Nieves Herrero indaga en el joyero de las reinas españolas
- La periodista ha presentado su nueva novela: El joyero de la reina
- Explica qué fue de "las joyas de pasar" que exhibe la reina Leticia
La periodista Nieves Herrero quedó fascinada con una foto que vio de la Reina Victoria Eugenia “completamente cargada de collares, con la perla peregrina, los chatones, sus pendientes, su tiara de la flor de lis”. Esta imagen la dio que pensar, tiró del hilo y llegó a una documentación. A partir de aquí empezó a confeccionar su nueva novela: El joyero de la reina. Con este libro pretende que se descubre “el porqué de su amor a las joyas y al final llegamos a la conclusión de que eran su fuerza, era dónde ella sacaba energía al final llegamos a la conclusión de que eran su fuerza”, ha contado en Tarde lo que tarde.
Victoria Eugenia de Battemberg, la última reina española antes de la Segunda República y abuela del actual rey emérito, se casó con Alfonso XIII cuando llegó a España desde Inglaterra en 1906. “Se espera una capital importante. Venía de Londres. Le parece que Madrid es pequeña”. Solo había el Hotel Paris en toda la ciudad y “no había donde alojar a los invitados de la boda”. Justo ese día, mientras “atraviesa la calle Mayor, está a punto de doblar para irse hacia el Palacio Real y le tiran un ramo de flores”. Era una bomba. Fue un acto terrorista en el que murieron varias personas que la resguardaban. “Probablemente uno de los días más felices de tu vida, se transforma en una gran tragedia, mueren personas, muchísimos heridos, personas mutiladas”. Además que fue una época muy convulsa en España porque “cambiaba de gobierno una semana sí y otra también, había mucho movimiento en la calle, revueltas”.
De Victoria Eugenia a Leticia
“Cuando ella siente que va a morir, tiene miedo de que esas joyas que para ella han sido fundamentales, se pierdan en la herencia de sus hijos y que sus nueras acaben vendiéndolas”, como de hecho así ocurrió con algunas de ellas. Por eso, “las que ella consideraba fundamentales” les puso el nombre de “las joyas de pasar”. Tenía como objetivo que “fueran de mano en mano de las reinas que fueran detrás de ella” y son las que en la actualidad exhibe la reina Leticia.
Dos personalidades contrapuestas
Victoria Eugenia llega a Madrid “con aires renovados, de la corte inglesa, donde las mujeres fumaban y bebían”. En España las mujeres siempre estaban de luto porque “había alguien al que guardar luto”. En el hecho de dirigirse al rey Alfonso XII “sin que le pidiera la palabra”, esto le chocaba a su madre, la reina María Cristina. “Eran dos mundos completamente distintos. La Reina María Cristina era la rigidez, la compostura” y Victoria Eugenia “venía jugando al tenis, al golf, montando a caballo”.