Enlaces accesibilidad

Secun de la Rosa: "No hay que idealizar el pasado"

  • El actor interpreta a un joven que descubre las piscinas de la Barceloneta en una época de luchas sindicales y de contracultura
  • Para escribir el monólogo se inspiro en su barrio, Nou Barris, y habló con sus "primos, tios y gente de la zona"
Secun de la Rosa ha presentado 'Las piscinas de la Barceloneta'
RTVE.es

Sebastián Alonso Roca es un chaval de los 70 de barrio que está viviendo las luchas sindicales, todo un momento contracultural muy fuerte”, ha contado en Las tardes de RNE el actor Secun de la Rosa sobre su personaje en la obra Las piscinas de la Barceloneta, que también ha escrito. “Él descubre gracias al autobús 47, que le saca de su barrio hasta la Barceloneta, la piscina de sal”.

Las tardes de RNE - Secun de la Rosa se moja en 'La piscina de la Barceloneta'

Estas fueron “las primeras piscinas libertarias donde se permitió que hombres y mujeres se bañaran juntos allá por los años del siglo pasado”. En los 70 se juntaban allí “las putas y los maricones, como decían en aquel momento”, pero también “los marineros, los del Barrio Chino, el lumpen, los artistas del Paral·lel, la que gente que no tenía familia, los que venían huyendo de sus pueblos y acababan en la capital”.

Primos, tíos, gente de la zona

“Me he inspirado mucho en Nou Barris y en todo el extrarradio barcelonés porque lo conozco y he situado ahí el personaje”, ha reconocido. También ha destacado que ha indagado mucho hablando con sus “primos, tíos, gente de la zona”. “Al final uno acaba poniendo muchas cosas de uno mismo, cuando escribe”.

“No soy yo porque me vine a Madrid a los 18 años, que me acogió muy bien para estudiar teatro. Sebastián se queda ahí en aquellas piscinas, en las fábricas de telas, en los telares, con su familia”.

“No se podían idealizar”

“Los que hemos trabajado en la función sabemos que en el 77 las libertades no se podían idealizar, porque estaba luchando más que ahora”, ha dicho Secun de la Rosa sobre la intención de no exaltar estes años en la obra.”Incluso, lo que ahora parece cool, en aquel momento era bastante lumpen. Había muchos colectivos que estaban denostados”.

“Esto de decir que en el 77 éramos más libres, creo que se mezcla que ahora mismo estamos luchando más por la libertad o es como una segunda capa de libertad más fuerte en muchos aspectos, pero que a lo mejor se mezcla con esta cosa de que lo políticamente correcto".

“A lo mejor en el 77 se podían decir cosas en voz alta, pero no sé si había más libertad, ni tampoco sé si es menos libertad no poder decirlas. Creo que hay como un batiburrillo cuando la gente habla de estas cosas. Yo creo que no, se luchaba en aquel momento de una manera incipiente por la democracia y ahora se lucha desde otro momento. Pero no hay que idealizar el pasado”.

Ser humilde

Las piscinas de la Barceloneta es “complicada porque no tiene trampa ni cartón” y “hay que ser humilde en el sentido de que lo está contando Sebastián Alonso Roca y no puedo hacer los otros personajes como si fuera Secun, los cuenta”, ha explicado el actor. “Es todo más sencillo en el sentido de que hay que buscar la emoción pequeñita”, “más emocional y los mimbres son otros”.

“Es muy complicado porque hay que defender cosas que pasaron en la realidad”. “Hemos hecho un trabajo realmente de personaje y esto creo que al final lo devuelve en el aplauso, porque cuando haces otra cosa el aplauso está muy bien, es momentáneo. En este, yo noto que es perdurable”.

Las piscinas de la Barceloneta se puede ver en el Teatro Infanta Isabel de Madrid hasta el 30 de junio.