Enlaces accesibilidad

'Murcia', un intrigante cómic que mezcla magia, mitología, religión y política

  • Una historia que utiliza la fantasía para hablar de los problemas reales
  • "La ciudad de Murcia es la protagonista del cómic" -asegura el autor-

Por
Fragmento de la portada de 'MURCIA'
Fragmento de la portada de 'MURCIA'

Diego Corbalán

Guionista y dibujante murciano más conocido por el pseudónimo de Magius, “reencarnación de un antiguo pintor de beatos apocalípticos del siglo X”. Ha publicado 'Black Metal Comix' y ha participado en fanzines como 'Putrefacción Anal', 'Clásicos Caninos' o 'Hammon'.

¿Quién nos gobierna realmente? ¿será posible que algún día los españoles olvidemos nuestras diferencias y consigamos llevarnos bien? Son sólo algunas de las preguntas que nos plantea MURCIA (Entrecomics Comics) de Magius (Diego Corbalán). Un cómic que también indaga en la diversidad de los españoles, influenciados por numerosas culturas (romana, árabe, judía) y en el origen de la actual crisis económica, social y política.

Y lo hace mediante una interesante historia de ciencia ficción en la que nos presenta a sociedades secretas formadas por hombres de negocios y empresarios, que se ocultan bajo la ciudad de Murcia, desde donde dirigen nuestros destinos. Aparte de entregarse a todo tipo de sacrificios humanos y orgías, con una reinterpretación pagana de los símbolos de la religión católica.

MURCIA –asegura Magius- es el triunfo de la naturaleza pagana sobre el engaño de una religión monoteísta y antinatural. La religión es la droga perfecta para adormecer a un pueblo, y Murcia, su ciudad, su región, es el ejemplo perfecto de pueblo dormido. Pero bajo el azulado sol primaveral, y entre las cañas y los limoneros de la huerta, se solucionan muchos problemas que la democracia está lejos de resolver”.

La imaginería de la Semana Santa

Un cómic en el que la imaginería de la Semana Santa juega un papel fundamental. “Lo que es más interesante de toda la imaginería de la Semana Santa de Murcia no son sus imágenes religiosas, sino la estructura de sus procesiones y la indumentaria de sus cofrades –asegura Magius-. Por ejemplo, hay una clara diferenciación de clases dentro de las tradicionales procesiones murcianas, pues existen "mayordomos" y "estantes". Los mayordomos han sido en el pasado miembros de la aristocracia, mientras que los estantes eran los labradores que trabajaban en sus tierras. Algo de ese orden social aún se mantiene en la sociedad murciana”.

En el cómic, los empresarios forman la Cofradía de la Muerte para mantener al pueblo oprimido. “Es un invento para el cómic; se llama así porque sacan su procesión el día de la muerte de Jesucristo. Si la cofradía real, que viste del mismo color que en el cómic, tiene ritos secretos, los desconozco, pero es una de las cofradías más antiguas de Murcia”.

Pero las tradiciones de Semana santa no son las únicas que aparecen en el cómic. “Las tradiciones murcianas juegan un papel fundamental en la historia –asegura Magius-. Siempre han estado basadas en el medio de subsistencia principal de la ciudad: la huerta. La huerta define a la ciudad, y sus fiestas populares, así como las religiosas e incluso la toponimia deriva de la vida en la huerta. La estética del cómic es por ello muy "huertana"; el uso del traje regional murciano para las ceremonias de adoración a dioses paganos de la agricultura o de ritos y sacrificios van mucho más allá de la mera estética”.

El cómic también es una durísima crítica a las instituciones políticas y religiosas. “Sí asegura Magus- sobre todo a ciertas empresas y personas que creen tener el derecho a utilizar el poder en provecho propio, pero también es una crítica a la sociedad por su pasividad”.

Y aunque las sectas y los sacrificios podrían recordarnos a Lovecraft, Magius asegura que “No hay nada porque jamás he leído nada de ese autor. No hay influencia de nadie en particular, pero sí de la mitología clásica y cananea, y algo de magia ceremonial”.

La ciudad de Murcia es la gran protagonista

No busquéis protagonistas en este cómic porque “no los hay -asegura Magius-. De hecho creo que pocos de los que aparecen tienen nombre, y acaso ese detalle importe algo. Yo creo que la verdadera protagonista es Murcia. Los personajes que interactúan en la historieta son prototipos de murcianos en potencia: como el típico empresario, sin apenas cultura, de origen humilde pero que se entiende bien con el poder, que no cuestiona nada en absoluto y se pone a su servicio. Realmente, los que más se mueven en la historia son estos personajes, que apenas son diferentes unos de los otros”.

El cómic también es un recorrido por las calles de Murcia y sus rincones “La ciudad está continuamente presente en el cómic –continúa el dibujante-. Abundan los paisajes típicos de esta tierra, como la huerta o el cerro de Monteagudo; además de la Catedral de Murcia y muchas de sus calles. De la misma manera, la propia Murcia adquiere una forma personal, al invocarse en algunos capítulos del cómic a la primitiva diosa romana: Murcia, asociada al culto de Venus, y relacionada con la planta del mirto (que de ahí viene su nombre)”.

En cuanto a su estilo de dibujo, Magius nos confiesa que: “No puedo definirlo mucho, es lo que me sale y punto; aunque hay ocasiones en las que me han definido como línea clara. De todas formas, creo que el espíritu de mis cómics tiene un ambiente más sucio y malsano de lo que transmite una "línea clara". A mí me gustan los viejos cómics de Pedro Vera, Richard Corben y Robert Crumb, y creo que me han influido algo...”

Por último, el dibujante nos avanza sus proyectos: “Seguir dibujando cómics, y que me publiquen más historietas... quien se atreva a hacerlo, claro”.