El corazón de Margarita sigue latiendo por Gonzalo

• Te contamos el capítulo 36 a través de los mejores momentos
• Aviso: si no has visto el capítulo el texto te puede desvelar algunas tramas
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Aunque parezca imposible Águila Roja también es mortal. En una de sus investigaciones por el bosque, Gonzalo ha recibido la fortuita picadura de una serpiente. Sátur, que se siente culpable, hace lo posible por encontrar un remedio que salve a su amo.

La malherida mano de Gonzalo ha puesto en alerta a Margarita que se preocupa sobremanera por la salud del que aún es dueño de su amor. Con los sentimientos a flor de piel, ayuda a su cuñado a vestirse.

Es precisamente Margarita una punta del triángulo amoroso junto a Juan y Eugenia. El médico de la villa, que no soporta la presión por tener que decantarse por una u otra, ha encontrado una salida en las peleas callejeras. Allí protagoniza uno de los mejores momentos cuando se encuentra con el maestro, 'tercero en discordia', y ambos mantienen una acalorada discusión.

Águila Roja - Enfrentamiento entre Juan y Gonzalo

El amor entre los protagonistas no es el único que sigue encendido en la villa. Martín, que aún arrastra las heridas del disparo y sigue en búsqueda y captura, debe abandonar la región y huir para salvar su vida. No sin antes despedirse de su amada. Irene, muy a su pesar, no puede acompañarle. Los amantes se demuestran su amor en una emotiva escena que finaliza con un tórrido beso.

Águila Roja - Martín a Irene: "Te quiero"

Nuño, a las puertas del cadalso, sigue jurando y perjurando que es inocente. Será el Comisario el primero en creerle y en intentar sacarle de prisión. Las malas artes del Cardenal Mendoza aguarán los planes de huida de Hernán, que será relevado de su puesto.

Uno de los momento de mayor intensidad en la escena ha sido la despedida entre barrotes de Lucrecia y su querido hijo. Más de un fan de Águila Roja ha derramado sus lágrimas junto a la Marquesa de Santillana, impotente por no poder salvar a Nuño.

Águila Roja - Lucrecia se despide de Nuño

Beatriz, 'entre la catana y la pared', acaba confesando que el verdadero progenitor de su retoño es uno de los criados y no su padre como pensaba Gonzalo. ¡Nuño es inocente!

Águila Roja - Minuto de oro del capítulo 36