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Los familiares de las victimas de la dana los recuerdan "unidos por el dolor" y señalan a quienes "omiten su deber"

Virginia Ortiz Riquelme perdió a su primo en Letur el día de la dana: "cambió nuestro corazón para siempre"

Un año después de la tragedia, las heridas que abrió la riada aún escuecen. "Seguimos caminando con cicatrices en el alma, pero con mirada firme", ha afirmado Andrea Ferrari Canut en el homenaje de Estado a las víctimas de la dana. "El agua lo arrasó todo. Las calles, las casas, las vidas de los que se fueron y las de los que nos quedamos", ha lamentado esta joven valenciana. La catástrofe le arrebató a su madre, Eva María Canut Montoro, que viajaba en el coche de una compañera de trabajo de vuelta a casa cuando la crecida la sorprendió. Pero la suya solo es una de las 237 historias que dejaron de escribirse ese día.

"Lo siento por vuestra pérdida, que es la mía también", decía al tomar la palabra Virginia Ortiz, prima de Juan Alejandro Ortiz, que murió en Letur a los 34 años. En su discurso ha recordado que las inundaciones son "el fenómeno natural que más muertes provoca" en España, pero ha insistido en que no fue esa la causa de la catástrofe que ahora sufren: "Es quien omite su deber a sabiendas de que su omisión puede suponer la pérdida de vidas humanas quien comete el acto primigenio que deriva en sus muertes".

"Mientras exista memoria, nunca habrá olvido"

"Un año después, todavía no ha llegado la calma. Solo llegará con esfuerzo, esperanza y unión", lamentaba Andrea Ferrari, que animaba convertir el homenaje "en una lección". Antes, ha aprovechado para recordar a su madre como una mujer "que iluminaba todo donde iba" y ha dicho que esa fuerza que radiaba es la que ahora le impulsa a buscar "motivos para sonreír", pese a que la vida pese. "Mientras exista memoria, nunca habrá olvido, y lo más importante es que prevalezca la verdad, el respeto y la humanidad", ha concluido después.

El 29 de octubre de 2024, Slim Regaieg Regaieg salió de casa para ir a trabajar y nunca regresó. "Si hubiese sabido que la conversación del día 29 por la tarde era la última, habría dicho tantas cosas", ha lamentado su esposa, Naiara Chuliá Beitia, que ese día le esperó durante horas en casa junto sus dos hijos, Adam y Sofía, convertidos ahora en su "salvación" tras la pérdida. "En esta sala hay 237 historias, con nombres y apellidos, familias destrozadas y sueños rotos", ha recordado después.

Naiara Chuliá también ha mencionado a las familias que perdieron a más de un familiar y a los niños que han perdido a sus seres queridos. "No me puedo imaginar por lo que estáis pasando", ha dicho después, al recordar que todos son "almas rotas unidas por el dolor". "Tengo esperanza en que un día encontremos razones para seguir adelante. La mía son mis hijos: han perdido a su padre, no pueden perder también a su madre", ha añadido.

Naiara Chuliá recuerda a su marido, víctima de la dana: "El momento más duro fue decirles a los niños que no volverías"

Mensajes de agradecimiento a la oleada de ayuda

"Nos movilizamos para encontrarte y te encontramos", ha dicho Naiara Chuliá Beitia, que recordaba las largas horas de movilización y búsqueda incansable de víctimas, la mayoría sin vida. "El momento más duro de mi vida fue decirles a nuestros hijos que no volverías", lamentaba después, dirigiéndose a su difunto marido.

Andrea Ferrari ha trasladado su agradecimiento a las miles de personas que salieron a ayudar y que "lo dieron todo". Ha recordado a los servicios de emergencias y a las fuerzas de seguridad, pero también a las oleadas de voluntarios que llegaron desde distintos puntos de España "para que Valencia pudiera salir del barro". "Gracias por recordar al mundo entero que, en medio del caos, la humanidad sigue existiendo", ha dicho después.

Virginia Ortiz ha agradecido a los profesionales que trabajaron sobre el terreno en Letur y "que recorrieron cuevas, zanjas y lodos, y que cumplieron su promesa de encontrar" a los desaparecidos, aunque "sin ser ya lo que solían". "Lamento que no todos tuvieran ese consuelo", ha dicho después, en referencia a aquellos familiares que por ahora no han encontrado los cuerpos sin vida de los suyos. Un año después, dos de las víctimas mortales continúan desparecidas.

Recuerdos imborrables y 237 familias rotas

Cada persona que murió ese día dejó "un recuerdo imborrable", una "familia rota que la echa de menos" y "una historia por contar", ha dicho Ferrari, que ha animado al resto de familiares a caminar con la fuerza de quienes ya no están. Además, ha instado a llevar a cabo un "acto de compromiso" y a "mantener vivo su recuerdo para siempre".

Antes de su intervención, los 800 asistentes al homenaje en el Museo de las Ciencias de Valencia —la mayoría familiares de las víctimas— han escuchado la lectura de todos los nombres de las víctimas, seguida de un largo aplauso. Algunos, entre sollozos, levantaban las fotos de los suyos según avanzaba la enumeración. La dana causó la muerte de 229 personas en la Comunidad Valenciana, siete en Castilla la Mancha y una en Andalucía.

Después, la cantante valenciana María Bertomeu, 'La María’, ha interpretado una delicada versión en acústico de su tema Mon Vetlatori, una canción que habla de la pérdida, pero también del amor y la memoria. En el centro de la sala, 237 rosas blancas representaban a los fallecidos.

Aunque durante los discursos no ha habido alusiones directas, antes, numerosos familiares presentes en la sala han increpado al presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, al grito de insultos como "asesino" o "rata cobarde" y le han echado en cara que muchas muertes eran "evitables". El jefe del Consell ha acudido al homenaje de Estado pese a la negativa de los familiares, que le habían pedido que no lo hiciera y que le acusan de ser “el máximo responsable” de las muertes que causó la dana en Valencia.