Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Este lunes 8 de marzo, de acuerdo con el plan de desescalada anunciado por el Gobierno británico, los colegios de Inglaterra han reabierto después de casi tres meses. Lo han hecho bajo extremas medidas de seguridad y tests masivos de coronavirus.

Con el cierre de los centros escolares el pasado 5 de enero tras el anuncio del confinamiento nacional (aunque ya estaban cerrados desde mediados de diciembre por las vacaciones de Navidad), la mayoría de los niños británicos, a excepción de los hijos de trabajadores esenciales, han tenido que seguir las clases telemáticamente. En los últimos 12 meses, apenas ha habido 3 meses de clases presenciales.

El primer paso de la desescalada que finalizará, si no se altera la hoja de ruta, el 21 de junio. Además de la vuelta al cole, también permitirá las reuniones al aire libre de dos personas no convivientes por motivos de ocio o de ejercicio o las visitas de una persona a las residencias de ancianos.

Foto: REUTERS/Andrew Couldridge

Renovado el acuerdo entre la National Gallery de Londres y la Hugh Lane Gallery de Dublin, a cuenta, precisamente, del legado de Hugh Lane, el coleccionista nacido la capital irlandesa y afincado después en inglaterra. Las 39 pinturas de algunos de los artistas más importantes de la historia se mostrarán en Dublín durante, al menos, los próximos 10 años.

Los ecos del conflicto de 1982, la corta pero traumática guerra entre Argentina y el Reino Unido por la posesión del archipiélago, siguen resonando sobre cualquier acercamiento a estas tierras salvajes del Atlántico Sur. Los argentinos sostienen que las Malvinas, a unos quinientos kilómetros de su costa continental, forman parte de su territorio nacional por derechos históricos. Los británicos, con presencia permanente en las islas desde hace más de siglo y medio, mantienen que su soberanía es indiscutible, máxime tras la victoria militar y el referéndum de 2013. En esa consulta, no reconocida por Naciones Unidas, la práctica totalidad de la población malvinense se pronunció a favor de que su hogar –para ellos, Falkland Islands– siguiera dependiendo de Londres como territorio británico de ultramar. En nuestro viaje sonoro intentamos comprender la complejidad del problema con la ayuda de Rogelio Núñez, investigador asociado del Real Instituto Elcano especialista en América Latina. También contamos con la voz de Andrea Barlow, isleña de séptima generación con raíces británicas que dirige el Falkland Islands Museum y la oficina de turismo del archipiélago. Sorprenden los colores del mar, el relieve, la peculiar vegetación adaptada al clima preantártico así como la fauna autóctona, que incluye mamíferos marinos y pingüinos de varias especies. Nos adentramos en el paisaje y la sociedad local en compañía de Karina Serpa, uruguaya afincada en Stanley desde hace años, y de Mario Cayón, guitarrista argentino que apuesta por el entendimiento y la reconciliación con su iniciativa viajera Música para la Paz. Aportan también sus visiones el guía Carlos Pelli, que vuela regularmente a la isla Soledad (East Falkland) con grupos de turistas argentinos, y el periodista colombiano Nicolay Abril, que pudo visitar este remoto lugar durante su cobertura informativa del referéndum.

Por la mañana asisten a clase y por la tarde guardan cola para recibir comida de los bancos de alimentos. Es la situación que están viviendo miles de estudiantes internacionales en el Reino Unido. Se trata de veinteañeros, la mayoría procedentes de India, que estudian másteres universitarios de relaciones internacionales o comercio internacional yal no poder trabajar porque los establecimientos están cerrados por la pandemia se han quedado sin ingresos. “He pagado 14.000 libras por la matrícula y pago 400 libras de alquiler a la semana”, dice Angyca que hace cola cada semana para coger alimentos en el barrio de Southwark. El coordinador de este banco de alimentos asegura que atienden a cerca de 2.000 jóvenes a la semana. “Tenemos problemas para pagar la renta. Le he pedido al casero tiempo, pero nos ha dicho que no”, dice Monica en la cola.

Informa Sara Alonso, corresponsal de RNE en Londres

El Reino Unido es uno de los países más contaminantes con plásticos y, durante años, la mayoría de la basura plástica que producían los británicos fue a parar en los países menos desarrollados. La Unión Europea prohibió esa práctica, pero al quedarse fuera del club comunitario, el Reino Unido ya no tiene que respetar esa exigencia. Una situación que preocupa a los ecologistas, que piden a Londres comprometerse en no mandar sus plásticos a países terceros. Es un reportaje de Sara Alonso.

Tras haber recibido la segunda dosis de alguna de las vacunas contra el coronavirus, la reina de Inglaterra ha animado a la población británica a colaborar en el programa de inmunización puesto en marcha en el país. A través de una videoconferencia con responsables sanitarios, Isabel II, una de las 700.000 personas que ha recibido la doble dosis en el país, ha pedido solidaridad a los desconfiados y que piensen en el bien común de la sociedad.