Torito: "En esta edición de 'MasterChef Celebrity' no hay malas personas"
- Torito revela en El despertador de RNE cómo es su relación detrás con sus compañeros de MasterChef Celebrity 10
- Escucha aquí el podcast Qué decirte que no sepas, en el que Juanjo Bona y Masi Rodríguez analizan lo mejor de esta edición
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"Grabamos doce horas al día y viajamos mucho. El compañerismo es básico. Nos caemos bien todos, porque si no sería inllevable". Así valora MasterChef Celebrity 10 uno de sus protagonistas, Quique Jiménez, Torito en el Despertador de RNE, con Gorka Rodríguez.
Y es que, a pesar de que tras el segundo episodio los fogones del talent culinario más televisivo de la pequeña pantalla están que arden —y no solo por las recetas—, el reportero y escenógrafo menorquín se encarga de bajar el fuego.
Ni la polémica y discutida táctica del mentalista Jorge Luengo, que le costó la expulsión a la cantante Soraya Arnelas, empaña su impresión: el casting de está edición se lleva a las mil maravillas.
Porque sí, este lunes el mago presionó muy pronto —apenas los 20 minutos de cocinado— el pulsador que finalizaba la prueba de eliminación creando "una trama muy gorda" con una estrategia que califica de "un poco fea para los compañeros". "Había un timbre para que el que primero de los nominados que terminara lo pulsara y acabara la prueba", explica.
"Él quiso hacer el plato rápido para que los demás nos quedáramos sin tiempo. El problema es que el suyo quedó hasta crudo y al final casi se va él", afirma.
Por eso, confiesa Torito, "aunque se fuera Soraya para mí a partir de ahora se ha ido él, porque ha sido la peor estrategia que se ha hecho en un programa".
No obstante, lo que pasa en la cocina, se queda en la cocina. "Supongo que con el mago irá todo bien", dice. Porque entiende a Jorge Luego. Comprende su decisión. Es lo que tiene el juego. Despierta el lado más competitivo de las personas. Por muy dormido que esté, como es el caso del de Torito.
"Somos 16 concursantes de perfiles muy distintos", reconoce. Se trata de una "mezcla de folklore" cuanto menos curiosa. "Estamos desde cantantes a presentadores como Parada, pasando por mí", dice añadiendo, fiel a su estilo sin filtros: "Y este año, en esta edición, no hay malas personas. Lo que pasa es que después de tantas horas de grabar, como me ha sucedido a mí, te das cuenta de que eres competitivo y de que quieres seguir una semana más".
Porque obviamente pasarlo bien es importante. El mismo Torito admite estar disfrutando de la aventura al máximo gracias a esa combinación de "no haber cocinado en su vida con hacer tele y show" de la mano de unos compañeros que son "una maravilla porque entran al trapo a todo lo que hago", pero si se puede ganar, mejor que mejor. MasterChef no deja ser un concurso.
"Yo soy un personaje súper potente de esta edición. Entiendo que me pueden llamar insoportable en redes porque es que he ido a jugármela", asegura restándole importancia a las posibles críticas. "Llevaba ocho meses sin currar, tenía claro que cada programa podía ser el último y, como las redes sociales no dan de comer a mi hijo, y cobro por episodio, tanto me da lo que digan", remata.
