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Empeora el estado de salud de Petra, y su puesto en 'La Promesa' está en peligro

La Promesa - El puesto de Petra, en peligro

La señora Arcos sigue preocupando y mucho a todos los integrantes del servicio de La Promesa. Su malestar va en aumento, y el ama de llaves ha llegado a dar directrices contradictorias a las doncellas y cocineras del palacio. Los dolores que sufre son cada vez más frecuentes, teniendo que pasar más tiempo en reposo, pero contando con la ayuda del padre Samuel y de María Fernández, que parece haberse hecho inseparable de Petra a pesar de todo lo que ha sucedido con ellas. La criada está siendo la encargada de transmitir a sus compañeras las órdenes del ama de llaves cuando esta no puede, hasta que el señor Ballesteros ha descubierto lo que traman, señalando a la señora Arcos y amenazando con relevarle de su puesto en La Promesa. ¿Quieres saber cuál es la última hora de su estado de saludo? ¡Te contamos todas las novedades!

Los dolores de la señora Arcos son cada vez más fuertes

Petra no encuentra la manera con la que calmar los fuertes dolores que viene sufriendo desde que se hiciera la herida en los jardines del palacio. A los brotes ya ocurridos se ha sumado una tos que no tiene buena pinta. También, cada vez tiene sus articulaciones más inmóviles, hasta el puto de verse con dificultades para atender a doña Leocadia. Esto hace que su carácter se agríe más de lo normal, y ante su empeoramiento, Samuel ha hecho llamar al médico de nuevo, que tras revisarla, solo ha podido cambiarle el tratamiento.

Sin embargo, el sufrimiento de la señora Arcos cada vez es más intenso, hasta el punto de sentir dolo incluso sin que María haya tocado a la mujer. La doncella ha ayudado a Petra a desvestirse y se ha ofrecido a darle unas friegas para aliviar las molestias, pero la joven solo había tocado el cuello del camisón del ama de llaves para retirarlo cuando ha empezado a gritar de dolor. La muchacha, preocupada, le pregunta cómo puede ayudarla, y si llama al doctor, pero Petra no quiere: "Solo necesito descansar".

La Promesa - Los dolores de la señora Arcos son cada vez más fuertes

El puesto de Petra, en peligro

María Fernández se está volcando en ayudar a la señora Arcos, no solo en sus cuidados, si no también en sus labores como ama de llaves cuando necesita descansar. Tanto que hasta ha estado organizando con Simona y Candela los menús de la semana, algo que no ha gustado al señor Ballesteros, que les ha descubierto en plena conversación. Las tres disculpan a Petra, engañando al mayordomo, pero el silencio las delata y don Cristóbal amenaza con ser la última vez que desatienda su trabajo, hasta que la doncella ha vuelto a salir en su defensa: "Doña Petra no se está escaqueando, es que está enferma".

Para el amante de doña Leocadia, la enfermedad se está extendiendo mucho en el tiempo, lo que provoca que María Fernández vuelva a reprochar su comportamiento al mayordomo y este reprenda a la doncella por desafiar su autoridad. En plena discusión, el padre Samuel llega para calmar las aguas: "Petra está muy enferma, y precisa de descanso. Ya no es una cuestión de caridad cristiana, si no de justicia", le transmite, pero para Cristóbal por encima de la justicia están las normas de La Promesa que él mismo ha impuesto: "En todos mis años de experiencia, jamás he sufrido un motín, y esta no va a ser la primera vez".

El sacerdote insiste en que los criados tan solo están cuidando de una compañera, pero eso no le vale al mayordomo que se enzarza en una discusión con Samuel hasta que aparece en las cocinas la señora Arcos: "María, si has transmitido mis recados a las cocineras, a tus tareas, ya continúo yo". Acto seguido, Petra le pregunta a don Cristóbal si puede ayudarle en algo, momento en el que el señor Ballesteros aprovecha para dejarle claro, en tono amenazante, que tiene que ser ella quien realice sus labores: "El cierre del menú es una tarea que corresponde al ama de llaves".

El médico no encuentra explicación a la enfermedad

El médico ha vuelto a La Promesa para examinar a Petra tras su empeoramiento de su estado de salud. Le ha cambiado la medicación por otra más fuerte, con la esperanza de que esta sí que tenga efecto y mejore el ama de llaves. Cuando el padre Samuel le pide al galeno que le hable sin tapujos sobre la enfermedad que sufre, no encuentra explicación: "No tengo un diagnóstico certero". El específico que le ha administrado tan solo le aliviará los síntomas, pero no producirá ninguna mejoría.

La Promesa - El médico no encuentra explicación a la enfermedad de Petra

Sin embargo, el doctor es todavía más claro con el sacerdote: "La fiebre incipiente que está comenzando a experimentar no augura nada bueno. Lamentable sus síntomas me tienen desconcertado, nunca había visto un cuadro similar". Algo en lo que Samuel también coincide. "Yo en la experiencia que tengo como sacerdote, tratando enfermos, tampoco había visto nada igual", añade.

De lo único que está seguro el médico es de que no se trata de una tortícolis como en un principio le había diagnosticado otro especialista, pero un catarro común tampoco. "Yo me inclino por un trastorno nervioso, incluso neurológico, en este momento no podemos hacer otra cosa que esperar a que mañana se encuentre mejor, a que algún otro síntoma nos clarifique qué le pasa". Palabras nada esperanzadoras que ponen el estado de Petra en la peor de la situaciones.

¿Conseguirá mejorar la señora Arcos con el paso de los días? ¡No te pierdas los próximos capítulos de la serie para descubrirlo!