Leonardo pide luchar por su amor a una Bárbara destrozada tras la humillación en 'Valle Salvaje'
- El joven capataz cree que conseguirán estar juntos para siempre
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Desde el instante en que Bárbara llegó a Valle Salvaje de la fiesta de los barones, la joven no ha querido salir de su alcoba. Todos se han preocupado por ella, desde Adriana a Irene, a la que no culpa de lo ocurrido. Pero, aunque intentan animarla, ella tiene muy claro que no podrá casarse nunca con Leonardo. Sin embargo, el capataz de la finca le ha pedido que no se rinda, pues él solo quiere contraer matrimonio con ella. Una conversación muy bonita y especial a la vez que dolorosa. ¿Quieres saber todo lo que le ha dicho Leonardo a Bárbara para seguir luchando por su amor? ¡No te pierdas el emotivo momento!
Bárbara le cuenta a Adriana cómo se siente
Adriana anima a Bárbara a desayunar o dar un paseo por la campa, pero la joven no tiene apetito ni ánimo para hacer nada. "No te puedes hacer una idea de la vergüenza que pasé en esa fiesta. Nadie puede entender lo humillante e injusto que fue", le dice a su hermana sobre cómo se siente. La Salcedo de la Cruz le explica que lo único que quería era agradar a los marqueses, pero ellos se lo agradecieron dejándola en ridículo delante de todos: "No puedo quitarme de la cabeza el momento en el que don Hernando y doña Amanda anunciaron el compromiso. Me sentí la persona más diminuta y desgraciada de La Tierra".
La mayor de las hermanas intenta animar a la pequeña, sabe que es un momento difícil pero que debe tratar de olvidarlo. Algo que también conoce la joven, pero cree que, aunque lo olvide, lo que le espera es mucho peor: "He perdido a Leonardo para siempre, se han prometido delante de todo el mundo, no hay vuelta atrás". Adriana da esperanzas a Bárbara, alegando que solo cuando hayan desposado podrá darle por perdido, pero ella sabe que no pueden llevar la contraria ni al duque ni a los marqueses.
Adriana se ofrece a hablar con José Luis. "Todavía estamos negociando el acuerdo de las tierras, podría acorralarle y convencerle para que rompa el acuerdo de matrimonio", dice la mayor de las Salcedo de la Cruz, pero Bárbara no quiere que ponga la negociación en riesgo por ella, e insiste en que no va a servir de nada: "Si no le casan con Irene, don Hernando y doña Amanda buscarán otra muchacha de mejor linaje para su hijo, más dócil, prudente y delicada que yo". Finalmente, Adriana le promete que no hará nada, pero a cambio debe prometer que no va a rendirse: "Esto no es el final", pues ella sabe de lo que habla: "Has de luchar Bárbara por cambiar tu final".
Irene no tiene la culpa
Desde la Casa Grande también ha visitado a Bárbara su amiga Irene, que ha vuelto a insistirle en que debe comer algo, pero la joven no tiene hambre, ni tampoco ganas de hablar, por lo que le ha pedido que se marche: "Quiero estar sola". Pero la Gálvez de Aguirre también es parta involucrada, por lo que le dice que ella tampoco está bien: "Estoy tratando de insuflarte ánimo, pero me cuesta sostener mi propio dolor. Ha pasado todo tan deprisa que no he tenido tiempo de pedirte disculpas".
Bárbara se extraña de las palabras de su amiga, pues considera que Irene no tiene culpa de nada: "Quítate esa idea de la cabeza, ni tú ni yo sabíamos que los padres de Leonardo tenían un plan orquestado a traición". Irene cree que, si no hubiera ido a la fiesta, nunca habrían anunciado el compromiso, pero la Salcedo de la Cruz intenta quitarle importancia al hecho. "Fuiste a esa fiesta porque yo te lo pedí. Quería que mi amiga estuviera conmigo el día más importante de mi vida, y tenía todo el derecho del mundo. Y estuviste allí conmigo apoyándome, como buena amiga que eres", le dice, pero Irene tiene claro lo que quiere: "Como buena amiga que soy no voy a permitir que esto se quede así".
Bárbara se emociona al escuchar las palabras de su amiga, que insiste en hacer todo lo posible para romper con "este absurdo compromiso". "Sois unos ingenuos, no podemos enfrentarnos a las decisiones de los padres, con el poder que tienen. Estamos en sus manos, esto funciona así. Tú y Leonardo tendréis que seguir adelante con el compromiso, hasta el día de la boda", termina diciendo Bárbara, totalmente rota.
Leonardo pide a Bárbara luchar por amor
Ni Irene ni Adriana han conseguido levantar el ánimo de Bárbara, que solo quiere estar sola, hasta que aparece en su alcoba Leonardo y se tumba en la cama junto a ella. El joven, visiblemente afectado por la situación, coge de la mano a la joven, y la acaricia mientras intenta animarla: "Todo esto pasará". La Salcedo de la Cruz le recuerda que pasará cuando él esté casado con Irene y ella sola en Valle Salvaje, pero el capataz le asegura que eso no va a ocurrir, diciéndole que sí cree que pasará: "Cuando todo este sueño acabe, usted y yo estaremos casados, y seremos felices".
Para Bárbara eso ya no es posible, pero el joven insiste en que él hará que lo sea negándose a toda esta farsa: "Ya se lo dije una vez, y se lo diré las veces que haga falta". Sin embargo, para la hermana de Adriana no hay vuelta atrás, y le cuenta que un heraldo de la Casa Grande ha venido a anunciar el compromiso, por lo que, a estas alturas, media comarca estará al tanto de la noticia: "Así que le agradecería que no jure que va a parar nada cuando esto ya es incontrolable", le pide.
"Me da igual que lo sepan los nobles de la comarca, de la corte o el rey Carlos III. Nadie va a decidir mi destino, nadie me va a obligar a hacer nada que no quiera hacer", dice un Leonardo seguro de lo que quiere, pero Bárbara le avisa, y si se niega puede ser aún peor, al poner en duda la palabra del duque y del marqués, y una deshonra que le harían pagar muy caro: "No hay nada que hacer, acéptelo", añade una Bárbara derrumbada. Sin embargo, Leonardo pide a su amada luchar: "No me deje solo en esto, necesito su apoyo, que me pida que lo haga, que me diga que luche con todas mis fuerzas. Pídeme lo que sea, estoy dispuesto a todo".
¿La ruptura definitiva de Bárbara y Leonardo?
Estas palabras emocionan a Bárbara, que solo le pide al joven un abrazo que Leonardo le da con todas sus fuerzas mientras le pide que sigan luchando por amor, pero la Salcedo de la Cruz ya se ha rendido: "No sirve de nada luchar, no podemos ir en contra de viento y marea. Quedémonos con lo bueno. Ha sido una maravilla el camino, todo lo que me ha hecho sentir, lo que me ha hecho vivir. Su lucha, su arrojo, pero eso no ha sido suficiente. Y al final, ha llegado el final".
Aunque ni Irene ni Leonardo están dispuestos a contraer matrimonio, Bárbara parece que sí se ha rendido. ¿Será esta la ruptura definitiva de la pareja más tiernas de Valle Salvaje? ¡No te pierdas los próximos capítulos de la serie para descubrirlo!
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