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La Moderna

Don Fermín, detenido por el asesinato de su esposa

  • Emiliano ordena que detengan a Fermín
  • El capitán Dávila obedece las órdenes de sus superiores
Don Fermín, detenido por el asesinato de su esposa
Don Fermín, detenido por el asesinato de su esposa Cris R. Sanz de Siria
Sandra de la Torre Bermejo

'La Moderna' se acerca a su final y está más interesante que nunca. Los acontecimientos se suceden casi sin dar un respiro al espectador, y las desgracias se acumulan tanto que ya podemos adelantar que esta semana los moderners se quedarán sin lágrimas después de lo que viene. Hoy tenemos que lamentar la victoria de Emiliano por la detención de don Fermín, pero esperamos que esta maraña se desenrede pronto.

Fermín le declara la guerra a Emiliano

Fermín recibió varias llamadas de Caridad, la hermana de Lázara, que señalaban a Emiliano como el asesino de su esposa. Tras la sospecha que inició Maruja al contarle que Lázara y Emiliano tenían encuentros a escondidas, a don Fermín no le extrañó que Caridad dijese la verdad. Todo parecía apuntar a que Emiliano había sido el culpable, directa o indirectamente, de la muerte de Lázara, y, aunque en otro tiempo habría considerado esa idea como una estupidez, ahora, el sueño del salón de té no menospreciaba esa teoría.

Con el tiempo, Fermín había descubierto que Emiliano no era la persona que él creía, gestos como echar de casa a Paula o negarles trabajo a ella y a Rodrigo en cualquier empresa, le habían hecho pensar que Emiliano tenía un lado oscuro. Fermín decidió encararlo y señalarle como el asesino de Lázara tras recibir la última llamada de Caridad, pero Emiliano negó haber matado a Lázara e incluso le acusó de estar delirando.

Emiliano se siente acorralado y actúa contra Fermín

Emiliano se ha sentido intimidado tras las acusaciones y amenazas de don Fermín, y procurándose una escapatoria, ha decidido actuar primero. El empresario llamó al capitán Dávila distorsionando su voz con un pañuelo para acusar a don Fermín de haber matado a su esposa. El capitán Dávila no tardó en identificar su voz y hacerle una visita a Emiliano, que aseguró saber la verdad sobre el asesinato de Lázara, pero se negó a hablar hasta conseguir una serie de protecciones para testificar contra su gran amigo del alma.

Emiliano culpa a Fermín del asesinato de Lázara

Una vez conseguidas esas protecciones, Emiliano descubrió ante la justicia el supuesto crimen de Fermín. Según el empresario, su amigo mató a Lázara en un ataque de celos tras descubrir su infidelidad con César Morel y después le pidió ayuda para esconder el cuerpo. Según esta teoría, Emiliano habría decidido callar por proteger a un amigo y por una “lealtad mal entendida”, según sus palabras. Emiliano reveló el paradero del cuerpo de doña Lázara y con ello pudimos confirmar que la señora de Villanueva había fallecido.

Nuevas pruebas confirman la teoría de Fermín

Hace tan solo un par de días, tras descubrir el cuerpo de Lázara, el capitán Dávila informó a don Fermín de un nuevo descubrimiento en el caso. Tras registrar el cuerpo y las pertenecías de doña Lázara, el capitán y sus hombres dieron con una carta de despedida que Lázara había cosido en el forro de su vestido. En ella, Lázara se despedía de Fermín y le contaba que sufría graves amenazas por parte de Emiliano Pedraza. La antigua gerente del salón de té le informaba de su partida presionada por las advertencias de Emiliano y le aseguraba que siempre tendría su cariño. Aunque Fermín veía claro que Emiliano era el culpable de la muerte de su esposa, el capitán Dávila no podía dar la carta como una prueba definitiva.

Sin embargo, Dávila decidió hacer una visita a Emiliano para informarle de los avances y le sorprendió su actitud al descubrir que había una carta entre las ropas de doña Lázara. Emiliano quería saber el contenido de la carta, pero el capitán Dávila se negó a compartirlo. Aquello puso a Emiliano muy nervioso y pidió a sus hombres que actuasen. Ahora tenían que poner pruebas contra don Fermín para que su versión se viese reforzada. Sus fallos podían señalarle y cada vez se veía más y más acorralado.

Emiliano descubre que Lázara dejó una carta

Emiliano presiona para que detengan a don Fermín

Por eso, Emiliano ha decidido llamar a sus amigos, altos cargos de la policía, para presionar y que detengan a don Fermín. Así, el capitán Dávila se ha visto obligado a detener al dueño del salón de té a pesar de estar en contra. “Me temo que esto no es una visita de cortesía”, le ha dicho Dávila a don Fermín tras esquivar los gestos de cortesía del dueño de La Moderna. “He recibido presiones de ciertas autoridades que me obligan a no retrasarlo más”, le ha dicho el capitán a don Fermín. “Comprendo”, ha dicho simplemente el tío de Laurita e Inés.

Sabiendo ya a lo que venía y que le presionaban para hacerlo, el capitán se ha visto obligado a justificar sus actos. “En mi opinión esto es una injusticia. Creo que aún queda mucho por investigar, pero por desgracia lo que opinamos los profesionales cuenta muy poco en comparación con lo que opinan los políticos. Solo quería que lo supiera”, le ha explicado Dávila a Fermín. “Lo que voy a hacer ahora no es santo de mi devoción”, se ha excusado el capitán una vez más. Don Fermín ha reconocido que era muy evidente que el capitán actuaba en contra de su voluntad, pero sabía perfectamente que no podía evitarlo. Sabe que los amigos de Emiliano tienen demasiada influencia y que muchos le deben grandes favores. Sin grilletes, pero acompañado del capitán Dávila y sus hombres, don Fermín se dispone a abandonar La Moderna para comenzar una nueva estancia en el calabozo.

El capitán Dávila detiene a don Fermín