Dinamarca pide perdón a las miles de mujeres indígenas que fueron esterilizadas a la fuerza en Groenlandia hace 60 años
- Entre 1966 y 1976, cerca de 4.500 mujeres y niñas de hasta 12 años groenlandesas fueron esterilizadas sin saberlo
- La primera ministra danesa espera abrir una ventana de cooperación entre ambos territorios
"Lo mantuve en secreto y nunca hablé de ello. El DIU [dispositivos intrauterinos] estuvo dentro de mi cuerpo 38 años y me lo quitaron este año", relata, entre sollozos, Katrine Petersen, una de las miles de mujeres indígenas que fueron esterilizadas a la fuerza en Groenlandia, isla perteneciente al reino danés.
El silencio se instauró en las vidas de mujeres que sufrieron el plan de natalidad del Gobierno de Dinamarca. Entre 1966 y 1976, cerca de 4.500 mujeres y niñas de hasta 12 años groenlandesas fueron esterilizadas: las autoridades les colocaron, sin que lo supieran, los dispositivos intrauterinos.
"Este trauma me produjo ira, depresión, y una adicción al alcohol", cuenta Kristine Benthelsen, otra de las víctimas. En los años 70, Groenlandia era una isla llena de madres solteras y jóvenes que no conseguían quedarse embarazadas. Hace un año, 150 mujeres demandaron al Estado danés en busca de indemnizaciones económicas y un perdón público.
Dinamarca pide perdón seis décadas después
Después de 60 años, la disculpa ha llegado este miércoles. La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, ha pedido perdón personalmente a todas las mujeres que fueron víctimas del plan de esterilización. Esta campaña, que duró hasta 1991—año en el que Groenlandia obtuvo la autoridad sobre su sistema sanitario— provocó profundas cicatrices a los isleños y tensó las relaciones con su antigua potencia colonial.
"Como país y Estado hemos cometido errores muy graves a lo largo de nuestra historia en común. Ahora hemos abierto la ventana y nos hemos atrevido a mirar al monstruo a la cara, lo que es importante para que ambos cooperemos", ha señalado Frederiksen en Nuuk, capital de Groenlandia, donde se ha celebrado la ceremonia.
La primera ministra ha añadido que no cree "que podamos lograr la relación más equitativa y adecuada que muchos deseamos a menos que nos atrevamos a abrir incluso los capítulos más oscuros". "Por lo tanto, la disculpa que ofrezco hoy no se refiere solo al pasado. También se refiere a nuestro presente y nuestro futuro. A la confianza mutua que debe existir entre nosotros", ha trasladado Frederiksen a las víctimas, muchas de ellas con los ojos llenos de lágrimas.
La ceremonia marca un paso más en los acelerados esfuerzos de Dinamarca por reparar los lazos con Groenlandia desde que el presidente estadounidense, Donald Trump, comenzó este año a prometer tomar el control de la vasta isla ártica, rica en recursos naturales, por razones de seguridad.
Cicatrices físicas y psicológicas
Una investigación realizada este mes ha revelado que, para finales de 1970, 4.070 mujeres habían recibido dispositivos intrauterinos, aproximadamente una de cada dos mujeres groenlandesas en edad fértil.
Un gran número de ellas reportaron dolor abdominal debilitante y muchas no han podido tener hijos incluso después de que les retiraran el dispositivo, a menudo debido a infecciones graves.
"Recibir una disculpa no significa que aceptemos lo sucedido. Estamos aquí hoy porque no aceptamos lo sucedido", ha declarado el primer ministro de Groenlandia, Jens-Frederik Nielsen. "Pero depende de todos nosotros dar los siguientes pasos", ha añadido.
Naja Lyberth, que lidera el grupo de mujeres que el año pasado solicitó una compensación legal a Dinamarca por la campaña, ha agradecido a Frederiksen sus disculpas y ha señalado que esta ceremonia ha creado un espacio para que las groenlandesas superaran su trauma compartido.
"El Estado ha enfatizado que somos almas iguales dentro del reino danés", ha concluído Lyberth, a quien le colocaron un DIU a los 14 años.