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Amores de fronteras y sangre

Olivenza, la guerra de las naranjas y la cultura de frontera

  • Descubre la guerra de fronteras que tuvo lugar en 1801 y cómo influyó a la cultura de Olivenza
  • Jordi Corominas analiza cómo afectó la frontera con las relaciones sociales de la época
  • Ya puedes disfrutar del nuevo capítulo de Históricos Anónimos en RTVE Play

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Históricos anónimos - La guerra de las naranjas

Históricos Anónimos nos lleva esta semana a la Olivenza de 1801, durante el estallido de la guerra de las naranjas. Una batalla que enfrentó a España y Portugal durante 18 días y que terminó con la derrota del país luso y la anexión de parte de sus territorios a manos españolas. Al frente de la contienda estaba el coronel Manuel de Godoy, pero como en cada uno de los capítulos de este programa, Jordi Corominas pone en foco en relatos menos conocidos, pero también importantes en el desarrollo de este acontecimiento.

La de Olivenza es una historia cimentada en la cultura de frontera, un lugar voluble y variable en su personalidad y carácter donde desde lo pequeño y desde el silencio la memoria va dejando su impronta. Todo se sucede veloz, en pocos días, con el Guadiana vigilante, separando Portugal y España, pero la historia comienza más de 500 años atrás.

La guerra de las naranjas en 'Históricos anónimos'

La guerra de las naranjas en 'Históricos anónimos'

Al filo del Guadiana: templarios y reconquistas

En 1230 el rey Alfonso IX de León concedió a los templarios unos enclaves territoriales como recompensa por su participación en la reconquista de Badajoz. La orden creó entonces la encomienda de Oliventia, posteriormente conocida como Oliveza. Poco después, Alfonso X el Sabio, cambia de opinión y expulsaría a los templarios de aquel importante enclave fronterizo, entregándolo al concejo y obispado de Badajoz.

En 1267, Alfonso III de Portugal y Alfonso X el Sabio acordaron que el río Guadiana delimitara sus reinos por el Sur, pero había zonas donde la raya no coincidía con accidentes geográficos y, entonces, la frontera se volvía imaginaria y genera algún que otro conflicto. También generó muchos problemas para las gentes y campesinos que habían vivido siempre al margen de las cuestiones políticas y que terminaron por tener la cocina en España y la alcoba en Portugal, las llamadas “casas de la duda”.

Olivenza, el pueblo que combina la cultura española y portug

En 1297, con el Tratado de Alcañices por medio, Fernando de Castilla cedió Olivenza al rey de Portugal. Y así permanecería durante los siguientes 504 años, hasta que bajo el reinado de Carlos IV y bajo las ordenes galas, Carlos IV decide volver a tomar Olivenza.

Moisés Cayetano, divulgador de historia militar explica a Corominas cómo Olivenza, una ciudad situada en llano tiene elementos muy similares a los que tienen territorios fortificados, como castillos y torres defensivas. “Olivenza no fue concebida como un lugar defensivo, es un campo fértil para el cultivo, pero desde su concesión a los templarios la ciudad termina configurándose con construcciones bélicas”, comenta. De hecho, Olivenza es una de las pocas ciudades en llano fortificada de la península ibérica. Llegó a tener hasta cuatro órdenes de murallas diferentes, pero las batallas y el tiempo las redujeron a ruinas.

¿Por qué se llama la batalla de las naranjas?

El nombre de esta guerra, se debe a una sátira. Cuando Godoy se hace con Elvas, los soldados recogieron unas cuantas naranjas, que Godoy hizo llegar a su supuesta amante, María Luisa de Parma, esposa del rey de España, Carlos IV. La oposición a Godoy, comenzó a hacer bromas y chistes, sobre las relaciones extramatrimoniales entre la reina María Luisa de Parma y su primer ministro. Así es como una anécdota, utilizada por parte de la oposición, sirvió para bautizar un conflicto bélico.

La raya, la frontera más antigua de Europa

Cuando hablamos de fronteras históricas suele pensarse en algunas tan imponentes como la de Alsacia y Lorena, por lo que concierne a Francia y Alemania, pero en la raya que separa España de Portugal en Olivenza también se ha jugado el destino de la historia. La raya es la frontera más antigua de Europa.

En este sentido, Olivenza fue clave en el juego geoestratégico, pero no entre España y Portugal como cabría pensar en un primer momento. Las dos naciones en realidad no están enfrentadas, solos eran títeres políticos del mapa internacional más amplio donde Francia e Inglaterra manipulan los intereses de las naciones europeas a su antojo. En este sentido, Francia, con Napoleón al mando, tomaba parte con España e Inglaterra lo hacía con Portugal.

Cultura de frontera

Pese haber sido una contienda rápida, llevada a cabo en tan solo 18 días, las consecuencias para la población de Olivenza fueron enormes. Para empezar, la ciudad cambio su sentido estratégico, pasando de ser un territorio defensivo y altamente militarizado a centrarse en aspectos de producción agrícola explotando aquellas tierras fértiles. Algo que, a la larga, concedería a Olivenza mayor beneficio económico, pero cuyos cambios tardaron tiempo en calar.

Durante los primeros años en los que Olivenza ya formaba parte de los territorios españoles, la población se manifestó en contra del Estado Español. Pero aunque fueron impuestas la lengua y la cultura, muchas veces a la fuerza, la memoria lusa permaneció hasta nuestro días. Esto se puede ver en los restos urbanísticos típicos de Portugal que conserva Olivenza, en el pavimento, de piedras blancas y negras, característica del empedrado portugués. Además, en las calles de Olivenza pueden verse las placas de las calles que aún recuerdan sus segundos nombres y los oficios y episodios históricos más relevantes de la ciudad.

Empedrado luso de Olivenza

Empedrado luso de Olivenza

Puente de Ajuda

Durante su recorrido, Colomina también descubre un punto anónimo para la historia, pero que fue clave en el relato de Olivenza. El puente de Ajuda, hoy en ruinas, fue destruido hace más de 300 años por las tropas españolas que buscaban impedir que el pueblo pudiera pedir ayuda y refugiarse en Portugal.

Con una longitud total de 380 metros, el puente se sustentó sobre diecinueve arcos, alcanzando una altura de quince metros y una anchura de cinco. Poseía el arco central más amplio de la época. Casi en su centro se conservan aún los restos de una torre que defendía el paso.

Tras diversos intentos de reconstrucción, se consiguió restaurar parcialmente en el año 2003, pero aún quedan por recuperar los arcos centrales. No obstante, constituye una de las piezas monumentales más importantes de la comarca de Olivenza.

Puente de Ajuda de Olivenza y Elvas

Puente de Ajuda de Olivenza y Elvas

Gastronomía de Olivenza

A plato y cuchara puesta, Colominas también aprovecha su viaje en el tiempo para descubrir los majares de la zona. En la pastelería de Casa Fuentes, Históricos Anónimos descubre la tarta tecula mecula, la especialidad de Olivenza y en concreto de este local que regenta Carmen Rodríguez. También prueba la sopa sorda, una sopa de migas, ajo, caldo de verduras y huevos escalfados.

Nos os perdáis el estreno del capítulo sobre el La guerra de las naranjas en Históricos Anónimos, este sábado 31 de julio a las 20.00 en La 2 y a la misma hora, en directo, en La 2 online. También RTVE Play, tras su emisión, en la web del programa.