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Las negociaciones del G20 siguen estancadas por la 'guerra de divisas'

  • La quinta cumbre extraordinaria del organismo se inicia este jueves en Seúl
  • China y EE.UU. han mantenido acusaciones curzadas por los tipos de cambio

Ver tambien: Especial cumbre del G20 en Corea del Sur

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La "guerra de divisas" en la agenda de la cumbre del G-20 de Seúl

Los negociadores de los países del G20 han sido incapaces, hasta el momento, de llegar a un acuerdo sobre el sistema de tipos de cambio y la cotización de las divisas, lo que ensombrece el panorama de la cumbre que han iniciado esta madrugada los mandatarios del grupo en Seúl.

El portavoz de la cumbre, Kim Yoon-kyung, ha explicado que las diferencias entre los países sobre los tipos de cambio son tan intensas, que los negociadores no han sido capaces ni de llegar a un acuerdo sobre la hora para reanudar las conversaciones.

"Hemos sido incapaces de llegar a un acuerdo de momento sobre los tipos de cambio y sobre los desequilibrios por cuenta corriente", ha resumido Kim, quien ha asegurado que los negociaciones se prolongaron durante 14 horas, hasta la medianoche de ayer miércoles.

Comunicado final

Los negociadores de cada país trabajan desde hace días para elaborar el comunicado final de la cumbre, que adoptarán el viernes los jefes de Estado y de Gobierno del G20, el grupo que asumió hace dos años la coordinación las políticas económicas de los países para salir de la crisis.

Los miembros del G20, entre los que están los ocho países más industrializados del planeta y gigantes emergentes, como China, India o Brasil, concentran el 85% del Producto Interior Bruto (PIB) de todo el mundo.

Si bien los negociadores han consensuado ya la mayor parte del comunicado, relativo a asuntos como la reforma financiera, la lucha contra la pobreza o los rescates bancarios, queda pendiente el aspecto que más polémica ha levantado en las fechas previas a la cumbre, los tipos de cambio.

Acusaciones cruzadas

Estados Unidos acusa a China de frenar voluntariamente la cotización del yuan para hacer sus exportaciones más atractivas y atribuye a esta situación la falta de empuje de las empresas estadounidenses.

China y otros países con superávit comercial, como Alemania, critican a asu vez Estados Unidos por inundar de dólares la economía mundial, después del anuncio de la Reserva Federal estadounidense (FED) de una expansión monetaria de 600.000 millones de dólares -lo que en la práctica supone una depreciación del dólar-.

Otros países emergentes, como Brasil, se encuentran en medio de la pelea: por un lado consideran que China les está obligando a devaluar para no perder competitividad; por otro, acusan a las naciones desarrolladas como EE.UU. por sus bajos tipos de interés, que hace que los flujos de capital se refugien en naciones que ofrecen rendimientos mayores, como los emergentes, con el consiguiente peligro de que se creen burbujas especulativas y se dispare la cotización de sus monedas.

Nuevas reuniones

El portavoz de la cumbre ha adelantado que probablemente la discusión sobre los tipos de cambio quedará aparcada hasta la cena de los jefes de Estado y de Gobierno, acto con el que quedará oficialmente abierta la cumbre. Después de la cena, es probable que los negociadores de cada país se reúnan de nuevo.

También ha explicado que sobre la mesa hay varias posibilidades, entre ellas la de evitar el término "devaluación" y sustituirlo por "infravaloración", que genera menos susceptibilidades entre los países.

No obstante, no ha podido avanzar cómo quedará recogido el asunto en el comunicado final de la cumbre, dado que de momento no existe un acuerdo.