Blanca Portillo y el día que se cumplió 'La ley del mar'
- La ley del mar determina la obligación de los capitanes de navíos a ofrecer auxilio a personas que estén en peligro en el mar
- El barco de Open Arms sigue inmovilizado en Italia desde el pasado sábado
Blanca Portillo nos redescubre La ley del mar en El ojo crítico de Laura Barrachina y cuenta algunos de los entresijos de la miniserie, ya disponible en RTVE Play.
La ley del mar narra una historia real que tuvo lugar en 2006 cerca de Malta y que nunca debió haber ocurrido. Ese día, un pesquero alicantino llamado el Francisco y Catalina avistaron una patera con medio centenar de inmigrantes pidiendo auxilio a solo unas millas de la costa de Malta. La tripulación proveniente de Santa Pola, encabezada por Pepe Durá y Pepi Irles, no dudó y los subieron al barco para prestarles ayuda. Pero cuando todo parecía indicar que sería una bonita historia de bondad humana y ética de navegantes, las autoridades de Malta se negaron a dejarlos desembarcar. Esto provocó que 60 personas conviviesen en un barco pensado para solo 10 tripulantes durante dos meses. "Es una historia real que ahora se ha convertido en ficción", explica Laura Barrachina sobre la nueva miniserie de RTVE.
En la serie hay un claro protagonista que es el drama humano pero convive con un thriller diplomático. En él, también se "enfrentan" dos de los mejores actores de la interpretación española como Luis Tosar y Blanca Portillo.
Blanca interpreta a Andrea de Velasco Lorente, que era en ese momento la embajadora de España en Malta y que en cuanto se enteró de lo ocurrido se puso manos a la obra para poder aclarar y solucionar el problema. La propia actriz define a Andrea como "una mujer que yo no he tenido la fortuna de conocerla en persona y me hubiera gustado. No lo descarto. No me importaría sentarme dentro de un tiempo con ella y que me contara los entresijos de aquella negociación con más detalle, que seguro que fliparíamos todos. Lo que me atrajo fue la idea de que es alguien que metida en los despachos, que parece que siempre se ven las cosas desde lejos, da un paso adelante, va al barco, ve lo que está ocurriendo y a partir de ese momento se pelea con uñas y dientes por conseguir aquello en lo que cree. Y cuando la vida te dice que las cosas son imposibles, siempre hay alguien que dice que no, que todo es posible si se intenta. Sobre todo hay que intentarlo y ella lo hace. Y es una buena lección para llevarte a casa. Cuando te digan que las cosas son imposibles, no te lo creas, lucha que probablemente lo consigas".
Blanca afirma que recordó la historia al leer el guion y exclamó "¡claro, esta historia!". Vivimos una vida que a menudo va demasiado rápido, somos fugaces y las cosas que pasan a nuestro alrededor también son así, se van igual que llegaron. Tenemos muy poca memoria y deberíamos estar más pendientes a este tipo de hechos para tratar de ponerlos fin. Siempre es bueno que la ficción sea capaz de traérnoslo de vuelta para exclamar exactamente lo mismo que Blanca.
Laura Barrachina explicaba que "es una historia en realidad muy presente. Porque este domingo hemos sabido que Italia ha inmovilizado el barco de la ONG española Open Arms acusándola de obstaculizar a una patrullera libia. Son muchas trabas para quienes salvan vidas en el Mediterráneo. Esta es una historia que nos hace reflexionar en realidad sobre lo que está pasando cada día".
La ley del mar reúne a más de un millón y medio de espectadores
La miniserie se estrenó este pasado lunes y consiguió una audiencia del 13% y más de un millón y medio de espectadores. Todo un éxito para una historia real y que los españoles vivimos muy de cerca hace ya 18 años pero que toca recordar. Además, acercarla a aquellos que no la vivieron con un único pretexto: que no se repita.
Cuando Laura le pregunta a Blanca por el éxito de la serie, la actriz madrileña señala que "la ficción te permite acercarte al lado más humano de la gente. Este tema de la inmigración es algo que vemos todos los días en las televisiones, en los periódicos o en las redes. Y son números, son gentes que aparecen ahí y te dicen han llegado no sé cuántos o hay no sé cuántas pateras. Lo que hace la ficción es entrar dentro de cada una de esas personas que a veces se nos olvida que son mucho más que números. Son seres humanos que huyen de lugares espantosos buscando algo a lo que todos tenemos derecho, que es una vida mejor, una oportunidad. Y creo que la ficción hace eso, poder entrar en sus personas. Creo que eso es lo que ha hecho que la gente se enganchara. Es que es muy emocionante cuando los consideras lo que son, seres humanos en necesidad de ayuda".
