para intentar salvar su pueblo. 

Hoy en Por tres razones conocemos la historia y presente de algunos pueblos de España, que se están quedando vacíos, gracias al trabajo de dos personas que han decidido inmortalizar los rostros y vivencias de la gente que vive en localidades de menos de 500 habitantes.

El proyecto "Retrato nómada" está creando un archivo físico con todas las instantáneas que van recogiendo, lo llevan acabo Eli Garmendia Carlos Pericás, que recorren españa en 'La Bitxa', una autocaravana que han reconvertido en estudio fotográfico móvil. También hablamos con Ibon Azpilikueta, que vive en el navarro pueblo de Arruazu, que nos cuenta cómo se ha ido vaciando el pueblo de su padre. María Ángeles Rodríguez, nos cuenta cómo fue intermediaria del proyecto en su pueblo de Soria, Señuela, donde solo hay siete habitantes empadronados.