Los partidos centristas de Austria llegan a un acuerdo para formar Gobierno sin la extrema derecha
- El programa incluye la eliminación de medidas ambientales y la reducción de la inmigración
- El líder del partido de ultraderecha ha ridiculizado la unión tripartita como una "coalición de perdedores"
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Los tres principales partidos de Austria en el Parlamento, conservadores, socialdemócratas y liberales, han alcanzado un acuerdo para formar un Gobierno de coalición sin el ultraderechista Partido de la Libertad (FPO), que ganó las últimas elecciones parlamentarias hace cinco meses.
Los partidos han dado a conocer un programa que incluye aumentar los impuestos a los bancos y las compañías energéticas y restringir a la inmigración, entre otras medidas. El acuerdo ha llegado tras una larga espera desde las pasadas elecciones en septiembre de 2024, la más larga que ha vivido Austria para formar Gobierno desde la Segunda Guerra Mundial.
"Hemos pasado por, quizás, las conversaciones más difíciles para formar un Ejecutivo en la historia de nuestro país", ha asegurado el líder del conservador Partido Popular (OVP) y probable futuro canciller, Christian Stocker, en una conferencia de prensa con sus homólogos de los socialdemócratas (SPO) y el partido liberal Neos.
Posible Gobierno tripartito
Esta nueva coalición tripartita, la primera de Austria desde finales de la década de 1940, asumirá el cargo el próximo lunes, siempre y cuando todos los partidos aprueben el acuerdo.
Estos tres partidos intentaron formar una alianza el pasado enero, sin éxito. El partido euroescéptico y amigo de Rusia, el FPO, recibió, entonces, la oportunidad de formar Gobierno, pero también fracasó.
El líder del FPO, Herbert Kickl, ha ridiculizado esta unión como una "coalición de perdedores" y ha pedido unas elecciones anticipadas que, según los sondeos, aumentarían el porcentaje de votos de su partido con respecto a las pasadas elecciones de septiembre.
Impuestos a los bancos y recorte del gasto
Una de las razones por las que fracasó el primer intento de Gobierno tripartito fue la tasa bancaria, que ahora han impuesto en 2025 y 2026 y será de 500 millones de euros; luego bajará hasta los 200 millones. Tanto el sector bancario como la patronal rechazan esta tasa, pero el Banco Nacional ha indicado que hay razonamientos económicos para imponerla.
Aumentar esta contribución, que en 2023 fue de 152 millones, era una exigencia del SPO y de los representantes de los trabajadores, que argumentan que los beneficios de la banca están en sus máximos históricos.
También se prorrogará el impuesto a los beneficios extraordinarios de las empresas energéticas, aunque no se aplicarán gravámenes a las grandes fortunas o a las sucesiones.
El Gobierno tripartito pretende recortar gasto y ahorrar a través de la eliminación el bono climático, de entre 145 y 290 euros (que se pagaba a cada residente legal permanente), la reducción de las subvenciones, y la rebaja del presupuesto de los ministerios y de la ayuda que cobraban los empleados que dejaban de trabajar para ampliar sus estudios.
Restricciones a la inmigración
El programa de Gobierno, de aproximadamente 200 páginas, incluye políticas más restrictivas hacia los refugiados y medidas contra el islamismo. La inmigración ha estado en el centro del debate político en Austria desde hace varios años.
El nuevo Ejecutivo detendrá inmediatamente la reagrupación familiar, aunque de forma temporal y dificultará aún más la obtención de la ciudadanía austríaca. Según ha declarado en rueda de prensa el futuro canciller, el conservador Christian Stocker, será posible detener completamente la llegada de refugiados si aumenta el número de solicitudes.
Otras de las medidas es la prohibición del uso del velo islámico a las niñas menores de 14 años.
