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Los comunistas se quedan a un escaño del control absoluto del parlamento en Moldavia

  • El recuento de los votos del extranjero les arrebata la mayoría absoluta
  • Tienen 60 de los 100 diputados, pero necesitaban 61 para formar gobierno
  • Ahora dependen de la oposición, que puede bloquear el nuevo ejecutivo
  • Los opositores podrán acceder a las listas de electores para comprobar si hubo fraude
  • La Fiscalía inicia una investigación por intento de golpe de Estado en los disturbios

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La Comisión Electoral Central de Moldavia (CEC) ha anunciado los resultados definitivos de los comicios parlamentarios del pasado domingo, que confirman la victoria de los comunistas, pero no les dan el control del Legislativo, en el que la oposición por un solo diputado podrá bloquear la formación de gobierno.

El gobernante Partido de los Comunistas (PC) de Moldavia ha obtenido en las elecciones el 49,48% de los votos, según ha informado el secretario de la CEC, Yuri Chocan, a la agencia rusa Interfax.

Además de los comunistas, acceden al Parlamento moldavo tres formaciones opositoras: el Partido Liberal (13,14% de los votos), el Partido Democrático Liberal (12,43%) y la alianza Nuestra Moldavia (9,77%).

Según los resultados definitivos, el PC obtiene en la nueva Cámara 60 de los 101 escaños, cuando necesitaría 61 (tres quintas partes) para poder formar por sí solo Gobierno y elegir al presidente del país, lo que en Moldavia es prerrogativa de los diputados.

La oposición, a su vez, se hace con 41 escaños, lo que le permite bloquear la formación del Ejecutivo y la elección del jefe de Estado o plantear sus condiciones a los comunistas a cambio de su apoyo.

En los comicios participaron 1.555.557 millones de electores, el 59,5% del censo, ha indicado Chocan, quien precisó que fueron los resultados de la votación en el extranjero los que rebajaron el porcentaje obtenido por los comunistas, cifrado inicialmente en el 50%, y mejoraron las posiciones del opositor Partido Liberal.

Denuncias de fraude

Por otra parte, Chocan ha decidido de que la CEC ha decidido permitir a los partidos opositores verificar las listas de los electores y los protocolos del recuento de los votos, en respuesta a sus denuncias de fraude.

La oposición moldava ha informado mismo de que entregó a la CEC supuestas pruebas de fraude en los comicios parlamentarios, cuyos resultados motivaron la víspera graves disturbios en la capital, Chisinau.

"Hemos entregado a la Comisión un dossier con casos documentados de irregularidades y nos han prometido estudiarlo sin demora", ha asegurado a la prensa Dorin Chirtoaca, alcalde de Chisinau y dirigente del opositor Partido Liberal, según la agencia rusa RIA-Nóvosti.

Las protestas en la capital moldava comenzaron el lunes pasado, tras el anuncio de los resultados preliminares que daban al gobernante Partido Comunista el control absoluto de la Cámara y el derecho de formar Gobierno y elegir al presidente del país.

La oposición denunció un fraude y llamó a sus partidarios a manifestarse en la capital, pero las protestas degeneraron en violentos choques con la Policía y el saqueo de la sede del Parlamento y la residencia presidencial.

Investigación de la Fiscalía

El presidente de Moldavia y líder comunista, Vladímir Voronin, ha acusado a Rumanía de estar detrás de los disturbios, que calificó de intentona golpista, impuso un régimen de visados con el país vecino y declaró persona no grata al embajador rumano en Chisinau.

Mientras, la Fiscalía General moldava ha incoado un expediente penal por "intento de derrocar a las autoridades, perpetrar un golpe de Estado y usurpar el poder" a raíz de los disturbios, durante los cuales fueron detenidos casi 200 manifestantes violentos.

"Los órganos de instrucción definirán a los organizadores de los desórdenes y decidirán el grado de culpabilidad de cada uno", ha asegurado a la prensa el fiscal general, Valeri Gorbulia, quien precisó que los culpables pueden ser condenados a hasta 25 años de prisión.