Doblete de Mbemba en la final de la Taça ante el Benfica y del Oporto en Portugal, con dedicatoria a Casillas
- El central aprovechó un error del portero Odysseas para abrir el marcador y luego mató el partido a pase de Otavio
- Un Clásico portugués muy trabado con muchas tajetas, Vinicius puso chispa con un tanto de penalti a los instantes finales
FRAN MENA
El Oporto logra el doblete en Portugal al vencer al Benfica en la final de la Taça (2-1). El equipo de Sergio Conceiçao, a pesar de acabar con uno menos por la expulsión de Luis Díaz y sin su técnico por el mismo motivo, se impuso en la final con dos goles de Mbemba aprovechando un fallo en el despeje de Odysseas en el primero y un gran centro de Otavio para el segundo. Vinicius puso emoción al final con un tanto de penalti.
El partido comenzaba con el Oporto bien plantado en campo contrario, tocando el balón y sin perderlo en posiciones compicadas. Avisaba Corona con una jugada desde el pico del área que acabó en disparo al palo corto y estuvo rápido de reflejos Odysseas Vlachodimos para atrapar el balón en dos tiempos.
En el minuto ocho el árbitro mostraba la que sería la primera de muchísimas tarjetas amarillas en un Clásico portugués con más destrucción que creación, a Luis Díaz. En el once Rubén Dias veía la segunda y así una tras otra.
Rondando la mitad del primer tiempo llegó el primer acercamiento del Benfica, a balón parado, pero el remate Rubén Dias fue un despeje. Corona era el más activo del campeón de la liga portuguesa, tuvo otra ocasión en la que no supo definir en una buena posición.
La expulsión de Luis Díaz cambia el guión
Las múltiples amarillas suelen acabar en alguna roja, eso le pasó a Luis Díaz. Dejó al Oporto con diez antes de acabar la primera parte y el entrenador Sergio Conceiçao le acompañó poco después a los vestuarios por protestar reiteradamente.
En cuanto al juego, el Benfica se estiraba por la superioridad numérica pero sin mucha clarividencia en ataque. Así se llegaba al descanso, con muchas más tarjetas (6) que comentar que ocasiones (3).
La segunda parte comenzó con... otra amonestación. En el primer minuto de la reanudación Weigl la vio por cortar un avance del rival y de la falta vino el primer gol del partido. Mbemba remata muy potente un regalo de Odysseas en forma de despeje horrible.
El Benfica comenzaba a dominar el encuentro, a tocar en tres cuartos de campo pero sin superar la defensa rival. Solo conseguía algún disparo lejano y el Oporto amezaba con la contra.
El cuadro de Sergio Conceiçao volvió a marca a balón parado y lo hacía de nuevo Mbemba. Esta vez convirtió un gran centro de Otavio y el VAR se encargó de validar una acción dudosa, por posible fuera de juego.
Vinicius pudo poner emoción a los veinte minutos finales con un remate de cabeza en el área pequeña tras una falta sacada con premura. El máximo goleador del conjunto lisboeta la picó en exceso y salió elevada.
Vinicius recorta distancias y Jota tuvo el empate
Un penalti por mano en el área del Oporto lo transformó Carlos Vinicius en el 2-1 y el Benfica volvía a creer, al menos, en forzar la prórroga. No se quedó ahí la cosa, pues Jota pudo empatar pero su disparo desde la frontal se encontró con el poste.
Al final, el campeón de Liga consigue también la Copa y firma una gran temporada en Portugal.
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