Lamine Thior es Barack en La ley del mar
A la tertulia entre Laura y Blanca se une vía telefónica Lamine Thior, actor también de La ley del mar. Lamine interpreta a Barack, uno de los integrantes de la patera y en este caso, el único que hablaba español. Barack se encarga de hacer de enlace entre los inmigrantes y los tripulantes del barco.
Lamine destaca que es "una pasada que haya una producción en la que se toquen tantos puntos de vista porque normalmente solo hay un único punto de vista y aquí ha habido un peso repartido y súper equilibrado. Desde la parte del barco con Luis, la parte de las mujeres de los marineros directamente con Sonia, la parte diplomática con Blanca y la parte de los inmigrantes".
Lamine cuenta que trató de comunicarse con alguno de los integrantes de aquella patera pero no fue posible. "Por desgracia conozco muchos casos, incluso de amigos, que han venido en patera y para mí lo importante es que no se quedara en lo superficial". La intención de Lamine con su personaje no era dar pena ni victimizar a alguien que ha estado en una patera sino que pensaba más en transmitir "convicción y fuerza" por el mismo hecho de subirse a una patera. El actor explica que cualquier persona que se haya subido a una barca para cruzar un mar y buscar de un futuro mejor, te dirá que "tenía que hacerlo".
La censura en el teatro y en el cine, en historias reales y en ficción.
Últimamente nos hemos acostumbrado a ver a Blanca Portillo en papeles relacionados con historias reales. Sin ir más lejos, en 2021 la pudimos ver como Maixabel Lasa en la película Maixabel o el pasado año como Santa Teresa de Jesús en Teresa. Blanca reconoce que estos papeles "llegan y yo siempre he pensado que los personajes llegan por algo y para algo en mi vida. No es solamente que a mí me guste o los elija, sino que aparecen y siempre son muy atractivos, indudablemente. Siempre tienen condicionantes ahí como para que te apetezca mucho encarnarlos, pero no es que los vaya buscando en especial, es que aparecen, aparecen en mi vida y siempre son portadores de muy buenas lecciones".
En los últimos tiempos hay quien lucha por censurar obras de teatro por su contenido u otros aspectos y Blanca Portillo, premio nacional de teatro 2012, responde así: «pues yo lo que pediría es que la gente que quiere censurar, se siente a verlo. Porque normalmente se censuran cosas porque tienes una referencia de algo, pero no te sientas a verlo. Esto es una cosa que ya me ha ocurrido varias veces. Yo recuerdo con Maixabel hubo mucha gente que me dijo: "yo esa película no la voy a ver y no debería haberse hecho". Y lo único que hacía era que para decir eso primero tienes que verla, siéntate a verla, porque a lo mejor cambias de opinión y tienes un prejuicio demasiado grande. Y a lo mejor resulta que cuando lo ves, no hay razones para quejarse. Emitimos juicios sin saber por qué. Pero si no lo has visto, ¿por qué no te sientas a verlo? Y después tendrás más razones para defender aquello en lo que crees. O a lo mejor resulta que te cambia la opinión. Nos falta ser respetuosos».
«A mí hubo gente que me dijo: "yo tenía tantísimos prejuicios y pido disculpas porque viendo la película me he dado cuenta". Con Maixabel pasó. Es que somos muy intransigentes, somos muy poco escuchadores», explica la actriz sobre testimonios que escuchó tras su película con la banda terrorista ETA como polémica en la trama.
Hace unos días se representó la obra de teatro de Teresa, basada en la obra La lengua en pedazos de Juan Mayorga, a pesar de la concentración organizada por Vox para impedir su celebración. El hecho es que esta vez, el arte ganó a la censura. Blanca finaliza con estas palabras: "me parece increíble, de verdad, que la gente vaya a la puerta de un teatro para impedir que se haga una función. El teatro es un espacio de libertad. No hace daño a nadie. El teatro hace bien. Hace mucho bien siempre. Es un acto de paz y es un acto de libertad. No hay derecho a esto, no tiene sentido. Por eso yo a esta gente me encantaría decir primero entren, véanlo y después tendrán motivos para opinar".