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Balonmano

Jordi Ribera, renovado como seleccionador de balonmano: "Nunca he tenido medallitis"

  • El seleccionador ha hablado en rueda de prensa sobre su renovación con los 'Hispanos' hasta 2028
  • La continuidad del proyecto ha sido clave para seguir al frente del equipo nacional

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Jordi Ribera: "El mayor orgullo no es una medalla, es el trabajo global"

Jordi Ribera lleva al frente de los Hispanos desde el año 2016 y tras el anuncio de su renovación ha querido expresar que "la continuidad del proyecto actual ha sido fundamental para renovar por cuatro años más". En total son siete, más un ciclo olímpico más.

En un primer momento,  Ribera pensó en dejar el equipo porque la decisión de dirigir a un club era una posibilidad que pasaba con fuerza por su mente. "Después del Mundial mi idea era buscar un club para entrenar, porque siempre me pasa lo mismo, cuando llevo mes y medio entrenando a la selección y un mes y medio preparando partidos, me gusta tanto, que deseo seguir haciéndolo".

"El mayor orgullo no es solo una medalla, también un trabajo global"

Dentro de su actual puesto, "hay una gran cantidad de cosas, como el trabajo de la búsqueda de talentos o la formación de la gente joven que no podría hacer si estuviera atado a un club", ha señalado Ribera. Además de hacer eco en que durante este periodo "se han cumplido con creces los objetivos" que se había marcado cuando aterrizó en los 'Hispanos'.

Ha hecho un repaso por todo lo que la selección española de balonmano ha conseguido, y lo que no. Antes de lograr el oro en el Europeo del 2018 en Croacia, había dudas, pero se disiparon y a partir de ahí hubo un punto de inflexión. "A partir de 2018 se abrió una etapa diferente, se quedó por primera vez campeón de Europa, y luego ese inmaculado Europeo del 2020 que no sólo nos permitió volver a quedar campeones de Europa, sino lograr la clasificación para los Juegos Olímpicos de Tokio y que los jugadores pudieran quitarse esa espina de quedarse fuera de los Juegos de Río", recordó Ribera.

Pero sobre todas las cosas, lo que el seleccionador remarca es que "nunca he tenido 'medallitis'. Las medallas están ahí y no dejan de ser fruto del buen trabajo, pero realmente de lo que me siento satisfecho es del proyecto global, del trabajo realizado con las categorías de base, de la formación de un grupo de trabajo. El mayor orgullo es que cuando me vaya de aquí no deje sólo una medalla o un resultado positivo, sino un trabajo global, eso es lo importante", indicó Ribera.