De tapas por España - Barcelona gastronómica
- Un paseo culinario por una ciudad deliciosa, abierta, vanguardista y cosmopolita
- El programa se pasea por restaurantes de referencia y el mercado de La Boquería
En el primer programa de De Tapas por España Adrienne descubre la cara gastronómica de Barcelona. Un viaje para averiguar cómo se cocina en sus fogones, qué hay en sus despensas, el modo de salvaguardar las recetas más antiguas, lo que se habla en las barras de sus bares o qué sirven en los restaurantes más vanguardistas.
Un recorrido donde se refleja la convivencia entre lo que siempre ha triunfado y lo que imponen las modas gastronómicas con continuos guiños a todas las culturas. Tanto es así que, en este capítulo, Adrienne acude al bar La plata, donde llevan décadas sirviendo tan solo cuatro tapas. Desde mediados del siglo pasado llevando ofreciendo cada día pescadito frito, montaditos de anchoas y butifarra y ensalada de tomate con cebolla y olivas. Las mismas que cuando fue fundado en 1945 y siguen dando alegrías a todos los viajeros y lugareños que acuden buscando la más alta calidad de sus ingredientes.
Jordi Cruz, esta vez a examen
De la Barcelona más castiza, desde el punto de vista gastronómico, a las últimas tendencias. Para averiguar por donde pasa el futuro, Adrienne se reencuentra con Jordi Cruz. En esta entrevista se intercambian los papeles y la exconcursante de MasterChef Adrienne Chaballe tiene que dar su opinión sobre las creaciones de Jordi Cruz, jurado del concurso. Adrienne prueba y valora, por ejemplo, una fritura de cazón con mayonesa espumosa en adobo. Un encuentro emotivo, cercano y muy divertido. Una charla entre amigos en la barra de uno de los establecimientos del famosísimo chef. Así es Barcelona, una ciudad capaz de salvaguardar el pasado sin renunciar a incorporar lo que está de moda porque entre sus calles se puede ver y degustar cómo combinan históricos templos culinarios con las novedades más recientes.
Un contraste que también se puede ver al pasar de los platos del bar Los caracoles, abierto y en funcionamiento desde hace casi 200 años, a los del restaurante Dos palillos, del chef Albert Raurich y la japonesa Tamae Imachi. En el primero, Adrienne saborea la receta de los caracoles del bisabuelo de la familia Bofarull, fundadora del histórico restaurante. Una taberna realmente emblemática que abre sus puertas en 1835. ¡Y ya son cinco las generaciones las que continúan preparando platos de cocina popular barcelonesa y catalana!
Una tapa del restaurante barcelonés Dos palillos
Con Dos palillos se pone el acento en la fusión porque es parte de su alma y de su personalidad, tanto en decoración como en la propuesta gastronómica. Casan a la perfección texturas y sabores asiáticos con el concepto español de tapa como ocurre con su somen (fideos finos fríos japoneses) con caldo de pollo infusionado con hierbas aromáticas y toques cítricos. Como anécdota, llama la atención la explicación de por qué se llama Dos palillos haciendo alusión a la utilización de los palillos en España y al uso fundamental de los palillos en Oriente.
Barcelona es una ciudad deliciosa, abierta, vanguardista y cosmopolita. Se puede ver en su mercado de La Boquería, lugar de visita obligada al que De tapas por España también acude a ver qué hay en sus puestos y cómo los cocineros y cocineras los transforman.