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Elecciones generales 2019

Rivera rechaza facilitar la investidura de Sánchez pero le ofrece sus diputados para aplicar el 155 en Cataluña

  • El líder de Cs ha trasladado al presidente del Gobierno su intención de impulsar cuatro pactos de estado
  • Este martes Sánchez concluye su primera ronda de contactos con Rivera e Iglesias tras haber visto a Casado el lunes

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Rivera rechaza apoyar la investidura de Sánchez "ni por activa ni por pasiva" y le ofrece su apoyo para aplicar el 155 en Cataluña

El líder de Cs, Albert Rivera, ha mantenido su rechazo a facilitar una investidura de Pedro Sánchez después de reunirse con el presidente del Gobierno en funciones en La Moncloa. En cambio, ha prometido que hará una oposición "fuerte", "leal" con los españoles y "con sentido de Estado". Por ello, Rivera ha tendido la mano al presidente del Gobierno en funciones para aplicar el artículo 155 en Cataluña y le ha propuesto cuatro pactos de estado en materia de educación, inmigración, terrorismo y despoblación.

La reunión se ha producido en la sala Tapies después del encuentro que Sánchez tuvo el lunes con el líder del PP, Pablo Casado -quien sugirió a Rivera que se abstuviese para facilitar la investidura-, y antes de la que tendrá este martes por la tarde con el de Podemos, Pablo Iglesias y que se enmarca dentro de la ronda de contactos del presidente después de las elecciones generales del 28 de abril.

En una rueda de prensa posterior a la reunión, Rivera ha prometido "una oposición sin mochilas, sin complejos, libre de corrupción y que tiene futuro" para proteger a los ciudadanos "de los desmanes del Gobierno" y frente a "subidas de impuestos", para que "no se pise la Constitución con puntos ni mediadores" y por la igualdad entre españoles.

También ha rechazado que el partido vaya a facilitar una investidura de Sánchez si Cs necesita el apoyo del PSOE para algunas comunidades o ayuntamientos tras el 26M. "España no es un álbum de cromos", ha manifestado, asegurando que va a "salir a ganar" las elecciones municipales y autonómicas.

"Mano tendida" a Sánchez en algunas cuestiones

Pero, pese a las grandes "discrepancias" que Cs y el PSOE mantienen en materia territorial, ha ofrecido a Sánchez la "mano tendida" y todos sus diputados y senadores para aplicar el 155 en Cataluña con el que hacer un requerimiento al presidente de la Generalitat, Quim Torra, y evitar la quiebra de la Constitución. También para aplicar promover esos cuatro pactos de Estado que "van más allá de la ideología".

Sin embargo, ha señalado a su vez sus discrepancias con Sánchez en materia de impuestos. "Van a subir el IRPF, el impuesto del diésel y van a mantener el de sucesiones", ha criticado el líder naranja, quien ha prometido que va a "vigilar y controlar que Sánchez e Igleisas no machaquen a impuestos a las familias españolas".

Ha asegurado que la suya será una oposición "distinta a la que ha hecho Sánchez con Rajoy y el PP con Sánchez" ya que será una oposición "que sirva a España, que crea en la victoria de España más allá de los colores políticos" y que aspire a ser "un Gobierno que crezca, no que se descomponga", en referencia al hundimiento del Partido Popular en las pasadas elecciones generales. Una oposición, ha añadido, para que "cuando pase este Gobierno España esté fuerte" y "pueda mirar hacia adelante".

Rivera ha "dado por hecho" que "hay un acuerdo" entre Sánchez e Iglesias que "no lo van a contar antes del 26M" ya que "gobiernan juntos en Castilla-La Mancha y en Madrid", por lo que "no hay que ser un lince para saber que van a formar gobierno". Por ello, cuando lo hagan, habrá materias de Estado en "las que tengamos que sentarnos a hablar", ha añadido. Sin embargo, ha pedido al Ejecutivo que no "intente modificar la voluntad de la Justicia" en una sentencia firme como la que salga del Tribunal Supremo sobre los políticos presos del 'procés'. "Sería indigno cambiar cromos o escaños por indultos", ha zanjado.

Sobre la insinuación de Casado para que Rivera apoyara una investidura de Sánchez, el líder de Cs ha comentado que "bastante tiene con lo que tiene" el PP "como para que le meta el dedo en el ojo". "Lo que dijo habla por sí mismo, que juzgue la gente si un líder político tiene que comentar lo que tiene que hacer otro líder pero no hacerlo él", ha afirmado, incidiendo en que su objetivo es "controlar a Sánchez" y "servir a España".

Moncloa valora la comunicación sobre Cataluña y sobre asuntos de Estado

Tras la reunión, Moncloa ha trasladado a los periodistas que la reunión ha sido "fluida y cordial" y destaca que los encuentros que está manteniendo Sánchez tienen el propósito de "normalizar las relaciones institucionales y el diálogo político".

Destaca que ambos líderes "han constatado la necesidad de mantener una comunicación permanente sobre Cataluña, una cuestión clave, y la posibilidad de avanzar en numerosos asuntos de Estado, tales como las migraciones, la transición ecológica y la energía, la ciencia y el fenómeno de la despoblación".

Al igual que con Casado, no se ha hablado sobre posibles acuerdos postelectorales, prosigue el comunicado, ya que "compete a los grupos parlamentarios", aunque ha destacado que el presidente de Cs "ha querido manifestar desde el principio al presidente en funciones que no facilitará su investidura".

Sánchez se reúne por la tarde con Iglesias

El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, se reunirá por la tarde con Pablo Iglesias para concluir este martes la primera ronda de contactos que ha convocado tras las elecciones generales.

El líder morado ha mostrado este lunes su disposición a dialogar con Sánchez "sin líneas rojas, sin ultimátums y sin arrogancia" para formar un Gobierno de coalición que inaugure "una nueva etapa de colaboración entre progresistas".

Aunque ha admitido que ese Gobierno debe estar liderado "claramente" por el PSOE, ha insistidoen que España necesita un pacto entre varias fuerzas para garantizar "la estabilidad".

La ronda de contactos que está manteniendo Sánchez se trata en cualquier caso, como se ha insistido estos días desde Moncloa, de una toma de contacto, y no de negociaciones propiamente dichas para la investidura, que vendrán ya después de las elecciones autonómicas, municipales y europeas del 26 de mayo y una vez que el Rey inicie la preceptiva ronda de consultas.