Receta de bizcocho de laurel con un 'toque' de leyenda

• ¿Sabías que esta hierba aromática puede utilizarse en repostería? Anota estos ingredientes, ¡y a la cocina!
• Su origen nos remite a la antigua Grecia y a la leyenda de Dafne y Apolo: te la contamos

Aprende a preparar este delicioso bizcocho

El laurel es uno de los ingredientes que no pueden faltar nunca en la cocina. Aromáticas y sutiles, sus hojas son fundamentales para dar sabor a nuestras comidas. Todos sabemos que son el secreto de cualquier guiso o cocción exitosa, pero... ¿sabías que también puede utilizarse en repostería?

Esta hoja, cuyo origen se ubica en Egipto y en la Antigua Grecia, tiene, además, muchas propiedades saludables y una historia de leyenda. Te lo contamos a continuación, pero, primero, apunta esta receta de bizcocho en almíbar con un toque arómatico y diferente.

Bizcocho de laurel
Bizcocho de laurel

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Ingredientes

Preparación

4 huevos 50g de panela 50g de azúcar de caña 1 cucharada de sal 40gr de aceite de oliva virgen 1 cucharada de levadura química 1 cucharada de bicarbonato 200g de harina de arroz 2 limones 35g de laurel

Batimos los huevos con panela y azúcar de caña Echamos el aceite mientras batimos para que se vaya integrando en la masa Añadimos la sal, la levadura química, el bicarbonato y un poquito de harina de arroz Añadimos la ralladura de limón Y añadimos a nuestro protagonista: el laurel, que ya está triturado Por último le ponemos masa madre, ya un poquito fermentada De ahí al horno Por último, lo bañamos con almíbar de limón (a base de azúcar, zumo de limón y agua) Añadimos el laurel triturado

La leyenda del laurel

Aunque en España solo utilizamos sus hojas, en otros lugares, como por ejemplo en Italia, es habitual emplear también los frutos del laurel en los asados: unas pequeñas bayas perfumadas que también sirve para dotar a los alimentos de su característico sabor. El laurel es un árbol de hoja perenne, con el tronco recto y la corteza gris. En nuestro país, la madera se utiliza en marquetería en varios lugares. Pero, ¿sabías que este árbol tiene su origen en la antigua Grecia?

Así es. Mientras los primeros usos documentados del laurel como hierba aromática nos conducen a Egipto, donde la hierba además tenía un papel fundamental en las momificaciones de los faraones, en Grecia se empleaba para usos medicinales y terapéuticos... y también como símbolo de las grandes victorias. Seguro que tienes en la cabeza esas imágenes de hombres triunfadores, deportistas, estadistas o militares, portando en su cabeza una corona de laurel... pues bien, esto se debe a la leyenda griega.

Cuenta la historia que el dios Apolo se enamoró de una ninfa, Dafne, que no lo quería y huyó de él. En su persecución, Apolo le pidió ayuda a Zeus, que la convirtió en el árbol del laurel. Por eso Apolo se puso una corona de Laurel, para honrar a su amada, y por eso los griegos se ponían coronas de laurel: para honrar al dios Apolo.

Beneficios y propiedades del laurel

El laurel contiene varios aceites esenciales que facilitan la digestión y ayudan a reducir los gases, estimulando el apetito y la motilidad intestinal. Es ligeramente diurético, por lo que favorece el sistema excretor, y es rico en calcio, hierro e hidratos de carbono. Eso sí: lo consumimos en muy poca cantidad, así que es posible que no nos beneficiemos en exceso de estas propiedades... pero nunca está de más convertirlo en una parte de nuestras comidas, aportando menos calorías vacías que otros elementos que se utilizan en repostería.

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