La osezna Alba, trasladada a León para completar su adaptación al medio natural
- La cría fue rescatada hace meses en Teverga tras constatar que no era posible el reencuentro con su madre
- Vivirá entre uno y dos meses en un recinto de aclimatación de osos pardos del monte de Valsemana
Alba, la cría de oso pardo cantábrico rescatada a mediados de abril por agentes del Medio Natural del Principado de Asturias en el concejo de Teverga, ha sido trasladada a la provincia de León para completar su adaptación al medio natural.
La osezna vivirá, concretamente, en un recinto de aclimatación de osos pardos del monte de Valsemana, dependiente de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León, entre uno y dos meses, antes de su reintroducción a la naturaleza.
Alba se encontraba desde su recogida en el Centro de Recuperación de la Fauna Silvestre de Villaescusa, dependiente de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria.
No era posible el reencuentro con su madre
El animal, de 2,1 kilogramos de peso, fue rescatado tras constatar que no era posible el reencuentro con su madre en condiciones de seguridad. La osezna, que ahora pesa 25 kilos, fue hallada en el marco del programa de seguimiento de osas con cría.
Ante el riesgo de deshidratación, se sometió a revisión en una clínica veterinaria en Oviedo, donde se confirmó que no presentaba heridas ni patologías y desde allí fue trasladada al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Cantabria, donde permaneció hasta el pasado jueves.
Las instalaciones de Valsemana se adaptaron en 2019 para poder albergar ejemplares de oso pardo en semilibertad, en una fase previa a su liberación y desde entonces han pasado por allí seis ejemplares: Saba (2019), que ha logrado reproducirse en libertad; Éndriga (2020); Martín (2022), procedente de León; y Cova y Barniedo, recogidos en 2024 en Asturias y León, respectivamente.
Las decisiones sobre los traslados se acuerdan entre las tres comunidades autónomas (Asturias, Cantabria y Castilla y León), que trabajan de manera conjunta por el bienestar y la recuperación de los osos pardos cantábricos, ha informado el Gobierno del Principado.