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Una filial de Wal-Mart raciona sus ventas de arroz en sus establecimientos en Estados Unidos

  • Los compradores sólo pueden adquirir cuatro bolsas de nueve kilos por visita
  • Los precios internacionales del arroz han subido un 68% desde que comenzó el año
  • Brasil ha suspendido sus exportaciones de este cereal

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Los grandes supermercados Wal-Mart racionan la venta de arroz

Sam's Club, una de las divisiones de los grandes almacenes estadounidenses Wal-Mart, ha limitado las ventas en sus establecimientos de varios tipos de arroz. Esta medida de racionamiento es una señal inquietante del temor a una caída en la producción mundial de este cereal.

La limitación en las ventas afecta a los arroces Jasmine, Basmati y blanco de grano largo. Los compradores sólo pueden adquirir cuatro bolsas de arroz de nueve kilos por visita. Sam's Club ha dicho que estas bolsas grandes son adquiridas principalmente por propietarios de restaurantes o clientes de servicios de comidas.

El grupo ha justificado esta decisión en las "recientes tendencias en la oferta y la demanda". La cotización del arroz en el mercado estadounidense de futuros alcanzó el pasado miércoles un récord absoluto, lo que es fiel reflejo de un problema de escasez de oferta.

Por otra parte, Sam's Club ha asegurado que el racionamiento no afectará de momento a sus ventas de harina o aceites comestibles. El distribuidor Costco Wholesale Corp. advirtió precisamente hace unos días del fuerte aumento registrado en la demanda de arroz y harina, dado el deseo de muchos consumidores de proveerse de estos productos ante un eventual desabastecimiento de los mismos. Costco ha señalado que algunos de sus almacenes han puesto limitaciones a las ventas de ambos productos, pero que estaba intentando modificar estas restricciones para atender la demanda de los clientes.

El presidente de Costco, James Sinegal, ha transmitido a Reuters su convicción de que detrás de este auge en la demanda se halla el clima de preocupación instalado en los consumidores por las noticias propagadas por los medios de comunicación.

La carestía de alimentos, impulsada por la especulación financiera, los altos precios del petróleo, el desvío de cosechas para producir biocarburantes y la creciente demanda de mercados emergentes como China y la India, ha sido causa de disturbios en muchos países. Varios países africanos, Indonesia y Haití se cuentan entre los más afectados.

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha advertido de los riesgos de esta subida en los precios para el crecimiento global y la seguridad. Los precios del arroz han subido un 68% desde que se inició el año. En países como la India y Vietnam se han llegado a imponer prohibiciones a la exportación de arroz, con el fin de frenar el alza de los precios internos. La India y Vietnam son respectivamente el segundo y el tercer productor del mundo de este producto.

Brasil suspende sus exportaciones de arroz

El Gobierno de Brasil ha suspendido sus exportaciones de arroz de los inventarios públicos y pedirá al sector privado que haga lo mismo, en un esfuerzo por defender el mercado interno y contrarrestar las alzas de precios del cereal. El gigante sudamericano exporta 800.000 toneladas anuales de arroz.

El ministro brasileño de Agricultura, Reinhold Stephanes, ha dicho tras un acto oficial en la capital de la nación que "como Brasil posee un excedente muy pequeño, es mejor guardar para el mercado interno". Ha explicado que entre los mecanismos para restringir los envíos podrían utilizarse los aumentos de tarifas de embarque.

La suspensión de ventas de inventarios del Gobierno comenzó la semana pasada, ha afirmado Stephanes, quien tiene previsto reunirse con empresarios privados para pedirles que adopten la misma medida.

El ministro ha expresado la preocupación del Gobierno por el abastecimiento del mercado interno en los próximos meses. Los inventarios estatales alcanzan a 1,6 millones de toneladas.

Según datos del Centro de Estudios Avanzados en Economía Aplicada -una de las principales referencias en el sector agrícola brasileño-, el saco de arroz de 50 kilos pagado al productor ha subido el 41% en el último mes en el mercado brasileño, hasta 18,76 dólares al cierre del martes.

El Ministerio de Agricultura ha calculado que la producción del cereal en la cosecha de 2007 alcanzó las 11,3 millones de toneladas, con un ligero descenso respecto a la temporada anterior. El arroz, junto con el fríjol negro, es la base de la alimentación en los estados más populosos de Brasil.

Por otra parte, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva ha informado que durante su reciente viaje a Ghana, representantes de varios países se le acercaron para intentar comprar cereal brasileño. "Todo el mundo quiere comprar arroz y Brasil no tiene un inventario del que pueda desprenderse. No podemos vender", ha asegurado Da Silva antes de añadir que "las personas aguantan crisis económicas y políticas, pero cuando el mundo padece crisis de alimentos tenemos problemas serios".