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S&P quita la nota máxima a la UE por la creciente dureza en las negociaciones presupuestarias

  • Rebaja un escalón la calificación de riesgos y la deja en "AA+"
  • "Creemos que el perfil financiero de la UE se ha deteriorado", dice 
  • La agencia recuerda que solo seis de los 28 mantienen la AAA

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Sede de Standard and Poor's en Nueva York
Sede central de Standard and Poor's en Nueva York.

Standard and Poor's le ha quitado la triple A a la Unión Europea porque, a su juicio, las discusiones presupuestarias entre sus Estados miembros son cada vez más agresivas y duras: "Las negociaciones presupuestarias de la Unión son cada vez más  difíciles, lo que consideramos que supone un aumento de los riesgos al  apoyo de la UE por algunos Estados miembros". Así, la agencia de calificación de riesgos estadounidense ha rebajado un escalón la nota de la UE y la sitúa en "AA+" con perspectiva estable, lo que implica que S&P no piensa modificarla a medio plazo.

"Creemos que el perfil financiero de la UE se ha deteriorado, y que  la cohesión entre los Estados miembros se ha resentido", ha subrayado la  calificadora en su comunicado. "La calificación del UE depende en parte  de la capacidad y la voluntad de sus miembros para apoyarla", ha dicho  S&P, que ha añadido que "la solvencia en su conjunto de los  Veintiocho miembros de la UE se ha reducido".

La decisión de retirar la triple A es consecuencia de que en los últimos meses algunos de sus miembros más destacados  como Francia han perdido la más alta nota de las calificaciones de  riesgos. Y otros, como Italia, España, Malta, Eslovenia y Chipre han  visto su nota reducida en los últimos meses. El detonante es la retirada reciente de la triple A a Holanda, uno de los siete países de la Unión Europea que mantenían la máxima calificación. Ahora solo seis mantienen la AAA: Suecia, Dinamarca y Reino Unido -que no son del euro- y Alemania, Finlandia y Luxemburgo, miembros de la Eurozona.

Acceso a los mercados

S&P ha subrayado que la decisión afectaba "a la Unión Europea en  tanto que prestatario supranacional". Cabe recordar que el fondo de  rescate permanente, el MEDE, financia los rescates de la zona euro yendo  a los mercados (como el de la banca española) y consigue condiciones más ventajosas al tener mejor  calificación que los Estados a los que presta. Esas condiciones podrían verse afectadas ahora.

De hecho, la agencia calificadora de riesgos ha indicado que a diciembre de  este año,  la totalidad de los préstamos pendientes de pago de la UE  totalizan 56.000 millones de euros y que espera que el periodo de  madurez de esa cartera aumente hasta 19,5 años (desde 12,5 años en  2013)", debido a los pagos pendientes de Irlanda y Portugal. Esos dos  países juntos, según el comunicado de S&P, representan el 80% de los  créditos aún pendientes de pago de la UE.

"La posibilidad de  que la UE no pueda acceder a los mercados de capitales es remota, lo que  creemos que minimiza los riesgos de que los préstamos a Irlanda y  Portugal pudieran no ampliarse", ha subrayado.

La UE, avisada desde 2012

En enero de 2012, la UE ya había recibido una advertencia de revisión a la baja por parte de Standard and Poor's, que entonces puso la perspectiva de evolución de la nota en negativa. Este mismo viernes la misma agencia ha confirmado que la nota de Reino Unido a largo plazo se mantiene en "AAA", pero también advirtió que no excluye rebajarla un peldaño el año que viene debido a que su recuperación económica es frágil.

La agencia recordó que en la actualidad la nota medida de los países contribuyentes netos al presupuesto comunitario es de "AA", un peldaño menos que la UE como entidad supranacional. Asimismo, señaló que la UE pide prestado en los mercados de capital para prestar a su vez a los Estados miembros y a algunos países terceros, al igual que a otros programas como la Comunidad Europea de la Energía Atómica (EURATOM).