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La Policía cuenta con investigadores para evitar casos como el de 'El Columbine' español

  • "No es fácil comprar explosivos en Internet" dice una portavoz de la Policía
  • "Hay investigadores dedicados en exclusiva a rastrear estas compras", apunta
  • El arresto del joven ha sido posible tras cinco meses de investigación
  • Según los últimos datos, J.M.S. "actúo en solitario y sin cómplices"

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Juan Manuel Morales Sierra pasa a disposición judicial

La detención este jueves en Palma de Mallorca de un joven de 21 años que pretendía imitar a los autores de la masacre del Instituto de Columbine, en EE.UU, y atentar en la Universidad de Baleares con 140 kilos de explosivos adquiridos por Internet ha abierto la polémica sobre la facilidad de comprar este tipo de sustancias a través de la red.

Según la Policía Nacional "no es fácil". En palabras de María Fernández, portavoz de la Policía Nacional, adquirir a través de Internet explosivos o sustancias con las que se puedan fabricar los mismos "no es fácil" ya que la Policía cuenta con investigadores especializados que rastrean este tipo de movimientos.

La Policía cuenta con investigadores especializados que rastrean estas compras

"Este tipo de investigaciones funcionan, y existen investigadores dedicados en exclusiva a ello", por lo que "no es fácil" adquirir ese tipo de compuestos a través de la red, ha sostenido la portavoz. Precisamente gracias a este seguimiento se evitó la masacre que pretendía José Manuel Morales Sierra, estudiante de Electrónica.

Cinco meses de investigación

Todo comenzó hace cinco meses cuando los agentes detectaron en Internet comentarios alusivos a la matanza en la escuela de enseñanza secundaria de Columbine en 1999, donde dos jóvenes, a los que el detenido consideraba sus "ídolos", mataron a trece personas.

Los consideraba sus ídolos

El jóven detenido manifestaba sin tapujos sus simpatías -e incluso admiración- por estas dos personas y en su blog incluía secciones en las que relataba idénticos gustos musicales, su afición por las armas, su indumentaria e incluso su aislamiento social que le condujo a situaciones de marginación escolar.

Precisamente el aislamiento social suele ser una de las características comunes en la mayoría de las personas que perpetran o intentan perpetrar una masacre de esta índole. Inestabilidad familiar, rechazo social en el colegio o en la Universidad, problemas psicólogicos o sentirse diferentes a los demás, son algunos de esos rasgos comunes.

Actúo en solitario y sin cómplices

Según han señalado fuentes de la Policía Nacional, el detenido actuó "en principio" en solitario, sin cómplices, "ya que por el momento se ha detectado a ninguna otra persona relacionada con este caso".

Las mismas fuentes también han precisado que el joven se había independizado hace poco, aproximadamente un mes, y residía en una vivienda en la calle Can Gotleu de la capital balear.

Asimismo, han indicado que el detenido tenían conocimientos de electrónica, ya que había cursado estudios de esta rama de formación profesional, y en la actualidad se ganaba la vida jugando partidas "on line", como poker y otros juegos de apuestas a través de Internet.

Intentó comprar armas sin éxito

Durante estos meses de investigación y seguido cautelosamente por la Policía, Juan Manuel Morales Sierra intentó varias veces adquirir de forma ilegal armas y, al no lograr este objetivo, solicitó permiso de tenencia de armas a la institución correspondiente, para así poder comprarlas de forma legal, lo que tampoco consiguió.

Su último objetivo fue aprovisionarse de una gran cantidad de sustancias explosivas y químicas ya que -como explicaba en su propio blog- sabía con detalladamente cómo fabricar diversos tipos de explosivos. El detenido también había adquirido, según la Policía, varias ganzúas para manipular los tubos en los que pretendía armar las bombas y que también le eran útiles para forzar las cerraduras y robar armas en establecimientos que ya tenía controlados.

La detención se produjo precisamente cuando el joven recibía en su domicilio los más de 140 kilos de explosivos, de los cuales 125 eran de amonio nitrato con nitrógeno, cuyas características son muy similares al amonal y al amosal. Otros 12 kilos eran de potasio nitrato cristal; 500 gramos de sodio sulfuro hidrato; un litro de ácido nítrico y otro de ácido sulfúrico y un matraz "Erlemmeyer" de 500 mililitros.

Pasa a disposición judicial esta tarde

El joven pasará en la tarde de este viernes a disposición del juez, según han informado fuentes judiciales.

El arrestado permanece detenido en dependencias de la Policía Nacional y será conducido a los juzgados de Vía Alemania para declarar ante el juzgado de guardia, que por turno toca precisamente al que lleva el caso.

El juzgado de instrucción 9 de Palma instruye desde hace unos cinco meses y bajo secreto de sumario la investigación contra este joven palmesano.